A decir verdad sabía que había algo en mi cuerpo que no estaba bien, algo que me decía día y noche que algún día tendría que afrontar los dolores qué estaban en mi vientre.
Llegamos a casa y mamá tere me dejo sola para descansar. Una hora más tarde entró una llamada a mi teléfono y me di cuenta que era Marel quien estaba llamando.
Sin tanto titubeo contesté.
—H-Hola, quería saber como estas. ¿Te interrumpo?.
—Hola, estoy bien gracias por preguntar, no interrumpes para nada acababa de recostarme. ¿Cómo estas tú?
Dió un suspiro largo y luego contestó —Estoy bien después de todo, sabes, después de lo que pasó me quede arrepentida durante estos días, tu no tienes por qué pagar sobre algo que no es tu responsabilidad, siempre quise saber que se sentía besar a una mujer pero realmente no me atrevía, y en ese momento estaba enojada. ¿Me puedes perdonar?.
—No te preocupes, a veces las cosas suelen suceder solo porque si. —Colgué el teléfono y me volví a tapar con la cobija, estaba realmente cansada.
Mamá tere llamó a la puerta, traía un vaso con agua y medicamentos.
—¿Tengo que tomar medicamentos? —Me desagradaba la idea en realidad, sobre todo cuando no sabía con que fin.
—Mira... Te encontraron un quiste de 10 cm en el ovario derecho, y miomas en la matriz así que tienes que tomar medicamentos para poder deshacer lo sin antes recurrir a cirugía. En realidad me preocupaba que tuvieras algo más.
—Bueno, estaré bien.—Hasta cierto punto era grave médicamente, pero no para mi, yo me sentía bien.
—¿Puedo saber quien te llamó? —Mamá tere dejo el vaso en la mesita junto a la cama y después se sentó junto a mi.
—Marel. —Trate de evadir el tema de nuevo, pero no podía levantarme e irme, así que reír para no llorar.
—¿Quien es Marel?
—La chica a la cual le di un beso, o ella me besó, ya ni siquiera sé que fue lo que pasó. Ella dice que fue una venganza porque estaba enojada, y curiosidad.
—¿Quieres hablar de eso? —La seriedad en su rostro no me gustaba para nada.
—Solo pasó, yo estaba corriendo, la vi mal y me acerque, resulta que estaba llorando y pues ella se levantó y me dio un beso, ahorita llamó para disculparse.
—Hace tiempo, Jenna, yo también fui joven y mucho más guapa que ahora, mi hermoso cabello castaño y mis ojos verdes de verdad que eran los mejores atributos por acá, viví un tiempo aquí y luego regrese a México qué fue cuando conocí a tu abuelo, pero estando aquí pasaron cosas, cuando me salí de casa la primera vez yo venía buscando huir de lo que sentía, pero acá encontré a quien me hizo ver la realidad. Cuando nos conocimos apenas teníamos 19, el mayor sueño de ella era entrar al ejército, en lo que fuera, pero su mayor pasión era ser piloto, estuve cuando hizo su inscripción, cuando fue a hacer sus exámenes y su primer día. Nos veíamos cada fin de semana, la iba a recoger y luego la llevaba a su casa, pero antes pasábamos a la playa, y platicábamos de todo lo que habíamos hecho en la semana. ¿Entiendes a qué punto voy?.
—No creo que sea mi caso.—La miré con tristeza y ella siguió.
—Cuando estaba por graduarse, casi 2 años después de haber entrado. La enviaron a una misión, ella estaba en su mejor etapa, era una piloto hermosa y valiente, fue. No supe de ella por medio año y creí que había muerto. Y me fui de aquí.
—¿De verdad murió?.
—No fue sino que tiempo después, cuando regresé por segunda ocasión, y vine al mismo lugar en la playa donde la veía. Estuve 3 horas o más en lo que pensaba que hacer con mi vida y de repente alguien me tapó los ojos. —Sabía que algún día volverías a estar aquí.— y ahí estaba ella, embarazada.
Durante un par de minutos el cuarto se quedó en silencio y luego me acerqué para abrazarla, varias lágrimas caían sobre su mejilla y claramente podía apostar que estaba reviviendo todo aquello.
—Se había casado, encontró a alguien en Escocia y se enamoró, quizá fui yo quien se equivocó, quien tomó en serio todos besos en la playa, las cenas a la luz de la luna.
—¿Mi abuelo no fue el amor de tu vida?.
— Dav fue mi primer amor pero tu abuelo fue el amor de mi vida, quien me amó y me cuidó, no por nada le di 4 hijos. Pero todas las noches pensaba en ella y sentía que había sido una cruel mentira besar a tu abuelo todas las mañanas.
—Wow... Jamás había escuchado ese nombre. —El momento era tan cautivador qué no sabía que decir, quizá no debería decir nada, pero fue lo único qu pude vocalizar.
—Fue lo primero que me cautivo de ella, por eso insistí en tu nombre. Desde que tu madre me dijo que estaba embarazada supe que tu serias algo especial.
—Entonces soy el recueros de Dav.
—Dav ya no existe, solo existe Jenna.
—¿ya no existe para ti?.
—Ese día la felicite, ella sabía que causaba un sentimiento muy grande el saber que estaba casada, que cuando se despidió me prometió volver para continuar la historia, entonces alguien que sabía que me iba a lastimar con sus acciones no podía amarme. Me despedí y no volví a saber de ella.
El primer lugar que pise aquella tarde fueron los casinos, tuve un buen novio y mirame, ahora no hay nada que me preocupe en la vida.
—¿Los casinos los tienes desde que estaba mi abuelo?.
—Ahora es nuestro secreto Jenn.
Ambas sonreímos cómplices, pero la diferencia es que ella tenía el corazón rotó y yo solo estaba aprendiendo a vivir.
—Por cierto, ¿Podemos adoptar un perro?.
—¿Extrañas a Rufino?.
Justo en el corazón, no había podido contarle a mamá tere lo que pasó.
—Rufino—Las lágrimas comenzaron a caer, Rufino murió hace meses, o no sé, un dia simplemente desapareció y justo ayer me dijo que no era mi culpa que el no haya regresado, que fue muy feliz conmigo y que yo tenia que seguir aquí en la tierra.
—Lo siento mi vida, sé que el fue tu mejor compañero de vida, pero si tuvo la paz de despedirse de ti entonces fuiste buena dueña.
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Editado: 29.12.2025