Los corazones negros 3- La Sociedad Subterránea

Capítulo 15: Búsqueda y detención

Corro por los pasillos, pero miles y miles de guardias resguardan el lugar secreto que debo de desconocer. Lo mejor que puedo hacer es utilizar mi camuflaje para ocultarme momentáneamente mientras encuentro a mis amigos. 

 

Los guardias se mantienen en grupos, así que tengo apenas treinta minutos para poder pasar desapercibido, el mapa holográfico me muestra que estoy a quinientos metros de las cárceles en dónde están privados de libertad. 

 

En el lugar de los hechos utilizo mi espada con la habilidad de plasma con la cual destruyo los lugares en donde tienen atrapados a mis amigos, que son celdas que los mantienen cohibidos. Busco lo que son sus trajes y armas que parecen estar bajo observación; esta gente puede estar buscando nuevas formas de armamento. 

 

—Chicos — digo.

 

Solo veo como tratan de abrir sus ojos y tratar de reaccionar. 

 

—Alex — dice Hanna.

—Sí, soy yo, tenemos que irnos — digo.

 

Les tendré que inyectar un poco de adrenalina para que puedan reaccionar a las posibles batallas que tengamos.  

 

—Carajos, estamos drogados — dice Kaz. 

—Solo tienen un tiempo para reaccionar. La adrenalina puede que pase su efecto, así que manténgase alerta — digo.

 

Todos parecen estar bien con respecto a su salud. Así que nos vamos dirigiendo al lugar de los hechos.

 

—Dinos, ¿Qué paso y que ha pasado en la superficie?

—Tienen uno de los pilares y van a atacar los países principales que usan energía radioactiva. Me imagino que necesitan una fuente de ignición potente para enviar la señal. Por el momento estamos bien, también sé que están produciendo armamentos con energía del centro de la tierra.

—Todo porque querías hacer una investigación de una sociedad que se mantiene en secreto.

—Sin mí no tendrían aventuras y además el escritor no tendría con que comer.

 

Corremos hasta la parte central del laboratorio, un artefacto que funciona como núcleo y luces brillantes nos detiene con su belleza. Seguimos en línea recta a lo que parece ser una salida.

 

—Dice salida, pero hay un muro enfrente

—El portal — digo.

 

Activo el dispositivo que nos abre un portal, en ese momento aparece Leo con su armadura para atacarnos.

 

—¿Quién es el sujeto?

—Leo

—No había muerto

—Era un infiltrado y él ha estado vivo en esta ciudad —digo.

—Cambiaste de equipo. Porque no me sorprende viniendo de ti — dice Leo.

 

En ese momento activamos nuestras armaduras mientras leo lanza varios explosivos, nuestro objetivo no es pelear, sino salir de este lugar para evitar el robo del último pilar. 








 




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