Los hermanos Tonali: Atractivos y Peligrosos.

Capitulo 19

Mientras alcanzaba el éxtasis, Bethany alzó su mirada hacia las estrellas, testigos mudos de la pasión que desbordaba de sus cuerpos. Los prometidos estaban en el jardín trasero de la casa, adentrados en la piscina, entregándose a los deseos de la carne. Ciro tenía a su amada contra el bordillo haciéndole el amor. En su mente no había cavidad para alguien más que Bethany. No percibía otro perfume que no fuese el de lavanda que rezumaba de su piel, no degustaba un sabor diferente al de cerezas de su pinta labio y su tacto empezaba a recuperar lo que en el pasado fue suyo. Bethany era todo lo que tenía, todo lo sentía. En ella giraba su mundo.

Por su parte, Bethany no era recíproca a sus sentimientos. Su mente le jugaba sucio y, en lugar, de permitirle disfrutar de su prometido, le entregaba otros recuerdos que la confundían. Adheridos a Brahim: su fragancia, su tacto, su voz... Lo sentía más familiar que a su prometido. Se afanó por vivir el instante, por sentir al hombre que con tanta devoción le hacía el amor, pero los recuerdos se oponían. Si cerraba los ojos era a Brahim a quien veía encima de su cuerpo desnudo. Y con él llenando su mente, alcanzó por segunda vez el clímax.

Cuando sus cuerpos se vieron satisfechos, se tumbaron sobre el césped verde que rodeaba la piscina. Ciro de espalda y Bethany a su opuesto. Ésta sintiéndose avergonzada, no se supone que pensara en su cuñado mientras intimaba con su prometido. No sabía si era mejor o peor reconocer que se trataban de memorias extraviadas.

-¿Te encuentres bien? -Preguntó con voz dócil Ciro notando a su futura esposa extraña. Bethany giró su cabeza para verlo, recostándola sobre el dorsal de sus manos unidas.

La lengua le vaciló con confesar lo que la inquietaba. Él diría si era real o simple fantasía. Sin embargo, se cohibió, y prefirió hablar de otro asunto que también la molestaba.

-¿Te gusta lo que haces? -Por el gesto incomprendido del italiano, se especificó. -Tu trabajo. ¿Te gusta?

-Sí. -Fue breve no iba a extenderse en algo de lo que no tenía la menor idea. - ¿A qué se debe la pregunta?

-Estos últimos días que he estado al mando de mi empresa me ha resultado... -No supo cómo terminar. Creyó que al regresar a su empleo sería feliz, sin embargo, no encontraba la pasión que la motivó a convertirse en una agente de bienes raíces. Le parecía un trabajo tedioso cuando menos.

-Es solo cuestión de tiempo, verás que más pronto de lo crees volverás a ser una experta en la venta de inmuebles. -Motivó su prometido, sintiendo una amargura por el brillo apagado de sus ojos.

Apartó de su rostro los mechones que lo cubrían y se acercó para depositar en una de sus mejillas un beso. Ciro era un hombre bastante apasionado, pero más romántico. Para Bethany sería ideal si el presentimiento de que le ocultaba algo no inmiscuyera en su razonamiento. Deseaba tanto recordar aquel detalle que la hizo dejar toda su vida en Estados Unidos por marchar a Italia y comenzar una nueva vida con un desconocido.

Bethany se reincorporó para acostarse sobre el firme pecho desnudo de Ciro que estaba sobre su espalda.

-Háblame de mi hermano. -Pidió Bethany casi con voz inocente. Ciro llevó una de sus manos a acariciar la espalda de su amada.

-¿Qué quieres saber?

-¿Cómo se conocieron? -Preguntó ahorrándose los rodeos. Ciro no titubearía.

-Tú me lo presentaste poco antes de nuestro primer aniversario aprovechando que él había hecho una escala en Italia, rumbo a Berlín. -Dijo Ciro despilfarrando una confianza abrumadora, que seguramente, hubiese tambaleado si fuese consciente del hallazgo de Bethany. La fotografía que halló en el portátil constaba de muchísimo más tiempo previo a ese primer aniversario. La evidencia indicaba que Ciro conoció primero a Simon antes que a ella. Lo pensó un momento antes de animarse a volver a hablar.

-La noche de la cena... ¿Me constate todo lo que tenía que saber? ¿Estás seguro que no omitiste nada?

-De haber omitido algo seguramente no tuviese gran importancia, de lo contrario no lo hubiese hecho. -Dijo Ciro tomándoselo muy en serio. Su otra mano la llevó a la frente de ella donde la posó con ternura. -¿Por qué lo preguntas? ¿Acaso haz recordado algo?

-Eso creo. -Dijo en un mascullo, bajando la mirada por vergüenza, no quisiera decir que aquellas efímeras imágenes en que intimaba con su cuñado era parte de su memoria.

-Cuéntamelo, quizás pueda decirte algo más.

-Son imágenes muy confusas. No sabría explicarme. -Se negó sutilmente.

Ciro no insistió a pesar de que le sentara mal esa pizca de desconfianza que no desaparecía del todo. Aun así, la idea de dejarla libre le resultaba un disparate.

(...)

Un empujón a su taco y Brahim encajaba la bola amarilla en un tronel. Sumaba tres puntos de ventaja en contra de su hermano que miraba la jugada con disgusto. A una distancia considerable, Bethany era espectadora del duelo entre hermanos. Sentada en una butaca de madera que estaba revestida de terciopelo, sin poder quitarle un ojo de encima a su cuñado. Él le había dicho más de lo que su prometido se había animado a decirle, y pretendía sacar más de ese baúl abierto.

-Señor Ciro Tonali, preguntan por usted al teléfono. -Informó una de las empleadas domésticas que se marchó de la estancia con prisa.

El solicitado dejó su taco sobre la mesa y salió de la habitación de juego. Ofreciéndoles una inmaculada privacidad a las dos personas que más amaba en su vida y que más daño le hicieron.

-Te sentaras ahí el resto de la tarde a acosarme con la mirada. -Recriminó Brahim sin desviar sus ojos a ella. Bethany sostuvo un agobiador suspenso unos instantes. Se levantó y se acercó a la mesa de billar. Tomó el taco de su prometido con el que golpeó la bola blanca y esta, a su vez, golpeó la roja que rodó a unatronera. Brahim levantó las cejas, reconociendo que había sido un buen tiro.

-Necesito que me respondas a algo. -Habló Bethany mientras que Brahim rodeaba la mesa para quedar más cerca de la bola blanca. Quedó justo a un lado de ella.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.