Lo que me queda por escribir

Siempre tú

Para la mejor de las anónimas que pude llegar a conocer:

Nadie me conoce como tú. 
Desde la primera conversación supe que serias ese tipo de persona en mi vida en la cual pudiese confiar totalmente.

Valla accidente en el que nos conocimos la primera vez. Tus gafas sin lente y mi sarcasmo más que evidente. ¿Lo recuerdas?

Empezaré por el propósito en sí de esta enredadera de letras. Primero que nada quiero que sepas que contigo me siento por ahora más yo que con nadie. 
Si, así es. Y no me preguntes porqué, o cómo puede ser porque la verdad no tengo la menor idea. Simplemente lo siento así. 
Te mostré mis defectos y no huiste, o eso creo aun. Como te agradezco ese punto. 
Pocas personas se han quedado una vez que les muestro lo que realmente soy.

Y aunque pase el tiempo, siempre te agradeceré la atención, el cariño, las risas, la disposición, la forma de aguantarme cuando ni yo misma lo hacía, no sé si fue por compromiso o porque en verdad lo querías, agradezco cada una de nuestras tonterías, contigo pude sincerarme varias veces, cuando con nadie podía hacerlo, pude expresarme abiertamente, pude compartir mis gustos raros y eso nadie lo va a entender como tú, que me contagiaste de algunos cuantos.

Lograste que volviera a creer en lo que no, y aunque te preguntes de que mierdas me refiero, o que fue lo que hiciste, yo sola me entiendo. 
Y en verdad te agradezco.

Tal vez nos faltó conocernos antes, hay tantas cosas por decirte que no terminaría de enumerarlas en un día. 
Así que trataré de que esta carta sea de lo más breve.

Tú, una chica fuera de lo común. Quizás la amiga loca y extraña que me hacía falta tener. 
Tú sabes bien. 
Aprendí de ti tantas cosas y tal vez me acostumbré a pocas, como dije. Y es que eras tan extraña, y eso te hacia diferente. 
Lo de "extraña" jamás fue un insulto y lo sabes perfectamente. Contigo pude desahogarme cada vez que la soga me estaba matando, cada vez que los cambios de humor me agobiaban. No sé si en verdad me escuchabas, pero pude hacerlo. Pude confesarte muchas cosas que ni aún mis amigas lo sabían.

¿Recuerdas todas las veces en que te decía que tu madurez no concordaba con tu edad? ¿Que cuando hablaba contigo sentía que hablaba con una persona adulta? ¿Ya lo recuerdas? ¿Recuerdas también como te enojabas?

En verdad te agradezco tanto. Nunca olvidaré esa pequeña diferencia que hiciste una vez que entraste a mi vida. 
Aunque fueron pocos los momentos, valla que fue interesante conocerte. 
No olvidaré todo el apoyo. 
Y como amiga, he de confesarte que al escribir esto, pienso y caigo en la cuenta de que tengo mucho miedo de que todo esto acabe. 
Que al separarnos las cosas ya no vuelvan a ser igual...
Quizá y así suceda pronto...
Que ya no volvamos a hablar como antes....
Que cada día se haga más difícil y pase de nuevo lo que no quiero....
Valla tontería la de tener que crecer.

A veces me pregunto ¿Porque no nos conocimos antes? ¿Porque justo cuando te encontré fue algo tarde? Porque.....ni siquiera nos habíamos encontrado, estando en el mismo camino, pero separadas. ¿Porque? 
Estoy segura de que nuestra diferencia en realidad no hace tanta diferencia. ¿Qué ironía no? "La edad No define tu madurez". Tu misma me lo has comprobado.

Y quizás, para terminar, jamás sepas de lo mucho que significó para mi nuestra "corta amistad", que espero y nos dure un poco más; quizás y jamás te enteres de estos retazos escritos para ti, pero.....si algún día me llegas a leer, ojalá te des cuenta de lo mucho que llegaste a ser.
Te Quiero.

Atte:
La Sleeper de tercero




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.