Lunes – 11:42 p.m.
📷 Foto enviada por Leo
(Una hoja arrugada, escrita a mano. Letras torcidas. Un par de manchas, como de lágrimas. El título en la parte superior: “Para Sofía – pero nunca enviada”)
Leo 🦁:
La encontré hoy entre unos libros.
Escribí esto hace meses.
Nunca tuve el valor de mandártelo… hasta ahora.
🕒 11:44 p.m.
📩 Nota escrita – imagen transcrita por Leo:
“Sofía,
Si estás leyendo esto, es porque finalmente fui valiente.
Aunque no sé si ya sea demasiado tarde.
Te extraño.
Pero no solo como se extraña una canción o un olor del pasado.
Te extraño como quien dejó un pedazo de sí en otro cuerpo, y no sabe cómo seguir entero sin recuperarlo.
No me fui porque dejé de amarte.
Me fui porque no supe cómo sostener lo que tú merecías.
Y eso me rompió.
Perdóname por no decir nada.
Por dejarte hablando con el silencio.
Si algún día vuelvo a tocar tu puerta, será con manos menos temblorosas.
No porque el miedo se haya ido, sino porque el amor pesará más que él.
L.”
🕒 11:49 p.m.
Sofía 💖:
Lloré.
Y no porque me duela…
Sino porque por fin sentí que esa parte de mí que se quedó esperando… valió la pena.
🕒 11:50 p.m.
Leo 🦁:
¿Demasiado tarde?
Sofía 💖:
No.
Nunca es tarde cuando el amor es sincero.
Pero esta vez, Leo, no me escribas con tinta…
Hazlo con actos.
🕒 11:52 p.m.
Leo 🦁:
Entonces prepárate.
Porque esta vez… todo lo que escriba, lo voy a vivir contigo.