Al día siguiente:
Narra Alison.
Me encuentro en la oficina de Alexander, al parecer el contrato ya está, es hora de firmar.
No quiero, pero lo tengo que hacer.
No permitiré que mi hermano pase días en un orfanato cuando me tiene a mi.
—Alison te estoy hablando —. La voz de Alexander me saca de mis pensamientos.
—Y-yo no te escuché —. Respondo.
—Ya me di cuenta, aquí está el contrato, ¿lo quieres leer?—. Me pregunta.
—Claro, no voy a firmar algo que no he leído —. Tomo el documento y lo comienzo a leer.
—¿Alguna duda?—. Pregunta el abogado de Alexander.
—Ya vivimos juntos, ¿Por qué establecerlo aquí?.
—Nos mudaremos de la casa de mis padres, como mi esposa tendrás que vivir en mi casa—. ¿A caso tiene casa? Entonces porque vivía ahí.
—P-pero...
—¿Pretendes que vivamos separados? Estaremos casados, para que nadie sospeche tenemos que vivir juntos, apartado 3, “nadie debe de saber que es un matrimonio falso”
—Bien.
Seguí leyendo hasta que llegue a la parte que me interesa.
Tendré la custodia de mi hermano.
—Aqui dice que vas a adoptar a mi hermano—. Eso no era parte del contrato.
Solo tenía que ayudarme a sacar a mi hermano de ahí.
—Sere tu esposo, así que al ser pareja podremos adoptar a tu hermano como nuestro hijo, la mejor manera de que te den a tu hermano es que lo adoptemos como pareja, no solo tú, también yo.
—Gracias—. Realmente estoy agradecida con él, se que hay algo detrás de su propuesta y de este contrato, pero no importa, si con esto puedo tener a mi hermano conmigo lo are.
Qué el obtenga lo que quiera, yo solo quiero a mi hermano.
—De nada, ahora, espero que estés conforme con los demás puntos aclarados ahí, tendrás que aparentar que somos un perfecto matrimonio, irás conmigo a todas las reuniones, no solo como mi secretaria si no también como mi esposa, a los eventos públicos también irás, mientras estés conmigo podrás disponer de mi dinero, de tus gastos y de los de tu hermano me encargo yo.
—No es necesario, por eso trabajo, me ayudarás demaciado con la adopción de mi hermano, no te preocupes por lo económico yo puedo—. No quiero deverle nada más.
—Dije que no, serás parte de la familia Williams, la esposa de Alexander Williams tiene que estar a la altura del apellido, tienes que lucir como alguien de la clase alta, así que arréglate bien por favor.
—Me visto bien, ¿Qué tiene de malo mi aspecto?—. es el colmo.
¿Ahora también me va a decir cómo me tengo que vestir?
—Se cual es tu estilo Alison, y está bien, si así te sientes cómoda, pero vamos a estar a la vista de los demás, es donde todos te podrán ver y juzgar y lo que menos quiero es que estés en la boca de las personas y que te juzguen por el mínimo detalle.
—Las personas siempre van hablar, hagas algo bien o hagas algo mal, si no hablan de uno no están felices, nací para ser real no perfecta.
—Lo se, pero lo vas hacer te guste o no, podrá elegir tu ropa, como arreglarte y que lucir, siempre y cuando lo hagas bien, si quieres yo te contrato a una asesora—. Pelear con él por algo así es tonto.
—No, yo sé hacerlo.
—Bien, ¿Alguna otra duda?—. Me preguntó.
—Si, ¿Cómo está eso de que vamos a dormir juntos? —. Eso sí que no.
—Tengo gente trabajando en mi casa, así que no pueden saber que dormimos por separado, eso podría perjudicar.
—Ashhh!!, lo que me faltaba, entonces también puedo poner mis condiciones, es lo justo.
—¿Es Necesario?—. Pregunto molesto.
—Si
—Bien.
—Quiero que Oliver y su tío sigan trabajando con nosotros, no puedes alejarlos de mi, son mi familia, si tú no les quieres pagar yo lo are.
—Bien, pero Oliver tiene que saber que serás mi esposa.
—Lo sabe.
—Te gustaba, no puedes serme infiel así sea un matrimonio bajo contrato.
—Jamas lo aria, a diferencia de ti, yo si se que es la fidelidad, pero como se que no aguataras sin follar durante un año, puedes hacer lo que quieras con cuántas mujeres quieras, siempre y cuando nadie se entere, ni yo te encuentre haciendolo en tu oficina.
No me gusta la idea pero prefiero estar consiente de que yo se lo dije.
—Alison...
—¿Qué? ¿Crees aguatar un año?—. Si, lamentablemente el matrimonio será un año, no se porque, pero ese es el tiempo que estaremos atados.
—Retirese, le mandaré mensaje cuando esto termine —. Le dijo al abogado quien salió sin discutir.
—Tenias que decirlo frente a él —. Me regaña.
—No es secreto, pero como ya salió, puedes hacer lo que quieras con tu vida sexual.
—No Necesito a alguien más, cuando te voy a tener a ti.
—Sigue soñando, nunca me acostare contigo.
—Nunca digas nunca—. Sonrie de manera picara—Por cierto, aremos una fiesta de compromiso formal, así que dile a Oliver y su tío que pueden venir, será mañana así que prepárate, irá la limosina a recogerte a las 6 de la tarde.
—No es necesario —. No quiero que lo haga.
—No te he preguntado, ve a comprarte algún vestido para mañana, la fiesta será pública así que varios medios estarán presentes.
—Crei que no te gustaba eso.
—Tengo nuevos negocios así que necesito publicidad y que me vayan conociendo.
—Sabia que algo querías ganar con el compromiso.
—Alison—. Me habló—. Mírame
Levanté la vista para verlo, una incomodidad en mi pecho me dolía, para él yo solo soy un peon en su juego.
—El mundo debe saber quién es Alexander Williams, El rey de Nueva York, y Tú... Serás la Reyna de este Rey, por qué naciste para estar en lo alto y tu lugar siempre será a mi lado.
—Solo seré tu esposa por un año, no quieras hacerme creer que te importo así que deja de decir cosas como esas.
Me confundes, eso lo quería decir pero no tiene porqué saber que ocasiona cosas en mi, cosas que ni yo me explico.