CAPITULO 21
UN LUGAR DONDE ESPERO CONSEGUIR RESPUESTAS
Ver que mi vuelo fue suspendido, me hiso lanzar un resoplido molesto, me quedé unos momentos viendo la
pantalla que mostraba la información, era un contratiempo, no quería quedarme esperando hasta no se sabe
cuánto tiempo a ver si resolvían el itinerario de la línea aérea, lo pensé solo unos minutos, preguntándome
sobre la conveniencia de esperar o irme por mi cuenta.
Decidí hacer el recorrido en auto, podía hacer esa distancia entre tres horas o unos minutos más
aproximadamente, lo que era quizás un poco menos de los que podría esperar a que reanudaran los vuelos,
así que me dirigí al estacionamiento donde había dejado el auto, dejé la maleta la sobre los asientos
posteriores y, subí al asiento del piloto, encendiendo el motor del auto me dirijo a la salida del
estacionamiento de la zona aeroportuaria, rápidamente entre a la vía rápida de la carretera dirigiéndome a
la salida de la ciudad, quería estar temprano en el apartamento y salir a buscar lo que en gran parte era la
razón que me lleva a ese lugar, el sábado sería un buen día para iniciar la búsqueda, decidí entrar aun lugar
de comida rápida y compré algo de comer para hacerlo al llegar al apartamento.
Recordaba muy bien mis visitas en la infancia a esa comunidad, inclusive antes de que se ejecutara el
desarrollo del conjunto habitacional, donde mis tíos abuelos participaron ese proyecto de urbanismo, el cual
se construyó en lo que antiguamente eran algunas fincas y granjas familiares dentro de las cuales mi familia
había sido una de ellas por las ultimas 5 generaciones,
Algunos de sus dueños actuales, eran descendientes de algunos de los dueños de esas antiguas fincas,
como mis abuelos y mis padres y ahora yo, ellos dieron su permiso siempre y cuando se conservara la
reserva vegetal y animal de la zona, preservándola de ser posible lo más cercano a su estado natural
original, comprometiéndose todos a eso, más al manejo de su conservación y mantenimiento constante.
Llevó el tiempo esperado recorrer la distancia hasta la comunidad que visitaba, así que sintiéndome cansado
y hambriento entre al segundo apartamento de uno de los amplios edificios de apartamentos de tres pisos,
subí la escalera y entre al apartamento, dejando las llaves y la bolsa de comida que llevaba en la mano,
sobre el mesón de la cocina luego de dejar en el piso la maleta que llevaba en la otra mano, me disponía a
quitarme el abrigo, cuando oí la alarma de amenaza de incendio.
–No lo puedo creer, lo que está pasando hoy −, se dijo en voz alta, pensando en el primer incidente que
retraso la salida de su vuelo y ahora un incendio, bufó mientras abría la puerta dándome cuenta de que ya
los otros vecinos estaban afuera disponiéndose a salir,
Estaba una señora mayor siendo ayudada por un jovencito al parecer hijo de una pareja que ayudaba a salir
a sus otros dos hijos, detrás de la anciana y el niño, caminé hacia ellos, la anciana habló.
–No salió la joven del apartamento junto al suyo, tóquele la puerta por favor, debe estar dormida y no oyó la
alarma, se veía cansada cuando llegó, seguramente no despertó aún−, le dijo apresurada, mientras se hacia
acompañar a la escalera,
Después de oírla voltee hacia la dirección que indicaba la puerta donde esperaba salir a alguien, no había
indicios de que la persona que estaba dentro se dispusiera a salir, ya que pasaron varios segundos y no se
abría la puerta,
Transcurridos otros segundos más nadie abrió la puerta por lo que me dirigí hacia ella, tocando fuertemente.
–Voy, ya oí, quien es –, dijo la persona dentro del apartamento
–No oyó la alarma de incendios–, respondí desde afuera,
Seguidamente se abrió la puerta y asomándose tímidamente una mujer semi vestida, cabello largo revuelto y
con vestigios de sueño aun en sus ojos.
Tomé fuertemente su mano y tire de ella, esta acción fue suficiente para que despertara completamente y
abriera los ojos desmesuradamente dándose cuenta de cómo estaba vestida y que llevaba al descubierto sus
muslos y pies descalzos, fue una imagen llena de sensualidad y candidez que me impactó, estaba seguro de
que siempre recordaría este momento.
Tiro su mano mas no la solté, sacándome el abrigo que aún no me había quitado, solté su mano y con ambas
manos levanté el abrigo colocándolo encima de sus hombros hasta cubrirla , metiendo sus brazos y cerrando