Los Cuentos sin Dueño

Azul

Verte, verte tan dinámica tan estática, desplazándote entre miradas pero aun así coronas allá arriba el firmamento ¿Qué será lo que habrás presenciado? ¿Me podrías contar alguna historia de tiempos pasados cuando la gente te miraba en expectación divina? Contame si es cierto lo que se dice de vos, ¿guardas secretos allá en tu media sombra? Dicen que sos salvaguarda de lo secreto, hablan de la gente de la luna que tantas veces podría habernos visitado, quien sabe allá en Giza o en Rosewell levantando figuras en la arena. Decime vos que estas más cerca que nosotros del vacío, ¿existe más allá del mundo? Y acaso, tal cual haces en este lugar, ¿serás guardiana también de aquello extraño?

Cuantas interrogantes surgen en una noche de cerveza, ¿no estás un poco cansada? Me imagino que habrá otros que también te hablen, que busquen consuelo en tu mirada porque a pesar que te haya reemplazado la figura paterna, aquella tan narcisista, vos seguís siendo divina para muchos.  ¿Respondes acaso sus plegarias? ¿No estas cansada de tanto pedido estúpido? De tanta charla sin sentido aderezada con ruego, aquellos que hablan del amor, del éxito o de la buena noche.

¿Te acordas? Aquellos días los dos enamorados, que (tal vez un poco celosa) te ofreciste para bajar a mi mano y ser regalo de otra pretendiente. No pudiste contra tu naturaleza y allí te quedaste quieta, y yo con tanta bronca porque me hubiera gustado tenerte en la palma y cumplir esa promesa que hice en tu nombre. Pero, tranquila, no te preocupes que la otra desgraciada siempre me tuve entre vuelta y vuelta, y finalmente siempre retorne a vos. Y como había otra para mi seguro que también para vos hay muchos, y cuando se esconde tras la montaña tu amor verdadero vos salís toda coqueta, tentadora para los insomnes, para los que viven de viaje sino ¿porque el mar se alza para recibirte? ¿Por qué los barcos se pierden de costa a costa y los hombres alzan canciones a tu nombre?

Casi me gustaría que todas las noches estés tan cerca como ahora ¿no te parece extraño? Que a base de copas los hombres puedan apreciar tus facciones, tus imperfecciones (si es que las hay) que te sientas cerca de la humanidad por quien velas, o más bien que los otros te sientan cerca mientras vos  allá arriba te mantenes en esa estática dinámica que impresiona.

¿Quemas no? Ese es tu verdadero propósito, destruir en alma, destruir en cuerpo. Te presentas como la alegría como la cerveza fresca en un día de verano que sos bebida y bebida hasta que te expulsamos en vergüenza, en secreta agonía. Y hoy más que nunca te sentimos cerca, ¿Por qué te gusta matar en mirada directa y placentera? Como que cada vez que amenazas con tu ausencia, haces que caigamos moribundos hasta verte al otro día una vez más.

Tal vez mañana no te vea ¿vas a estar? No creo, te conozco, sos asi de caprichosa mañana no me veras ni a mi ni a nadie por eso hoy viniste mas cerca que nunca, casi al borde de la atmosfera. ¿Sabes que vos tambien sos una desgraciada? Que jugas allá con tu alma gemela la de luz brillante, con nosotros (tus amantes) y con tu niño el mundo. Que gracioso, haces que se me escape la botella de las manos, ¿compartimos una risa? ¿A la vez que compartimos el abrazo? 

Espero verte mañana, aunque sé que no es posible cuando veo que tu luz azul desaparece de mi vista.




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