— SONRÍAN SEÑORITAS. ¡DIGAN WHISKY!
— ¡WHISKYYYY!
DICIEMBRE DE 2018
Aurora Cyrine Majewski, la pequeña luz de la familia. Hermana menor de Gina e Isabella Majewski. Aquella niña que siguiendo los mismos pasos de su talentosa hermana bailarina, lentamente iba abriéndose camino en el difícil y competitivo mundo del ballet.
Acababa de tener su primera presentación oficial en la obra escénica Nutcracker con la Academia Helen Kneist y se encontraba realmente feliz de haber podido representar el papel principal de Clara Stahlbaum. La persona que se había metido al backstage después de haber finalizado la obra, para tomarles unas cuantas fotografías de recuerdo a ella junto con sus compañeros de ballet, era Michael Bruchhagen. El mismo que se había convertido en un segundo padre para ella y que lo había sido desde que el verdadero, Said Majewski partió al cielo igual que lo había hecho su madre Paula.
Según la propia Aurorita, Michael era el padre más cool que pudiera existir, el doble de cool estando junto a su esposa, Gina Alicia. Ambos eran fanáticos de las aventuras en el mundo de Clara y el Cascanueces, y esa fue una de las razones por la cual se encontraban allí como un par de chiquillos espectadores, desparramando emoción por su magnífica actuación.
— Estoy muy orgullosa de ti, mi Aurorita. ¡Estuviste perfecta! —dijo su hermana, abrazándola fuertemente—
— ¿En verdad lo crees?
— ¡Por supuesto! Si fuera de otra manera, te lo diría.
— Después de tu hermana, fuiste la Clara más hermosa de todas las Claras, princesa —recalcó Michael, sonriendo—
Un par de años atrás, Gina Alicia había logrado el papel de Clara para la Obra de Ballet de la Compañía a la cual representaba, y Aurora estuvo allí, desde luego. La vio lucirse y brillar en lo más alto de la luna y de las estrellas, y se prometió a sí misma que un día sería igual de exitosa que ella.
— Ahora ve al camerino que están esperándote con una sorpresa.
— Mein Gott! —exclamó entusiasmada— ¿Una sorpresa?
Aurora amaba mucho las sorpresas por lo que no perdió tiempo en ir hasta el camerino de inmediato y ver de qué se trataba.
Al ingresar, al camerino, fue recibida entre serpentinas, felicitaciones y obsequios. Su hermana Isabella, el pequeño Ezra (hijo de Gina Alicia y Michael), y su abuela Elwira estaban allí aguardándola.
— Este ramo es para ti, hermanita.
— ¡Oh, mi pequeño y guapo Ezra! ¡Muchas gracias! —exclamó llenándolo de besos— Amo recibir ramos de flore.
— Estuviste radiante, hermanita. ¡Te amo mucho! Me siento muy orgullosa de ti.
— Todos estamos orgullosos de ti, mi pequeña. —replicó su abuela Elwira—
— Gracias por estar aquí. Estoy muy feliz de que hayan podido casi todos venir a verme.
— Tú tío Najib no pudo estar aquí porque anda detrás de Amalie debido a su presentación de mañana.
— Es verdad… casi olvidaba qué mi primita también tendrá su presentación.
— En cuanto a tu tío Alexander, te envía muchos saludos desde Berlín.
— Lo bueno es que pronto nos reencontraremos todos para las fiestas de Navidad.
— Bien... Ahora préstame atención o no te daré tu regalo más importante —dijo su hermana Isabella—
— ¿Hay un regalo más importante? ¿Dime de que se trata?
— Adivina
— No acrecentes mis ansias, Isabella.
— Te doy una pista. Es algo que quieres desde hace mucho, mucho tiempo, pero Michael decía que estabas muy niña para tener uno.
— Ah... Ah... Es Un teléfono móvil. ¿Finalmente papito Michael me compró uno?
— Revísalo y averigua —dijo su hermana entregándole un bolso decorado con moños—
Ansiosa, abrió de inmediato el bolso donde se encontraba aquello que tanto deseaba. Un teléfono móvil de la misma marca y serie que le había pedido con tanta insistencia a su papá.
Mientras derrochaba alegría, Michael y Gina llegaron hasta el camerino.
— De hecho, todavía creo que estas muy niña para tener un teléfono móvil. Hubiese preferidoesperar un poquito más. A qué cumplieras 14 años o a que Santa Claus te lo trajera de obsequio, pero como Navidad ya está cerca, y también tu cumpleaños, Gina me convenció para qué lo adelantara.
— ¿Te he dicho ya que eres el mejor papá del mundo, Michael? —dijo llenándolo de besos y abrazos— ¡Te amo mucho! Gracias por convencerlo, hermanita mayor —le susurró a Gina desde atrás atrás guñándole un ojo—
— Esta señorita definitivamente resultó ser tan talentosa como la hermana mayor —irrumpió dentro del camerino el maestro Sascha Besler—
— Y no podía ser de otra manera, maestro.
El maestro Sascha Besler era el director coreográfico de la obra, y en otros tiempos también tuvo la oportunidad de dirigir los pasos de Gina Alicia, razón por la cual conocía de sobra los talentosos genes de las hermanas Majewski.
— Lamento haber interrumpido este bello momento, pero los del
Magazine Theater requieren del elenco completo,npor lo que debo llevarme a la protagonista —snunció brevemente y con prisa el maestro—
— ¡Estaré en la primera plana del Magazine Theater! ¡No lo puedo creer! —exclamó de felicidad la pequeña, encargándole sus obsequios a su familia—
Con raudos pasos, Aurora salió del camerino rumbo al salón de conferencias.
Sin duda alguna para la pequeña Aurora, ese fue el mejor día de toda su vida, pero apenas el inicio de grandes aventuras y sueños cumplidos sobre los escenarios. Su anhelo de convertirse en una gran actriz, bailarina y cantante iban mucho más allá de lo que cualquier persona pudiera imaginar, por lo que se prometía a sí misma no detenerse hasta poderlo lograr
MANSIÓN DE BYFANG ( AL DÍA SIGUIENTE)
La luz de un nuevo día trajo consigo destellos de emoción para la pequeña Aurora. Ansiosa, con prisa bajó a desayunar esperando oír buenas nuevas.