Cap 26: Lima.

Los 4 van andando por el túnel. Diego va el último con Pío en el hombro. Rin va delante con la cabeza girada mirando a Diego. Al fondo una luz que muestra el final del túnel.

Sara: Creo que ya hemos llegado.

Diana acelera hasta cruzar el final. Al cruzar ve una gran cámara iluminada por muchas luces. En el centro de la cámara hay una ciudad pequeña con edificios cada vez más altos según se acercan al centro. La cámara tiene otras 3 cuevas que están a los lados y detrás de la ciudad. Toda la ciudad está hecha con casas de piedra y son rectangulares. En el tejado del edificio central hay una gran piedra azul que brilla. Tiene forma de lágrima invertida.

Detrás de Diana llegan los demás.

Sara: ¡Guau! ¿Esto es Lima?

Rin: Si. Ya hemos llegado.

Sara: ¿Y ahora donde hay que ir?

Sara mira ha Diana.

Diana: Tendríamos que ir ha buscar al cliente.

Sara: ¿Y quién es el cliente?

Diana: En el cartel ponía que era el alcalde.

Sara: Entonces vamos buscarle.

Los 4 empiezan caminan hacia Lima. En las calles hay muchas tiendas de gente que vende metales y cosas similares. En ellas no hay mucha gente.

Ssra: La misión era de exterminar unos monstruos débiles ¿no?

Diana: Sí.

Sara: Será un buen entrenamiento. Además cobraremos por hacerlo.

Rin: ¿No te estás relajando mucho?

Sara: ¿Qué quieres decir?

Rin: Si mal no recuerdo, ese simple monstruito nos ha dejado ko a los 4.

Sara: Ahora que lo dices es verdad.

Diana: Pío solo nos hizo dormir. Normalmente los monstruos no suelen ser así.

Sara: ¿Y como suelen ser?

Rin: Animales grandes y fuertes.

Diana: Eso no es verdad. Los monstruos suelen ser animales pequeños con magia débil. Ya vistes que Pío nos hizo dormir pero no podía hacernos daño físico .

Rin: (Tono ironico) Gracias Diana.

Sara: Da igual como sean. Acabaremos rápido con ellos y de vuelta a casa.

Los 4 llegan al edificio grande. Tiene un cartel en el que pone ayuntamiento. Rin toca la puerta.

De ella sale una mujer. Es una mujer delgada con gafas gruesas y redondas que amplían sus ojos. Es morena y pelo corto. Lleva un traje con corbata negra.

Mujer: Buenos días. ¿Desean algo?

Rin mira ha los demás.

Rin: No esperéis que hable yo.

Sara: Veníamos por un trabajo.

Mujer: ¿Un trabajo? ¿Sois los miembros de la smap?

Sara: Si señora. Somos los dragones negros.

Mujer: Bueno… Pasad.

Los 4 pasan. Dentro es una sala de piedra igual que por fuera. Tiene unas escaleras con una curva que llevan al segundo piso enfrente y a la izquierda una habitación con un cristal donde entra la mujer.

Mujer: Os esperan arriba.

Los 4 suben por las escaleras hasta el segundo piso. Allí hay un hombre pequeño con gafas grandes detrás de una mesa. Lleva un traje y un sombrero negros.

Alcalde: ¿Vosotros sois los que venís por la misión?

Sara: Si.

El alcalde se ríe.

Alcalde: ¿De verdad? Pero no parece que podáis contra los monstruos.

Sara: ¿Nos estas llamando débiles?

El alcalde la mira.

Rin: Sara contrólate.

Alcalde: Bueno. Ya que nadie más ha aceptado la misión creo que no tengo más opción que confiar en vosotros.

Sara: No se preocupe. Nosotros acabaremos con esos monstruos. Sólo díganos dónde están.

Alcalde: Los monstruos están en dirección oeste. Por lo que nos han dicho hay como 50 monstruos.

Diana: ¡¿50 monstruos?!

Sara: No se preocupe. Nos pondremos con ello en seguida.

Los 4 bajan por las escaleras. Salen del edificio y se dirigen hacia la cueva oeste.

Diana: Han dicho que hay como 50 monstruos. Espero que no sea demasiado peligroso.

Sara: No te preocupes. Acabaremos con ellos rápido y se lo restregaremos por su cara.

Rin: Por si no os acordáis. Rubén tiene prohibida la salida así que más os vale que no lo llaméis.

Sara: Si si. Ya lo sabemos. No vamos a necesitarlo.