Los Demonios Mentales (libro 1)

Capítulo 41

Capítulo 41

"El Lugar Secreto"

— ¿No tienen ninguna duda? —Preguntó John un poco sorprendido.

Yo tenía muchas dudas.

Por un momento no quería entregarle las hojas que había firmado hace unos segundos atrás. Pero no porque no quería un disco, sino porque tenía miedo.

Miedo de lo que pueda llegar a pasar, mañana.

Siento que no estoy preparado para cumplir mi sueño... y todo paso muy rápido.

Larry en el bar, dándome su tarjeta, después de tener un momento realmente difícil, descubrir quién era en verdad me había dado su contacto, luego conocer un edificio demasiado irreal para donde acostumbro a vivir...

Ahora tener que estar sentado aquí con personas de mucho poder, me hace marearme y querer vomitar.

Y mas no teniendo el apoyo de mi verdadera familia, solo tener que estar lidiando con mi mente de que "todo va a salir bien". No era así como me planteé todo desde un principio... quería un final mejor, pero no estamos en los finales de las películas de Disney, estamos en un final de la realidad.

—Espero que Yannick salga de aquí feliz con todo esto, solo quiero decir eso...

Sentí la voz de Rosa.

Larry la miró fijamente y creí que le diría algo pero prefirió callarse, lo cual resulto un comportamiento muy maduro...

— ¿Y cuándo empieza a grabar? —Preguntó David algo incómodo mientras miraba una vez los papeles largos que tenía en las manos.

—Lo más antes posible...

John dijo mientras recogía los contratos que acabábamos de leer y se lo entregaba a Tifanny que se encargaría de guardarlos.

Sentí una punzada en la boca del estómago, cuando razoné que ya no había vuelta atrás... mi vida si o si daría un giro de ciento ochenta grados y yo tendría que estar listo para aprender a superarlo.

—Ya tenemos las canciones seleccionadas —Aclaró Larry —Tendría que hablar con equipo uno, para ver si tienen un lugar en esta semana para ir organizando quien será el próximo a grabar...

Mi vista se me estaba nublando y no podía imaginarme a mí en un estudio... pero luego recordaba las palabras que Larry me dijo en el café el primer día que hablamos sin interrupciones, y cara a cara.

Me dijo algo parecido a que en Estados Unidos puede pasarlo todo.

Mi abuela estaba mirando y examinando a los sujetos que tenía delante... no sabía si estaba enojada conmigo, o que le ocurría porque realmente estaba extraña.

De seguro estaba tan confundida como lo estuve yo el primer día, y en semanas hasta que caí a la realidad.

— ¿Cómo te sientes, Yannick?

Sentí vibrar mi celular nuevamente, pero lo ignoré.

—No sé cómo explicarlo...

Larry largó una carcajada y yo lo miré sarcásticamente cuando reaccionó de esa manera... sabía que le daba risa que fuera tan sensible.

Tiffany se levantó de su asiento y con "un permiso" salió del lugar a llevarse los contratos a un lugar que no conocía.

Aproveché para tomar mi celular y ver el mensaje que había escrito Cheryl:

"Necesitamos vernos... Tengo que mostrarte un par de secretos... ¿Esta noche te paso a buscar?"

Siempre siendo tan misteriosa... "Un par de secretos".

No dudé en escribirle y ser tan directo:

"Claro. Nos vemos esta noche... ¿A qué hora?"

Larry me tomó del brazo automáticamente cuando dejé de escribir el mensaje, para llevarme a hablar a solas, lejos de todas esas personas que estaban en el cuarto.

Vi por última vez a mi abuela haciéndole algunas preguntas a John, que se hallaba en su asiento muy relajado.

Cuando estábamos afuera del cuarto donde acabábamos de firmar todos los contratos, Larry se ha acomodado para preguntarme algo.

—Gracias por traerme las canciones que te pedí... ¿Te ha llevado trabajo?

—No he dormido por noches para seleccionar algo...

Sonrió inmediatamente cuando oyó lo que le dije.

—Así me gusta que hagan el trabajo...

No dije nada porque no sabía que decir.

—Por cierto tus letras son algo...

—Deprimentes ¿No?

Hizo una mueca y negó con la cabeza.

— ¿Por qué piensas algo de esa forma?

—Porque una chica una vez que toqué en el bar me dijo eso...

Se rio un poco y yo también, por lo que había contado, pero no estaba mintiendo.

Recuerdo bien ese día, que luego que toqué doce canciones y bajé del escenario, ella se acercó y me dijo: "¿Por qué escribes tan deprimente?"

Ese mismo día, cuando llegué a mi casa, empecé a borrar de algunas canciones algunas palabras que me parecían tristes, pero luego al día siguiente lo pensé bien y las cambie de nuevo como estaban antes.

Si a ella, no le gustaban estaba perfecto, pero era lo que salía de lo más dentro de mi ser y para mí lo que importa es lo que te sale de corazón, así que no iba a hacerle caso.

—Bueno pero esa chica debía escuchar otro tipo de letras... —Suspiró mientras se rascaba suavemente la cabeza— Las que son siempre lo mismo, tu sabes, las de amor, y esas cosas...

Asentí con la nariz arrugada porque a mí no me gustaban esas canciones.

—Yo creo que tú escribes realmente diferentes a todos los demás...

— ¿De verdad?

—Eres diferente, porque tienes una visión incomparable del mundo.

Me estoy creyendo lo que me dice Larry, porque él ya está en el tema, él sabe de esto, ya que es productor musical.

A mí me van otro tipo de letras, además de las de amor adolescente, también me parece que existen otros tipos de letras de las cuales puedas abordarlas como:

Problemáticas sociales.

Depresión.

O simplemente alguna opinión de algo que me interesa o me preocupa.

—Tienes que pensar algún nombre artístico... nosotros te ayudaremos.

Interrumpió mis pensamientos con algo totalmente diferente de lo que veníamos hablando.

— ¿Nombre artístico?

—Sí, quedarías mejor con uno de esos, no con Yannick Walker...

—Pero ese es mi nombre...



#312 en Joven Adulto
#481 en Thriller
#183 en Suspenso

En el texto hay: depresion, drama, juvenil adulto

Editado: 25.05.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.