Soy quien usaron a su antojo, cual títere y muñeco jugaron, disfrutando el acto.
Uno, dos, tres
No se aburren del muñeco con mueca triste, ahora, buscan jugar con su más grande miedo. La soledad, lo abandonan cual basura pero sigue actuando sin parar.
Llegan nuevos espectadores, le liberan de las cuerdas, pero, cae en otro teatro. Ahora está obligado a seguir con vida, ha cambiado su expresión y ahora muestra una gran sonrisa que nunca vio venir.
Pero, con ella
La soledad
Se lo llevó....
No hay problema, soy desechable, pueden usar mi alma. Pueden quitarme mi humanidad, no hay problema, yo entiendo.
Soy un juguete