Capitulo 61

A primeras horas del día, Michael se dirigía al este de la cuidad, hacia la empresa “Bienes raíces, Carter” Iba angustiado como no podía ser de otra forma teniendo en mente que no sabía absolutamente nada de Bethany desde hacía ya varios días. Una mujer que había adoptado como pasa tiempo sentarse en alguna banca de la plaza principal, de pronto dejó de ir. Y siendo consciente del linaje al que pertenecían su esposo y su cuñado, sus preocupaciones estaban más que justificadas. Bethany era una amenaza para los hermanos, por lo que su vida estaba condicionada. Aunque era una auténtica desconocida, Michael no podía dejar de preocuparse por ella. Vivía engañada.

Llegó a la empresa y se encomendó a sus dioses para que todo saliera bien, no solo para Bethany sino para él también. Desde el primer momento en el que pisó aquella propiedad había puesto su vida en arriesgo. Estaba bajo el radar de los hermanos Tonali, eso era seguro. Cada movimiento debía ser cuidadoso.

-Estoy buscando a Bethany Carter. -Preguntó a la primera persona con la que se tropezó recién entró al lugar.

-La señora Tonali no se encuentra en las instalaciones de la empresa. -Le respondió Lorient. Michael hizo una mueca de duda.

-Podría comunicarle que vine y que me gustaría que pudiéramos vernos para platicar un rato.

-Por supuesto que sí. -Aseguró Lorient con una enorme sonrisa plasmada en su rostro.

Fue todo. Michael dio media vuelta y regresó a su vehículo, imaginándose lo peor. Condujo un poco más hasta los conjuntos residenciales de Bom Niu. Subió en el ascensor hasta la quinta planta. Tocó el timbre del piso 5B, y la respuesta no demoró.

-Michael, qué sorpresa. . -Dijo Karla inquietada. -¿O prefieres que te llame Derek?

-No. Michael está bien. -Dijo el detective pasando sin permiso al apartamento. Karla no tuvo más remedio que hacerse a un lado.

-¿Qué haces aquí? ¿Acaso necesitas que vuelva a fingir ser tu esposa? -Preguntó luego de cerrar la puerta.

-No, vengo a preguntarte por Bethany Carter, la novia de la boda. ¿La has visto? ¿Sabes algo de ella? -Karla no pudo evitar intrigarse.

-¿Por qué yo sabría algo de ella?

-Por favor, sé que has estado viéndote con Brahim Tonali desde el día de la boda. -Karla se ruborizó. -Quizás él haya dicho algo referente a Bethany. Le había seguido la pista, sabía que habían tenido varios encuentros fortuitos de amantes.

-A mí no, desde luego. Nuestra relación no es tan cercana como para que me confíe sus secretos. -Michael suspiró viendo cómo sus últimas esperanzas por descubrir algo de Bethany se escurrían.

-Te siguiero que te alejes de ese sujeto. No eres tonta sabes en dónde te estás metiendo y la culpa me mortificaría si llegara a pasarte algo, a final del cuento fui yo el que te puso frente a ese hombre. -Aconsejó Michael como el amigo que era. Luego se marchó.

Se había mudado de Nápoles a Florencia poco antes de la boda. Cuando cerró el trato con Bethany ésta le había hecho prometer que la invitaría a su nueva casa, y a pesar de que no tenía intenciones de hacerlo, prevenía una visita sorpresa.

Guardaba en cajas toda la investigación realizada, dándola ya por terminada. Había sido un caso muy interesante que lo dejó boquiabierto al armar la última pieza del puzzle. La relación entre Anne y Bethany era inesperada. La primera había muerto sí, pero había algo más allá de su muerte que resultaba perturbador. Lo que no tenía claro era cómo se lo diría a James. Aunque en su recóndita avaricia, tenía planeado cobrarle un dinero extra a cambio de entregarle toda la investigación. La desesperación que James tenía por saber más acerca de Anne lo haría pagar cuánto dinero le pidiera.