Ser sincera con alguien a quien le has ocultado muchas cosas de ti te hace cambiar completamente, te hace ver la vida diferente, tal vez mas gris, mas triste, cruel y real. Las mentiras siempre terminan saliendo a la luz, los secretos a veces tienes que contarlos para no morir ahogada en todos ellos.
El nudo en mi garganta no me deja continuar, suspiro una y otra vez, intentando encontrar una solución que no resulte tan patética. El chico que tengo enfrente de mi me sonríe para que continue hablando, pero tengo miedo de perder esa complicidad, esa felicidad que me ha dado durante este tiempo.
Tengo miedo de que el brillo en sus ojos se pierda y que me odie toda la vida.
—Antes de conocerte a ti — continuo — había conocido a alguien más, un chico que conocí en la fiesta de cumpleaños de Noah, juega soccer y es del equipo contrario, al principio me pareció un chico atractivo, no niego que llamo mi atención, eran sus ojos avellana los que me deslumbraron por un momento, sentí que era el alguien a quien quería conocer, tenía aspecto de chico malo tal vez — suspiro — conocí a ese chico por más tiempo, me sentía feliz, emocionada y el me daba toda la atención que quería, me trataba tan bien que sentía que era la única chica en el mundo. Para mi ese chico significaba que alguien se fijaba en mí y que podría conocer el amor por una vez. — el mesero llega con nuestra orden la deja y se va — Chase cuando te conocí todo era normal, creía que podríamos ser amigos y que lo que sentía por aquel chico era muy fuerte, algo intenso, incluso cuando pasábamos tiempo juntos creía que era normal que me gustara ver tus ojos miel brillar, incluso llegué a creer que tú y yo tendríamos una amistad muy bonita. Hasta el día de mi cumpleaños que te vi y me dejaste sin palabras.
Sus ojos miel recorren toda mi cara y me siento desnuda frente a él.
—Mi corazón latió completamente por otro chico, me puse nerviosa y sentía que no me conocía, porque estaba descubriendo a otra Enid que no sabía que conocería a alguien que también la hiciera sentir así, e incluso mucho mejor que el chico que me gustaba — muerdo mi labio y la visión se me nubla — cuando me fui de campamento con Emine, me sentía confundida y me quise alejar de todos porque quería pensar mejor las cosas, pero ese chico estaba allí, en el mismo campamento, compartimos tantos momentos bonitos que mi corazón se sentía bien con él, me sentía tal feliz que no deseaba volver y me olvide completamente de ti, de que estaba confundida y decidí confiar en que tal vez estaba confundiendo amabilidad con otra cosa, porque tu siempre me has tratado bien, me has hecho tan feliz. En ese momento quien era el dueño de mi felicidad era ese chico, hasta que volví del campamento, y te vi otra vez, volví a sentirme igual o mas confundida de lo que me había ido.
El continúa escuchando todo lo que tengo que decir, sonríe débilmente y me preparó para confesar todo.
—Chase cuando me encontraste caminando por aquel lugar en navidad — el nudo en mi garganta amenaza con no dejarme hablar, aclaro mi garganta — había ido con ese chico, habíamos quedado en tener una pequeña cita en otro lugar, pero todo estaba mal, no me sentí feliz, me sentía incomoda y aburrida, cuando me viste fue porque él se había ido a otro lado y cuando me hablaste a él también le hablo otra chica, me mando un mensaje diciendo que después vendría por mí, porque se había encontrado con una amiga y eso me hizo doler mi corazón porque de verdad esperaba algo diferente, cuando me animaste a ir contigo; la salida con el otro chico se fue al carajo y me centre en la persona que tenía en frente… en ti, en tus ojos y en la forma en que me ayudas a tener esa calma. — confieso soltando todo el aire de mis pulmones — Chase no se que carajos estoy sintiendo, antes de año nuevo fue a verme y hablamos, le dije que no era buena compañía recomendando en como acercarse a una chica, siempre que hablábamos él decía que le gustaba una chica y por un maldito instante creí que era yo, pero no, me di cuenta que era la chica con la que se había ido en nuestro intento de cita. Cuando estuviste en el hospital apoyándome, el también llego e intento acercarse a mí, intento arreglar las cosas para hacerme sentir bien y le mentí, le dije que no era necesario porque quería estar con mi familia, pero la realidad era que quería estar sentada a tu lado y que me abrazaras para olvidarme completamente de todos y de todo, no quería perder mi calma y mi confort por él, porque él me estaba haciendo sentir incomoda, además de que también me sentí culpable, porque mentí, le dije mentiras. Me hablo esta mañana, teníamos un mes de no hablar, me había concentrado en ti, en la escuela en todo, evadiendo completamente a ese chico, porque significa que tengo que hacerme responsable de las mentiras que he dicho.
Sus ojos se quedan viendo al vacío, desvió la mirada no quiero ver la decepción en su mirada y sentirme aún más mierda.
—Lamento si te decepcioné, lamento si ahora no sabes ni quien soy porque yo tampoco lo se. Chase es solo que estoy cansada, me siento tan confundida, porque cuando creí que con ese chico todo podría salir bien, que mis emociones eran intensas, llegaste tú, me hiciste sentir tan bien que ahora mi corazón no sabe que siento por quien. — las lagrimas recorren mis mejillas y respiro entrecortado.
Es tan extraño, no se porque me sincero ante él, no sé porque ahora mismo me siento desnuda frente a él, aun cuando tengo mi ropa puesta, no se porque no me da pena sentirme así, no entiendo porque con el quiero ser tan transparente, cuando hace unos cuantos días creía que quería ser honesta con Zep, con el chico de ojos avellana que me volvía loca y me hacía ser una persona totalmente diferente a lo que ahora soy.