Pasaron dos horas, las chicas vuelven a la habitación llevado con ellas fruta y jugo de uva, Annika corre a subir a las piernas de Loki que está sentado en un reposet.
- Papi, ten nananja.
- Naranja hija, naranja.
- ¿Porque ya no creció?
- Supongo que no quiere, no lo sé. ¡Que rico hicieron una camota! – la rubia se deja caer en la cama- un momento ¿ Nos van a dejar dormir con ustedes?
- Magni, ya estás grande – Loki lleva en brazos a Annika- debes dormir sola.
- — resopla enojada, se baja de la cama, se mete a la suya se
cubre hasta la cabeza—
- — Thor ve feo a Loki, este solo encoje los hombros— Magni, cielo mío.
- No estoy no existo, es más me morí — grita debajo de las sábanas, siente el peso de Thor en su cama—
- Cielo, deja que te vea, anda, sal de ahí.
- ¿Que? — solo descubre sus ojos —
- Hasta acá puedo ver el puchero, retira la sábana, si dormirás con nosotros.
- Pero Thor, ya está grande.
- — ignora las palabras del Embustero, toma a la adolescente en brazos con todo y sábanas, lleva a su hija a la cama, él se acomoda a su lado y le ofrece el brazo de almohada, ni tarde mi perezosa acepta acurrucándose en él, Thor le abraza, le tararea una canción de cuna, le da un beso en la frente— aún es temprano ¿Quieres ir a caminar, o solo nos quedamos así los dos como cuando eres niña que nos escondimos de mamá?
- Ujum, si papá, escondidos.
- ¿Se escondían de mí?
- Si, cuando sabíamos que nos ibas a regañar por llegar llenos de lodo.
- Y sangre.
- Y entrañas.
- Y más sangre.
- No puede ser verdad – se sienta en la cama observar el gran bulto que forman los dos- ¿Pero por qué?
- No sé tú dime Loki – Thor hace una mueca divertida cuando Loki le golpea el hombro izquierdo- precisamente por eso.
- Esos vestidos eran de los más finos y elegantes, sin olvidar esos pantalones, las braceras eran del más puro fino cuero asgardiano.
- ¡Papá! No iba a ir en vestido a cazar ¿Verdad?
- Nunca entendí por qué no quisiste ser una fina dama Asgard.
- No es divertido andar entre tantas estiradas, malgeniadas que su única preocupación era saber quién traía el collar más hermoso, la tiara sin olvidar a los pretendientes —rueda los ojos demostrando fastidio—
- No debías competir, solo estar a la altura.
- — saca la cabeza lo ve a los ojos— _Lo hice muchas veces papá, pero no me interesaba para nada andar detrás de un príncipe, teniendo a tres insoportables hermanos.
- Usted lo ha dicho jovencita, hermanos, no pretendientes o futuros pretendientes.
- Ya déjala en paz, todo a su debido tiempo.
- Si, si, no me quiero adelantar a los hechos, ya dije – se vuelve a acomodar en Thor- yo quiero encontrar a mi Thor.
- ¿He? – exclaman los dos- ¿ Cómo?
- Si, esperaré hasta encuentre a mi Thor, aquel que sea capaz de cambiar todo por mí, mover cielo, mar, tierra, incluso renunciar a todo – suspira- espero que sea tan terco, necio, fuerte, formal como papá eso sí más guapo. Que cuando lo vea sus ojos irradien al verme. — Loki se pone rojo de vergüenza, Thor no sabe que decir ante esas palabras—
- No lo busques, solo te va a llegar.
- Si, como te llegó a ti mami.
- Así es, Magni, cuida de tu hermana, Thor de pie.
- Bueno, terminó el receso ¿Te sientes mejor?
- Si papá, gracias. – recibe un beso de Thor, le guiña el ojo-
Loki le lleva al centro de la habitación, él se multiplica en tres formando un triángulo con Thor en el centro, los tres al mismo tiempo cierran los ojos, empiezan hablar al mismo tiempo, las veinte y cuatro runas se hacen presentes, Loki reca cada una en diferentes frecuencia, tono y volumen, una a una se va tatuando en el cuerpo de Thor. Magni desde la observa atenta y por lo bajo canta las runas imitando a su padre, al terminar Thor agradece.
En contra de la voluntad de Loki los cuatro duermen en la misma cama las chicas en medio de sus padres. Annika se acurruca en Magni, entrada la noche Thor despierta seguido por Loki, va a la ventana siente el fresco en su rostro, respinga en su lugar cuando la mano de Loki toca su hombro.
- Es mucho pedir que mañana te quedes aquí con las niñas.
- Lo es.
- Voy a confiar en que te vas a controlar.
- Te doy mi palabra.
- Algo más tangible.
- Thor…
- No quiero que mates a todos los presentes.
- No lo haré, por mis hijos que no.
- Más te vale. Loki
- ¿ Hm?
- Hechiza a las niñas que no vean nada.
Editado: 28.09.2024