Lo que no se perdona 1

Amira Kohat

-Mi señor -murmuró la joven entre dientes, mientras el eco de los cascos se alejaba del oasis.

-Quién será él? pensó apretando su cántaro contra su pecho. "Mi Señor?"

Su mente giraba entre la sorpresa y la curiosidad. Nunca había visto a alguien así; su porte, su mirada... Y la forma en que le dió las gracias.

-Solo sé que nunca antes había visto unos ojos tan bellos. Ese azul que resaltaba la mezcla de una combinación casi perfecta. -Su mirada, aquella que ilumino hasta el rincón más escondido del oasis y de mi alma -Amira.

Ambos emprendieron el camino de regreso a sus hogares. Bajo el cálido sol del mediodía, y transitando x los senderos de arena y vegetación.

Amira cabalgaba en el caballo de su madre y Amram en su caballo junto a su séquito.

Durante el trayecto, sus mentes viajaban mucho más rápido que sus monturas. Cada unos repasaba el encuentro, sintiendo como el recuerdo del oasis aún los acompañaba, cuando al fin, divisaron las siluetas de sus respectivos destinos.

"ELLOS AÚN NO SE HABÍAN DADO CUENTA DE QUE SE HABÍAN SEPARADO FÍSICAMENTE; MÁS SUS ALMAS ESTABAN UNIDAS".

"FIN DEL CAPITULO 1".




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