Después del beso, él se aleja de mí, le doy ropa cómoda de Noah, se mete al baño y se ducha, mientras yo busco ropa de dormir y espero a que salga.
—Tus papás van a matarme si me ven aquí contigo — dice saliendo del baño con el cabello húmedo y una toalla en su cuello secándolo.
Me embobo admirándolo, luce muy bien, la ropa le queda un poco justa marcando las abdominales, apretándole sus brazos marcando sus músculos, aunque Noah es alto, Chase es unos centímetros más, verlo así me deja mas tonta de lo que ya con su simple presencia.
—No se van a enterar — digo saliendo de mi embelesamiento —, antes de que despierten te puedes quedar en la habitación de huéspedes.
Le guiño el ojo y paso por su lado, el me gira, toco su pecho con mis manos y nuevamente me besa erizándome los bellos de la nuca.
—¿Ya estas mejor? — pegunta cuando se separa de mí, pega nuestras frentes.
—Ya — digo y me alzo de puntitas para dejarle un corto beso —, ahora regreso. Si quieres coloca algo en la televisión mientras me dicho. — me aparto de él y me encamino al baño.
Escucho que prende la televisión, al terminar de bañarme, esta recostado en el respaldo de la cama, con la televisión encendida, me observa mientras me hago el skincare en mi tocador, seco mi cabello y sus ojos no prestan ni la mínima atención al televisor, tener su mirada encima me causa muchas sensaciones nuevas.
—Te mandare imprimir una foto mía para que dejes de verme tanto — digo viéndolo por el espejo — me desgastare si me sigues viendo así.
Sonríe y se acomoda mejor en la cama.
—Es una buena idea — alzo una ceja — así no tendré que extrañarte cuando no podamos vernos.
Suelto una suave carcajada y el frunce el ceño.
—Eres único Chase — termino de secar mi cabello y me acomodo a su lado, pasa un brazo por detrás de mi y me paga más a su cuerpo.
No es la primera vez que duermo con un chico, siempre he dormido con Noah, pero es la primera vez que duermo con el chico que me gusta.
Es una sensación rara, pero bonita, vemos la serie que esta en la pantalla por pocos minutos, porque me concentro en su calor, siento esa tranquilidad que trasmite su presencia.
—Lamento todo lo de esta noche — me disculpo por quinta vez en la noche —, si tan solo pudiera regresar el tiempo…
Niega con la cabeza, suelta un suspiro y habla
—Ya te lo dije, no tienes que disculparte. No podemos volver al pasado para remediar algo, ve lo bueno de esto —me acomodo mejor para ver su rostro —, que, si las cosas no hubiesen pasado así, no estaríamos ahora mismo los dos aquí.
Asiento, le sonrió y acomodo mis manos en su pecho, coloco mi mentón arriba de ellas, quiero verlo y admirarlo por esta noche.
—Tienes razón — susurro porque me pierdo en su mirada — ¿Qué has hecho durante estos años?
Suelta aire y acaricia suevamente mi mejilla.
—No hice mucho — murmura — me dedique a cambiar mi aspecto físico y mental, empecé a entrenar más el Rubik, salí de mi zona de confort, conecte con la naturaleza, conseguí un trabajo de medio tiempo cuando estaba en Nueva York, salí con chicas — busca algo en mis ojos y yo sonrió —, pasee por Nueva York y hace un año y medio regrese a Londres porque quiero estudiar en Cambridge y estar mas tiempo con mi hermano y mis papás.
Sonrió y sus caricias se van a mi espalda, se siente tan bien estar así con él.
—¿Y tú? ¿Qué has hecho durante los últimos años? — enarca una ceja y me da toda su atención poniéndome nerviosa.
—Estuve yendo a sesiones con una psicóloga, mejore mis notas, me metí a jugar voleibol para distraerme, me fui de fiesta con mis amigos, hice viajes a lugares cercanos con ellos, fui voluntaria en un campamento para saber que sentía por un chico llamado Chase y me encontré con otor chico que me confundió aún más, me encontré conmigo, me pelee con mi mejor amigo y recordé al chico que me había enamorado hace cuatro años cuando era una puberta dramática.
Me encojo de hombros y el sonríe.
—¡Vaya! — acaricia mi cabello —Haz estado ocupada todo este tiempo — sonríe y besa suavemente mis labios — ¿Qué sentiste cuando me viste?
Su pregunta me hace guardar silencio. Recuerdo la primera vez que lo conocí cuando tenía catorce años, él estaba sonriendo y hablando con Kyle, luego me lo encontraba en todos lados, siempre iba con un niño de ojos cafés miel y rizos negros, juagaba con otros niños y me parecía el chico mas lindo de toda la escuela.
Cuando lo volví a ver, recuerdo que Kyle me invito a su mesa, conocí a sus amigos y me los presento uno por uno, allí estaba Chase viendo el celular distraídamente, mientras sus amigos hablaban de una estrategia para sus próximos juegos, fue entonces que el me hablo para preguntarme si iba en segundo año y si juagaba voleibol, le respondí que sí, me hacía preguntas para no dejar morir la conversación, hasta que una pregunta aprecio de manera desapercibida y hoy tiene sentido, me pregunto si había tenido algún accidente para olvidar ciertas cosas y yo le respondí que no, cambio de tema rápidamente porque Warrick, Freddie y Kyle se unieron a la conversación.