Capítulo 48
"Cambios en mi vida"
Mi estómago dolía.
Mi corazón estaba latiendo a mil.
Estaba caminando por las calles de Houston, como muchas personas lo estaban haciendo ahora. Todo el esfuerzo que había hecho para mantener la calma se fue en cinco segundos cuando razoné lo que realmente iba a ver...
Todo el esfuerzo de estas últimas semanas se apoderó de mi psiquis y ahora está dando resultado de un Yannick realmente ansioso, por ver lo que acababa de pasar.
La gente estaba caminando normalmente, tan tranquila, que me hacía volverme loco porque yo era el único que estaba nervioso.
Yo era el único, al que le dolían los pies por no llegar a ver lo que tenía que ver.
Decidí ir solo, porque no soportaría estar con otra persona que me esté hablando y responder sus preguntas.
Estaba realmente ansioso por ver algo que nunca esperaría a ver y distraído para responder preguntas...
Tenía el dinero en el bolsillo, tal cual el precio que estaba porque Larry me dijo que así estaría, yo ya sabía todo lo que estaba pasando porque se trataba de mí...
Era ese cambio fenomenal...
Llegué a la disquería más prestigiada de toda la ciudad donde vivía... donde siempre estaba lleno de adolescentes comprando los CDS, de sus bandas o cantantes favoritos. Me recuerdo a mí yendo con Melody a comprar algunos CDS para mí y algunos para ellas...
Lo que no recuerdo es que nunca pensé que iría a buscar un disco que fuera mío. Un nudo en la garganta se apoderó de mi cuello y me quedé mirando la vidriera de la disquería.
Hoy, el centro estaba realmente lleno...
La gente hacia sus compras, la gente salía de trabajar, los niños salían de la escuela, los adolescentes salían a caminar... toda una vida normal de la que estuve rodeado mis dieciséis años y creía que así iba a ser por el resto de mi vida.
Toqué el vidrio donde estaba y lo sentí frio...apoyé mis dedos.
Luego pude ver a la entrada un poster de la banda del momento donde estaba el vocalista que Melody estaba "enamorada" o más bien "que era su amor platónico".
No me imagino un poster de mí, algún día...
Entré y pude sentir algunas vistas clavadas en mí como siempre era habitual cuando entraba a un lugar...
La gente me miraba como si fuera un extraño y ahora sigue pasando.
No tenía nada llamativo para mostrarles, solo un jean celeste, con unas zapatillas, una camisa a cuadros, y mi mechón tapando mi ojo izquierdo...
Lo de siempre.
La disquería estaba llena de gente, revolviendo CDS, a las risas, charlando, haciendo las cosas cotidianas de lo que me esperaría.
Recuerdo cuando acabé de grabar la quinta y última canción de mi EP, y a equipo uno, aplaudiendo que al fin habíamos terminado.
— ¡Buen trabajo, chicos! —Dijo Scott.
Larry se levantó y me fue a abrazar. Un abrazo corto pero confortador, justo lo que necesitaba en ese momento de emoción.
—Te avisaré por mensaje de texto, cuando lo puedas ver en las disquerías...
—Eso no va a poder ser posible ¿O sí?
Le pregunté con una sonrisa.
—Tú solo espera a recibir mi mensaje de texto y listo.
— ¿En serio?
—Después de la edición está la de distribución y ahí estará en la disqueras de Houston este trabajo que acabamos de terminar.
— ¿Todo tan rápido?
—Así es como se manejan las cosas, Yannick... no sé cuánto tiempo crees que dura un trabajo realizado en tiempo y en forma...
Se fue dejándome con muchas dudas al respecto, mientras equipo uno empezaba a ordenar los cinco demos que habíamos trabajado la última semana.
Lo que terminé de recordar me había pasado hace una semana y hoy recibí el mensaje de texto... no había pasado mucho tiempo, pero supongo que fue tiempo porque habían sido pocas las canciones y de una duración normal. Yo no me había retrasado en el tiempo que habían dicho y Larry tenía muchos trabajadores en ese enorme edificio, lo cual se podían repartir bien los trabajos.
Estaba tan cansado de pensar y ni siquiera era capaz de preguntar dónde estaría mi supuesto EP en esta enorme disquera.
Creo que mi trabajo es descubrir...
Descubrir lo que mis ojos quieren ver...
Empecé a caminar, observé que la caja estaba llena, había tres chicas en el género rock, buscando algún disco en particular y susurrándose cosas, mientras yo miraba hacia todos lados a ver si encontraba un pequeño disco con mi otro yo y una rosa negra en su mano.
No quería ni imaginar la sensación que sentiría...
Estaba preocupado, ansioso, lo cual no podía tranquilizarme para buscar con calma donde iba a estar mi trabajo.
Caminé, y caminé, y me choqué con una chica al cual no le caí bien.
—Lo siento.
Me disculpe, pero ella me miró de arriba y abajo, no me contestó nada y se fue. Me hizo recordar a como me trataban en la escuela.
Seguí caminando hasta que llegué a la sección "Novedades" en donde ahí siempre estaba lo nuevo y fue ahí cuando me quede duro...
Había muchos discos...
Pero en el medio estaba el mío, el que estaba buscando, en el que en la tapa aparecía yo... con una rosa negra porque así me había surgido la idea.
Ahogué un grito de emoción para no parecer un desesperado, caminé lentamente y vi que había cinco copias del mismo...
Los ojos se me llenaron de lágrimas, tenía ganas de agarrar ese pequeño disco, y decirle a toda la disquera:
— ¡Ese soy yo! ¡He cumplido mi sueño!
Pero no me animaba por nada en el mundo... mi corazón latía a mil y sonreí como un estúpido. Lo tomé y supe que mi mano estaba temblando, mordí mi labio inferior y observé la foto...
Ese chico de pelo negro azabache, de piel blanca como la leche, con ropa cara y de marca, no parecía ser Yannick... El Yannick Walker común que estaba en la disquera de su ciudad...
No lo puedo creer.
Mi estómago dejó de doler, pero el temblor en el cuerpo estaba.