Alnitak y Alnilam eran los hijos mellizos, contrario a lo que su padre imaginó no eligieron ninguna constelación donde enfrentarse, ellos querían hacerlo en su mismo hogar, dentro del Cinturón.
Armados con lanzas y escudos, su plan era derrocar al Escorpión cortando el aguijón y entre los dos empujar a su padre desde el lomo del arácnido hacia lo terrenal.
Mientras el Escorpión peleaba contra la lanza de Alnitak. Orión lo haría contra la de su hermana Alnilam.
Cuando su padre envió de un golpe a la tierra a su hija, el hermano, se tiró tras ella para no dejarla sola en un mundo extraño.