Los Lamentos de Luna.

Sinopsis.

🌙

El eco de sus pasos resonaba en la biblioteca vacía, un santuario de papel y tinta donde yo siempre había encontrado refugio. Pero esa noche, mientras mis dedos rozaban las páginas de un libro olvidado, sentí algo diferente: una inquietud que no podía nombrar. Fue entonces cuando lo miré, sentado al final del pasillo, con una pluma en la mano y una mirada que parecía atravesar el tiempo. Kai. El hombre que cambiaría todo, aunque yo aún no lo supiera.

Su realismo y sinceridad en sus escritos es lo que me habían vuelto una lectora fiel a su autoría. Llenaba la curiosidad que desde pequeña había sentido por el mundo exterior.

Desde joven siempre encontré interés por los libros que tratan la verdad de la vida, no aquellos finales felices que no existen, sino aquellos finales que te hacen cuestionar si de verdad estás leyendo un libro o viviendo algo en carne propia. Soy originaria de Carolina Del Norte y tengo ascendencia coreana por parte de mi madre mientras que mi padre es originario de Washington DC. Nos mudamos a este lado del país cuando yo tendría al menos unos cinco años, hasta la actualidad. Dejé de vivir con mis padres cuando cumplí mis 18 años y pasé a experimentar la soledad en aquel piso que mamá me obsequió por ser una buena hija.

Me caracterizo por ser alguien justa, alegre e inteligente, o es lo que mis padres y familiares dicen de mi cuando les piden que me describan. Hasta hace poco experimenté el peor de los dolores, aquello que nos hace ver lo efímera que se vuelve la vida luego de tener 18.

Perdí a mi abuela debido a un infarto.

Junto con mis padres y hermanita pequeña viajamos a Corea donde le dimos el último adiós antes de sepultar su cuerpo.

Guardaba cada gesto, cada consejo, cada dulce palabra y cada muestra de cariño como a un mismo tesoro del que nunca quisiera desprenderme.

Volviendo a la realidad, Kai permanecía dónde antes lo había visualizado y algo dentro de mi se removió al verlo esbozar una sonrisa tan efímera que al segundo de nacer ya él la había vuelto a esconder. Me pregunté internamente: “¿Alguien alguna vez podría cansarse de aquel amado al que siempre deseó? ¿Sentir que con el primer toque has saciado cada anhelo que mantuviste, tu imaginación?. Yo pensaba que no, nadie nunca se cansa de lo que de verdad ama.

Lo he amado desde que los 21 y ahora a mis 22 años siento que nunca pude superar aquel momento tan místico cuando tocamos nuestras manos al saludarnos, jamás borraré de mi mente como me sentí al ser el centro de su atención. Es casi irreal pensar que me he enamorado de un hombre que nunca he besado, que nunca he tocado y que nunca sería completamente mío.

Hasta hace poco surgió el rumor de que se había casado y digo rumor ya que nunca llevaba el anillo de bodas en su dedo y nunca hablaba de alguna esposa o de que estuviera enamorado. De hecho, cenamos juntos con otros escritores la semana pasada y surgió el tema de las esposas y él aseguró que los rumores son falsos y que él aún no ha contraído nupcias con alguien.

Salgo de mi ensoñación al ser zarandeada lentamente, y ahora lo tenía de cerca sonriéndome.

—Kai. —. Mi pulsó tembló ante la mención de su nombre.

—Querida Luna, no pensé encontrarte tan tarde por estos lados. —. Él hace la silla a un lado para ocuparla y acompañarme.

—Terminé mi clase temprano y pasé a leer algo acá, dicen que es una de las mejores bibliotecas de la ciudad y quise comprobarlo por mi misma. Sabes cómo soy.

Y puedo jurar que en sus ojos visualice un brillo inusual, algo que casi en él es imposible ver.

—Lo sé, te conozco lo suficiente como para saber que ninguna biblioteca mediocre llena aquella hambre lectora que cargas por dentro.

—¿Y Owen? ¿Han hablado para la colaboración?

Kai desde hace meses anda planeando en compañía de otro escritor reconocido del medio para llevar a cabo una de las colaboraciones literarias más esperadas del año. Owen se especializa en el suspenso y terror mientras que Kai es más romántico, sería un deleite visual.

—Hemos organizado una cena para hoy en un restaurante alejado de la ciudad donde no hayan fans que nos atormenten. ¿Te apetece unirte a nosotros?

La emoción me invade y termino aceptando acompañarlo en su auto de gama alta y de color oscuro. Kai durante el camino fue amable y lindo conmigo, se ofreció en ayudarme con la sintaxis en caso que no la comprenda lo cual me parece bien. Dado unos segundos después llegamos y entramos atrayendo poca atención, más adelante en una zona más privada nos esperaba Owen.

—Luna… no creí que nos acompañarías. —. Me abraza cortésmente el hombre afroamericano de rasgados ojos esmeraldas.

—La encontré sola en una biblioteca de la ciudad y no quise abandonarla, espero no te incomode. —. Respondió, Kai, ayudándome a sentar en la silla.

—En lo mínimo, Kai. Más bien, me parece estupendo que Luna nos haga compañía, nos vendría bien ideas frescas de una chica que estudia historia del arte y literatura. —. Me sonrojo ante tal halago.

Desde la secundaria he tenido muy mala suerte en el amor, me han tildado de rata de biblioteca por tener una pasión grande por los libros, por las historias que ellos cuentan, por aquellos escritores que dedicaron parte de su vida a redactarlos. El amor que siento por la literatura no la comprende nadie que no lo haya experimentado antes, y es por ello mi buena relación con Owen Hill y Kai Masen.

—¿Y que tal la universidad, guapa? —. Owen tomaba un vaso de whisky con cubos de hielo pequeños, Kai una copa de vino y yo, bueno yo me conformaba con un té helado.

—Todo bien, en unos meses tendré mi título.

—Y probablemente seamos partícipes. —. Observo con curiosidad a Kai, quien sonríe confidente.

—Tengo el honor de ser quien te dé tu título, Luna. —. Su preciosa mirada parecía estudiar mi expresión, o quizás era imaginación mía…

—Trataré lo posible de verme presentable ese día entonces. —. Comenté burlona, Owen quiso objetar pero Kai lo silenció.— ¿Qué? —. Inquiero, confundida.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.