Capítulo 12
Julieta
Miro como Alexander abraza a Ariel, no hay escena más linda que esa.
Instintivamente llevo mi mano a mi vientre ¿Fabián hubiera sido un buen padre? Creo que sí, eso nunca lo sabré. Muevo mi cabeza de lado al lado, para alejar os recuerdos tristes.
Niego con la cabeza no me permito pensar más en eso. Me concentro en mis ahijados.
- ¡Atención! Ya está por llegar Ada a sus lugares.- Grito Carlos frenético.
Dylan se me acerco.
- Hola Juli.
- Dylan, tanto tiempo.-Lo saludo con una abrazo, el cual el me corresponde.
- Si, ¿Cómo has estado?- Me pregunto contento. Algo que me gusta de Dylan es que siempre sonríe y por todo. Como si el mundo fuera siempre un lugar bello.
- Bien, con mucho trabajo lo usual.-Contesto riendo. - ¿Y vos?
- Bien trabajando mucho y estudiando.-Responde rascándose la nuca.
- ¿Este es tu último año?- Le pregunto.
- Sí .Terminando la carrera de administración.-Dice orgulloso.
- Wow, que bien. ¿Es muy pesada la carrera los últimos años?
Le pregunté, yo solo hice dos años de esa carrera, hasta que comprendí que eso no era para mí.
- Si, no tanto como lo es medicina.-Ambos reímos.
- Si, en esos tenés razón. – Digo.
Empezamos a charla de cosas triviales, como del clima y de equipos de fútbol. Es muy agradable Dylan es un chico que se toma todo en chiste
- Hay viene hagan silencio – Murmura Carlos. Levantando las manos.
A su lado estaba Brandon haciendo las mismas señas, no podía parar de reírme, ese niño es un mini payaso.
Todos nos repartimos en los lugares que nos asignaron, cuando entro mi queridísima amiga.
- ¡Sorpresa!- Gritamos todos.
Ada se tapó la cara con las manos y nos saludó a todos. Luego compartió unas palabras con su marido e hijos.
Me hace tan feliz verla así, recuerdo cuanto ella sufrió y verla contenta es una de mis mayores alegrías. Porque al menos una de las dos es feliz y tiene la familia que siempre quiso.
Me acerco a mi amiga y la abrazo.
- Feliz cumpleaños amiga.-Le doy un beso.
Le alcanzo la bolsa y añado.
- Con algunas prendas para sorprender a mi primo.
Mi amiga se queda roja de la vergüenza, la vuelvo a abrazar.
- Gracias -dice ella.
Me voy a buscar a mis sobrinos, para ver que maldad han hecho, veo que Alexander pasa por mi lado a saludar a Ada.
Para mi Alexander, anda enamorado de Ada y conmigo tiene sexo no creo interesarle más que en eso. Y por esa razón jamás debería enamorarme de él o sentir algo por él.
¡¿Que rayos?!
Como puedo pensar en Alexander, de otra forma que no sea como un amigo del sexo y nada más.
Niego con la cabeza, esa es otra cosa que no debe pensar. Yo desistí del amor en cuanto perdí a mi bebe.
Hablando de bebes, busco a mis sobrinos.
No los veo por ningún lado, ¿A dónde se fueron? En eso se escucha el grito afeminado de Carlos.
- ¿Que le paso?- Me pregunto Dylan, no sé en qué momento apareció a mi lado.
- No tengo ni idea, sé que es medio raro y grita como niña porque si.- Digo riendo.
Ambos nos reímos, sabemos que mi primo es un poco especial. Pero la razón de su grito “tan varonil” fue que los chicos le habían hecho una broma.
Nos acercamos al grupo, y veo como Ada se le ríe, entonces no sé cómo ambos terminan tirados en la pileta.
Riendo se veo como se besan, se nota a mil kilómetros lo mucho que se aman. Avecés quisiera tener ese amor, loco y romántico.
Veo a Alexander cerca de la pileta, no sería tan mala idea que se dé un baño.
Me acerco sigilosa a su lado y lo empujo.
-Por puto - le dije riendo
El tonto, grita al caer al agua. Junto a Ariel nos reímos.
Mi sobrino se tira al agua y nada como un bello pez y Brando al ser más pequeño con ayuda de su madre entro a la pileta.
De estar parada al lado de la pileta, no sé cómo termine dentro de ella, el agua helado toca todo mi cuerpo.
Salgo hacia la superficie y miro a Alexander que esta riéndose.
- Idiota .Hijo...
- No se dicen malas palabras frente a los chicos - Dice Alexander lanzando se adentró de la pileta.
Cuando se acerca a mí, lo intento ahogar .Y él hace lo mismo. Cuando estamos los dos abajo del agua me besa los labios y me sonríe. Mi estómago da un vuelco, al sentir su beso.
Ambos salimos a la superficie y le pego en la cabeza.
Veo como Dylan se saca los zapatos y la camisa y se tira también al agua.
Empezamos a jugar con los chicos a Marco Polo.
El juego consistía en que uno con los ojos cerrados buscara al resto y si tocaba a alguno o lo atrapada tenía que decir quién era y si adivinaba esa persona ocupaba tu lugar.
No sé por qué pero siempre perdía yo, cuando Alexander jugaba. Para mí se aprovechaba para tocarme el culo. Este hombre va a hacer que nos descubran.
- ¡Marco!- grito Dylan.
- ¡Polo!- Gritamos Ariel, Brandon, Alexander, Ada, Carlos y Yo.
Dylan se acercó hasta donde estaba yo, mientras Ada se reía me empujo para estar más cerca de él.
Dylan estaba a unos cuantos pasos cerca de mí, yo me alejaba y me iba hacia atrás.
Entonces alguien me toma de la cintura y me tira para atrás.
Era Alexander que me tiro, para que Dylan lo tocara a él.
- emm, Alex-Dice Dylan.
- Ese mismo -Responde.
Nos reímos todos
- Mami tengo frio- Dice Ariel a Ada.
- Si creo que es mejor que salgamos afuera del agua.
Todos de acuerdo con la idea de Ada, salimos de la pileta. Apenas el viento toco mi piel mojada, un escalofrió sacudió mi cuerpo.