Keith Brow es un chico que ama los video juegos y la poesía tiene 25, habla fluido el inglés, español y poco el italiano, su madre está lejos de el con su hermano mayor en el extranjero. El llegó a la cuidad de Emifray cuando tenía 5 años de edad junto a su padre por lo que siempre está aquí, solo en vacaciones va a ver a su madre en New York, el estudió administración de empresa por su padre, a los 20 años se le descubrió una enfermedad que no queria tratar solo por qué el padre de su amigo cercano es doctor empezó a ir para sanar su problema, nunca a tenido una relación duradera, el es un muchacho alto, de piel clara, pelo ondulado, castaño y de mirada sería.
¿Cómo te fue ayer con mi padre?- Aymar su mejor amigo lo vio entrar.
Cómo siempre, fatal estuvo diciendo lo mismo de siempre - para el era aburrido estar llendo a consultas esto no estaría pasando si ese día no hubiera bajado la guardia - ya estoy harto de ir al hospital con este paso también me graduó de médico.
Sería genial - Aymar le sonrió.
Es sarcasmo - rodó los ojos - sabes que nada de lo que me está pasando quería.
Ya lo sé no tienes que decirlo - se levantó y fue a la cocina - prepare la cena vas a comer.
Para que pides si sabes la respuesta- camino hasta llegar a la mesa.
Aymar sirvió dos platos de comida y los puso en la mesa- veo que mi padre no te a podido convencer que tomes rehabilitación - empezó.
Podrías solo comer no tengo ganas de discutir - dijo empezó a comer.
Pero es la verdad, tu sabes que no estás bien - explotó Aymar.
Deja de estar dándome órdenes si estoy compartiendo departamento contigo es por no querer ver a mi padre - contesto dejando de comer - nos vemos.
¿Dónde vas? - lo vio agarrar su chaqueta.
Deja de tratarme como si fuéramos algo ambos somos hombres y no me gusta dar explicaciones - cerró la puerta.
De seguro en el mismo lugar de por eso no llegó la noche anterior.
Aymar lo vio salir de la casa sin dar más información de dónde estara o pasará la noche, ellos son amigos desde secundaria al llegar a universidad vio como Keith sufría por sus problemas con su padre, igual como rechazo a varias chicas para no dañarlas y acabar mal, por qué sabe que la enfermedad de su amigo es grave que no le gustaría ver sufrir a las chicas y a su propia familia aunque Keith no lo demuestra.
.
.
.
Entonces mañana inicias a trabajar en el hospital - ámbar estaba comiendo su helado.
Si, pero por qué no vino Ale se suponía que saldríamos las tres como antes - están saliendo de la tienda para ir a casa de ámbar a cenar ya que ayer no pudieron por lo de los servicios.
Pues ya sabes ella se molesta rápido aparte hoy va a ver a su primo por algo de la escuela escuché además que no irá sola también estara Vero - siguió saboreando su helado.
Cambiando de tema ¿Qué pasó con José ayer? - recordó que Ale no le dijo porque no pudo responderle al querer disculparse que la persona con quién choco ayer.
Nada- simplemente dijo - no me digas que Ale te volvió a colgar- al ver que no contesto se empezó a reír.
No te rías, que te vo..- de repente se atropesó con alguien.
Micaela - grito ámbar - fíjate torpe - Vio molesta al chico caído igual.
Estás bien, cuánto lo siento venía apurado- le ofreció su mano.
No hay de que, yo también no ví mi camino - le sonrió.
Oye idiota no me ignores.- ámbar se sintió ofendida.
Hasta luego - dijo el chico.
No puedo creer que es un maleducado -
No es cierto, mejor vámonos que se hará tarde - comenzó a caminar para calmar a ámbar y dejé de gritar en la calle.
Micaela espérame !- la alcanzó para luego subir al carro así llegar a su casa para cenar.
Esa fue una gran noche para los dos, Micaela no pudo dormir de solo pensar en la persona con la que choco dos veces seguidas estando ella distraída aunque admite que le gustó, en otro lado Keith seguía sin creer que era la misma persona de aquella vez con quién tropezó.