Los Cuatro Príncipes

Recuerdos Valiosos

¿Por qué tuviste que mencionar la Joya Misteriosa?... Los presentes guardaron silencio durante unos segundos. Arturo y Elizabeth solo se miraron.

—La Joya Misteriosa es un cuento —respondió Elizabeth.

—John, ve a tu habitación, hablaremos más tarde —ordenó Arturo, luego se dirigió a su hija—. Mañana iremos al Liceo, no es justo que te hayan expulsado de esa manera.

La joven se alegró. Melissa sabía que había algo extraño en esas reacciones, pero se contuvo y no mencionó ni una palabra. John no tuvo otra opción más que marcharse, sintió que ya no valía la pena seguir discutiendo.

Un nuevo día comenzó. Pasando las batallas y las desapariciones, todos estaban en el salón a excepción de Francis, que aún se recuperaba. Había tranquilidad durante las primeras clases hasta el momento del descanso.

—Espero que estés contento —Kenneth se dirigió a Joshua—. Mi hermano todavía sigue recuperándose de sus heridas. Por tu culpa le han quitado su magia.

—¿Qué? —Joshua estaba sorprendido por la última frase. «Unknown ya no tiene poderes…» Pensó.

—Oye, ¿Por qué nos acusas de esa manera? —se metió Dany— No vengas a reclamar, tu hermano era una pequeña molestia para nosotros.

Esto hizo enfadar a Kenneth…

—¿Cómo que ‘una pequeña molestia’?

—Hasta tú lo odias.

—¡Cállate, Beenzi! No sabes nada.

—Creo que deberíamos resolver este conflicto ahora —intervino Jamie—. Kenneth, tu hermano siempre nos atacaba, incluso atacaba a las chicas. Ellas ni siquiera tenían con qué defenderse.

—Eso es verdad… —Sherly se acercó.

Fue ignorada cuando Joshua por fin reaccionó al reclamo inicial…

—Si se trata de ver quien sufrió más heridas, mi amigo Francis está muy grave. Casi pierde la vida.

—Mi hermano ni siquiera peleó con él —replicó—. O acaso, ¿lo vas a acusar por cosas que no hizo? ¡Ustedes lo secuestraron el domingo pasado!

—¡Lo hicimos! Al menos admitimos que lo hicimos.

—Francis lo atacó con esos poderes de electricidad y ahora quieres que yo me compadezca de él.

—¡No compares su daño con el de tu estúpido y malcriado hermano!

Joshua y Kenneth estaban dispuestos a pelear, más allá de decirse las cosas, ya estaban hartos y cualquiera de los dos podría soltar el primer golpe. Los del salón se juntaron al ver que esto estaba más intenso.

—¡No te dejes! —apoyó Emilio.

—Joshua, no lo hagas —Sharon trató de calmarlo.

No hicieron caso hasta que Sherly se puso en medio de los dos.

—¡Basta! Dejen de discutir por esto.

—¿Estás a favor de ellos? —reclamó su novio.

—Joshua y los demás son inocentes, ¡debes creerles! —afirmó.

—¡Secuestraron a Kevin! —trató de hacerla a un lado, pero ella se aferró.

—¡Y aun así no vas a pelear con ellos! ¡Déjalos en paz!

Todos quedaron boquiabiertos al ver que Sherly, siendo novia de Kenneth, estaba en su contra. Claro que los del salón no sabían los detalles. No sabían que Kevin había atacado a Sherly y a Sharon aquella noche, ni mucho menos cuando fue la fiesta de Navidad y las acorraló con una barrera. Hicieron sus expresiones de decepción y burla. Dora y Azucena se miraron, sonrientes al presenciar esto e impacientes por ir a contárselo a Sarah.

—Entonces, ¡quédate con ellos! —fue su respuesta, estaba más molesto al ver que ella los defendía. Salió del salón.

La chica no dijo nada, se quedó quieta mientras los demás se alejaban, ya no habría pelea. Sharon se acercó, como muestra de apoyo.

La fiesta de Navidad… en esa fiesta habían pasado cosas muy relevantes.

—¿Así que tienes el poder de la Electricidad? —preguntaba Nelly.

—Sí. Nuestros poderes son diferentes —respondía Francis—. Joshua es del poder de Fuego, Dany del poder de la Lluvia y Jamie del Hielo.

—¿Y no pensaban decirnos nada? Si no hubiera sido por el ataque de hace unos momentos, jamás nos habríamos enterado.

—No es necesario que lo sepan. Ustedes solo tuvieron suerte… las atacaron y tuvimos que defenderlas.

—Lo dices como si hubiera sido una carga —la chica comenzó a molestarse—. La verdadera carga es tener esos poderes. Por culpa de ustedes, nos atacaron.

—¿Ves por qué no era necesario que lo supieran? —él también se molestó— ¿Por qué no vas con tus amigas?

Nelly miró alrededor de donde se llevaba a cabo la fiesta. Notó que Joshua y Sharon estaban hablando con Betsy y Mark. Jamie y Melany compartían pastel. Dany y Lucero jugaban con la nieve.

—Por lo que veo están muy ocupadas… —dijo, al desanimarse un poco.

Francis también se dio cuenta de sus amigos.

—A propósito… —dijo ella de repente— Deberías tener cuidado. Tuviste ese accidente y tal vez con los poderes sea más peligroso.




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