La ciudad de las luces

¿por que estoy llorando?, estoy tan confundida, no se si persistía aquí solo por que esta enfermo, o por que solo quiero conocerlo realmente; no es un patán; pero no se si es alguien a quién podría llegar a amar; pero él no me está pidiendo que lo ame. Camino hecha un mar de lágrimas, confundida y turbada; me tiro sobre mi cama estoy desecha del cansancio, ya no hay lágrimas en mis ojos, ha sido demasiado. Un hilo de luz entra por mi ventana, pongo mi mano para detener la luz que entra en mis ojos, me levanto torpemente de la cama y voy directo al baño, no quiero recordar el día de ayer, lavo de mi cara todo sentimiento y preparo mis maletas, me aseguro de tener todo listo y justo al abrir la puerta
- ¡Hola!- su mano estaba dispuesta para tocar la puerta- te ayudo- toma mi maleta y emprende la marcha por el pasillo, estoy muda no sé que decir
- estamos retrasados, lo siento- se que debí alistarme mas temprano, pero no logré hacerlo
- ¿quieres volver a casa?, hay un avión y un carro dispuesto para ti en el aeropuerto
- lo intentaré- espontáneamente sale de mi
- ¿qué?, ¿e… es en serio?- me mira sorprendido
- si, lo haré- me convenzo a mi misma que está bien
- si no estas segura aún; no tienes que hacerlo…
- lo sé, ya he decidido, no le des mas vueltas- luce confundido y tal vez un poco emocionado
- está bien, lo tomaré antes de que te arrepientas…- frunce el seño- ¿tiene algo que ver mi enfermedad?
- no del todo- no puedo mentir
- bien, me alegra que puedas ser sincera en cuanto a esto- esta aliviado pero aun parece preocupado
- ¿te parece si nos vamos?- el camino hasta el aeropuerto es bastante callado, me siento un poco avergonzada y tímida; no creo que en la vida esto sea un escenario normal, mis constantes dudas me mantienen alerta, he llegado al punto en que cualquier cosa me haría huir. Ya en el jet, el ambiente parece haber cambiado
- ¿vamos a Inglaterra?- pregunto con genuina curiosidad, el sonríe y clava y sus ojos en mí
- ya verás cuando lleguemos
- ¿ni una pista?- lo tiento
- nada- esta hermético, pero de buen ánimo pero con eso me basta- se que esto es complicado para ti, pero eres la única persona con la que me siento cómodo- la seriedad a vuelto
- lo sé, haré mi mejor esfuerzo- trato de darle algo de tranquilidad
- ¿disfrutaste?
- lo hice- respondo alegre
- ¿cual dirías que fue la mejor parte?- a ver, ¿la excursión que terminó en casi un beso?, o ¿ la parte donde me pides no ser tu novia pero casi?
- ¡cuando tire al piso al idiota!- digo con gracia y suprimo mis pensamientos
- si, eso fue magnífico,- sonríe mirando al piso-  pero debo admitir que mi parte favorita fue verte dormir
- ¿como dices?, ¿te quedaste mirándome?- la verguenza recorre mi cara en forma de calor
- si, lo hice y es asombroso
- esta bien, estas comenzando a preocuparme- ¿algún tipo de obsesión oscura quizás?
- lo digo por que - se ríe a carcajadas y hace una pausa- eres tan serena al dormir
-¿y?- oculta algo
- despierta eres algo así como… una fiera- se ríe mas alto
- ¿ en serio?
- no me tomes a mal, eso me encanta- me ruborizo- no eres como las locas con las que salí
- ¿de que hablas?, no te diste el tiempo para conocerlas- cabe destacar que las ignoraba por completo
- ummm, si creo que tienes razón- se pone cómodo en su asiento y no aparta sus ojos de los míos
- lo sé, yo era tu muro de contención- el jet comienza a deslizarse por la pista
- lo eras…- esta muy serio y su mirada comienza a hacerme sudar, el jet se eleva y siento un cosquilleo en mi estómago
- desearía tener mas tiempo…
- ¿para que?, ¿estas tan seguro que morirás?
- un mes
- ¿qué?
- eso fue lo que me dieron de vida
- ¿por que estamos perdiendo el tiempo debe…
- shhhh, por favor, aún lucho para entender que sucede, no me lo hagas mas difícil
- pero puedes salvarte, muchos han sobrevivido- encuentro desesperación en mi voz
- Alissa, no quiero continuar esta charla- dice con dulzura- quiero que te prepares por que al lugar que llegaremos es uno de tus sitios soñados
- no cam…
- ya déjalo; quiero seguir disfrutando de esto y me lo estas haciendo difícil- me mira suplicante
- eres… a veces eres tan desesperante- ignora mi comentario 
- ¿estás lista?
- realmente lo estaría si supiera donde vamos
- bueno igual se que lo disfrutarás- se hace un silencio entre los dos, estamos incómodos y molestos, no me creo estar en una situación así, con alguien que no es mi pareja es simplemente absurdo. Pero aquí estoy camino a… ni siquiera tengo idea de adónde vamos
- ¿cuánto tiempo tardaremos en llegar?- quiero dejar de verlo por un momento
- se lo que tratas no te diré, lo sabrás cuando llegues
- ¿qué?- me cruzo de brazos y frunzo el seño
- no sabia que esa era tu manera de demostrar cuando estas molesta- ríe a carcajadas
-no dejas de ser frustrante
- no te preocupes pronto sabrás el lugar
- si como sea- ya mi paciencia se había acabado, no podía continuar hablando con él, coloqué los audífonos en mis oídos, el continuó riendo. No había pasado mucho tiempo cuando comenzamos para mi sorpresa a descender, quite uno de mis audífonos y mire por la ventanilla
- espero que te guste París tanto como a mi- mis ojos se agrandaron ¿a dicho París?
- ¿que has dicho?
- París, se que querías comer el mejor postre del mundo, pues París lo tiene- su mirada dulce y tierna está sobre mí
- te haz tomado en serio mis deseos- estoy gratamente sorprendida
- totalmente- finalmente hemos llegado y no puede ser mas incómodo, no hablo el idioma tan fluido como Patrick pero lo único que pude entender es que se referían a mí como Sloan, trato de que su encanto no me convenza esta vez tan rápido, así que voy en silencio, pero debo admitir, este lugar traspasa por mucho mis mejores sueños, su aire es tan sofisticado y moderno, no puedo imaginarme como se verá por las noches 
- te llevaré de inmediato a Pierre Hermé- es tan absolutamente entusiasmado
- esta bien- traté de mostrarme indiferente pero no se a que se refería
- el hotel te gustará, está muy cerca del lugar a donde vamos y la Torre Eiffel- esta ansioso, tal parece que ha orquestado una gran sorpresa pero me siento algo molesta aún, pero es difícil permanecer molesta con él cuando trama semejante lío
- parece que lo haz pensado todo- oculto mi sorpresa 
- pues si- se ríe y su ojos brillan al hacerlo. Nos toma un poco de tiempo llegar al lugar, bastante elegante debo decir, al entrar da un aire de estar en una boutique, los postres se ven como una obra de arte en si mismos, son hermosos, da pena saber que son para el consumo. Patrick se adelanta, tiene una gran sonrisa, su mano está dentro de su Jean ajustado, le queda muy bien, tiene las mangas de su suéter hasta el codo, es de color gris claro y dentro lleva una camisa azul celeste, se ve cómodo, seguro, por un momento me cuestiono, el por que seguir molesta con él
- ¿que te gustaría?- sus ojos brillan con ilusión infantil
- bueno, debo verlo- he decidido que es suficiente, lo miro y sonrío
- me parece que hay de todo lo que pudieras desear- es como ver a un niño abrir un juguete en navidad
- bueno ¿que me recomiendas?, supongo que ya haz venido- asiente sonriendo, pero, parece una sonrisa confusa
- depende de tus gustos- se encoge de hombros
- bueno, quiero probar este trozo de pastel de chocolate
- excelente elección- pide con evidente dominio del idioma el pastel, pero también hace unos pedidos mas, camino a un lado mirando cada postre, son hermosos y cada postre se ve cuidadosamente elaborado, cuidando las líneas y los detalles, se ven genrosos en chocolates, fresas y demás, la tienda es como si de ropa de diseñador se tratara, o mejor, si fuese una vista de cuadros de arte
- ya podemos irnos- Patrick coloca su mano en mi espalda y doy un pequeño salto- lo siento- sus dos manos están en alto
- esta bien, me tomaste por sorpresa- estoy un poco sonrojada
- ¿quieres hacer un picnic?
- ¿ahora?
- los del hotel se encargaran de nuestras cosas
- ¿y donde haremos el picnic?- no entiendo bien que es lo que quiere hacer
- será una sorpresa- sonríe malicioso, levanto una de mis cejas en señal de desconcierto, caminamos al carro al salir y ver a mi alrededor me parece increible estar aquí, esta es la ciudad del amor ¿no?, ¿me habrá traído aquí por eso?, lo dudo, no creo que este buscando amor, mas bien busca compañía
-¿que piensas?- pregunta colocando su mano en la mía
- solo estoy curiosa de donde iremos- discretamente deslizó mi mano para zafarla de la de él
- te daré una pista no vamos muy lejos- le divierte mi desconcierto
- no conozco París así que igual no tengo idea- el ambiente es tan increíble aquí
-¿que tal si te digo que es un amplio jardín es público y tiene la mejor vista?- parece realmente divertido al verme tan perdida, vamos en el carro camino al lugar desconocido, sería fácil saber donde estamos con google maps, si es que pudiera entenderlo, estoy nerviosa sin razón alguna por lo que estoy ansiando poder comer mi pastel de chocolate, y como un rayo cae el pensamiento en mi
- ¿y que usaremos para sentarnos?- ¿absurdo no?, estoy en la ciudad del amor y me preocupa ensuciar mi trasero
- ¿que?- levanta sus dos encantadores cejas pobladas- no te preocupes te daré mi chaqueta para que te sientes en ella si eso te molesta
- ¿y tú?, ¿donde te sentaras?
- en el césped
- te ensuciaras
-¿y?, se puede lavar, ¿no?
- si pero, es mejor no ensuciarla
- en algún punto habrá que lavarse- me mira como si estuviera completamente loca
- esta bien, bueno creo que exagere un poco- trato de suavizar mi locura paranoica, esboza una pequeña sonrisa, creo que tiene algo de pena por mí, mira a través de la ventana 
- ya hemos llegado- las palabras no pueden describir lo absolutamente impresionante que es este paisaje