Perdón

Flashback

Tengo planeado una sorpresa para Mar, le presentaré a mis amigos, son buenos chicos y sé que aunque no lo diga ella no quiere estar más sola y es muy probable que sus antiguos amigos la hayan abandonado o algo así; por ahora no quiero indagar mucho sobre el tema, sin embargo, llegará un tiempo en que se lo preguntaré; quiero saber porque se quedó sin amigos.

Hablé con todos para organizar una salida al parque y mientras hacía la última llamada vi como mi padre entró a la casa tambaleando de lo borracho que estaba; desde la muerte de mi mamá él no ha dejado de echarme la culpa y se gasta todo el dinero en alcohol; dejó de ser mi padre y yo dejé de ser su hijo.

Entré a la casa molesto y cansado por esta situación; desde que empezó a beber la que se ha encargado de mí ha sido Luci porque en el momento en que el doctor le dijo que mi madre había muerto, en ese preciso momento él decidió que yo sería el culpable y por eso ya no sería responsable de mí.

Lo veo sentado en el mueble con una botella de wiski en la mano, lo miro con furia y al mismo tiempo con decepción, me da pesar ver en lo que se ha convertido y en lo que me convirtió a mí, me acerco e intento quitarle la botella, pero él rápidamente se para y empieza a gritar me todas las maldiciones que por su mente pasaron. Entre gritos me levantó la mano para golpearme, pero lo detuve a tiempo y eso lo molestó tanto que con su otro brazo rompió la botella y con un pedazo de vidrio me cortó en la espalda, en ese momento en que sentí el ardor y la sangre todo dentro de mí quiso golpearlo, pero no, este hombre me hace todo el daño que quiere y no soy capaz de ponerle la mano encima y todo por la promesa que le hice a mi madre de cuidarlos a los dos, incluso si uno de ellos me falla.

Lo dejé solo y me fui a mi habitación cerrando la puerta y rompiendo todo a mi paso; ya estoy cansado de esto, no soy el culpable, quiero un poquito de felicidad ¿acaso eso es demasiado, es demasiado lo que pido? y entre todo lo que rompí escucho como cae el cristal y me tiro al suelo, recojo la foto entre los pedazos de cristales y la miro; son mis padres y yo en mi primera competencia de natación, nos veíamos tan felices que solo desearía que todo se regresara y no haber ido a ese estúpido concierto.

Veo el celular y se acerca la hora de llegar al parque para la sorpresa de Mar, no tengo ánimos para salir, sin embargo, lo que menos quiero ahora es preocupar a mis amigos. No les dije nada de lo que pasó, me curé como pude la herida y antes de irme me llevé unas pastillas para la ansiedad que he estado bebiendo para no llevarme de mis impulsos y hacer algo dañino; antes de salir lo veo caminando hacia mí y por un segundo pensé que se disculparía, pero luego noté que se dirigía hacia la botella de wiski que está en la mesa, rápidamente la tomo y la llevo conmigo sin importar los gritos y maldiciones; sé que eso no lo detendrá, pero al menos es una botella menos.

Todo va bien, Mar y los chicos están conversando de forma muy alegre y todos nos reímos de las bromas de Harry, eso me hace olvidar por un momento todo lo que pasó con mi padre, pero como la felicidad del pobre dura poco; recibí un mensaje del encargado del bar a donde suele ir mi padre diciéndome que estaba tan borracho que se había peleado con unos hombres, mas que no me preocupara que él lo dejaría dormir en un pequeño cuarto que tiene el bar.

Ese mensaje derramó la copa, un momento de felicidad que quedó arruinado, ¡maldición, quería desaparecer! me puse tan ansioso que hasta empecé a sudar la manos, no quería que nadie se diera cuenta así que me fui diciendo que iría al baño, fui a donde estaban los carros y mi moto, busqué la pastilla que tenía en la mochila para calmarme un poco y en ese momento vi el wiski y se me hizo irresistible, pensé en mi padre y como este maldito líquido me arruinó la vida, fue tan fácil para mí beber casi la mitad de la botella y parar, es increíble que mi padre no pueda detenerse ni siquiera por su propio hijo, cerré la botella y me Apoyé de uno de los autos; vi en mi reloj que ya había pasado mucho tiempo, sin embargo, cuando me intento levantar para irme me siento mareado y todo comienza a darme vuelta, todo se ve borroso de pronto y luego no veo nada; me había desmayado.

Fin del flashback

—Mar, yo no intenté suicidarme, sí fue algo estúpido lo que hice, mas no intentaba acabar con mi vida.

—Diego, yo... yo no sé qué decir.

—Mi padre me ha golpeado desde que murió mi mamá; cuando cumplí mis 17 ya era tan fuerte que pude detenerlo, pero incluso llegó a golpear a Luci por eso ella nunca me presentó contigo. Mar ya te conocía, pero eras tan feliz que nunca quise hablarte y que mi infelicidad amenazara con borrar tu sonrisa, ¡Mar me gustas desde antes!

—No querías dañar mi felicidad, eso es algo tonto.

—Para mí no, tú estabas bien y yo, pues no del todo; Luci se ha hecho cargo de mí desde la muerte de mi madre y cuando supe lo del accidente fui a verte, mas te vi tan triste que no me acerqué, tuve miedo porque no quería recordar lo de mi madre y sufrir más, fui un tonto y te dejé.

—¿Estuviste en el hospital?

—Sí y perdón por no intentar hacerte reír en ese momento; Mar hay más. —dije levantándome y sentándome a su lado.

—¿Más, qué otra cosa yo no sé?

—Yo fui quien te rescató cuando intentaste suicidarte, Luci te vio y me llamó, cuando me dijo que se trataba de ti no lo dudé, pero le pedí que no te dijera quien soy, le dije que tendría el valor de presentarme ante ti.