Era las cuatro de la mañana. Estaba sentado en una de las bancas de la plaza central esperando el autobús que nos iba a llevar a la excursión. ¡Vaya viaje! Era día domingo y la docente encargada del curso había planeado salir justamente en un día en el que la mayoría de gente se toma un tiempo de descanso.
¿A dónde iríamos? Pues a una área de conservación privada. El curso trataba de conservación de especies naturales. Francamente, no era mi curso favorito pero iba a esforzarme. Ya casi estábamos a fin de ciclo y la verdad las cosas se estaban poniendo duras, exámenes finales y desveladas cotidianas. En esta oportunidad los alumnos del ciclo avanzado posterior a nosotros, nos iban a acompañar, no conocía a ninguno, de lejos lograba visualizarlos, pero sin tomarles mucha importancia.
Mis compañeros aún no habían llegado. Y bueno lamento decepcionarlos y decepcionarme, Karin estaba a una cuadra de mi, pero ella ya tenía enamorado. Lamentablemente así es la vida y esta historia no es la excepción, apenas un mes luego del ingreso a la universidad ella se consiguió un enamorado.
Wau... ¡¡¡Que ironía verdad!!! Jani se había convertido en una gran confidente, de hecho ella y yo compartíamos muchos momentos juntos, nos reuníamos a realizar trabajos universitarios, íbamos y regresamos de la universidad y nos quedábamos durante horas hablando por el celular. Estaba confundido. Lo confieso, no sabía que es lo que realmente sentía por ella. El día de su cumpleaños, junto con algunos compañeros de aula, le habíamos dado una sorpresa, llevándole un pastel a su casa y cantándole el Happy Birthday, esas cosas habían hecho que nos acercáramos mucho, sin embargo y para ser franco, no me había declarado a ella. Y aún ahora sentía esa duda.
Mientras estaba ensimismado en mis pensamientos, giré y vi como dos autobuses se estacionaron a lado de nosotros, la docente empezó a llamar lista y oh sorpresa, a Jani le tocó ir en el primer bus, por desgracia a mi no, yo iba a ir en el segundo. Un poco triste subi y durante todo el viaje no logré dormir. No sé que me pasaba, era una sensación extraña, como de percepción y tristeza. El autobús llegó hasta una zona desierta de la carretera y la docente nos ordenó bajar.
-El área de conservación privada está a dos horas.- Comentó mientras nos indica el camino con la mano.
Mis compañeros y yo empezamos a caminar. De lejos logro ver como Jani va adelante con otro chico, un chico desconocido, de baja estatura, no le doy mucha importancia y camino mientras hago conversación con mis amigos.
-Se estaban besando.- Dice repentinamente uno de mis amigos detrás mío.
-¿Quienes?.- Pregunta Deiry, una chica de test blanca y alta.
-Jani y Alddrin.
Al escuchar eso sentí como si me abofetearan. Senti como si el mundo se me viniera abajo. Yo sé que a muchos nos pasa en la vida. No estar con alguien, no tener definidos nuestros sentimientos y al saber que esa persona va en otro rumbo, sentir que todo, absolutamente todo lo que has construido se desmorona.
-¿En serio?.- Mis oídos se volcaron nuevamente a la conversación entre Deiry y mi compañero de aula.- ¿Los viste? ¿Donde? ¿Cuando?
-Hace rato. En el autobús. Yo estuve en el asiento adyacente y logré verlos.
Ese día fue uno de los días que me sentí más incapaz. Me había enamorado de ella y ni siquiera me había dado cuenta. Caminé como un zombi despavorido y durante toda la excursión hablé e interactúe por mero cumplimiento. Pero mi mente y mis pensamientos se encontraban en otro lado.
Es que lamentablemente en la vida real, las cosas suelen suceder de esa manera, y a mi me estaba pasando aquello que tanto había tenido, enamorarme de alguien que tarde o temprano no me iba a corresponder...