Al analizar (Apo 1:20) notamos que el Señor también hace mención de "ángeles", palabra que viene del griego (ángelos), que quiere decir mensajeros y al hebreo seria (mal'ach), que tiene el mismo significado, los cuales son representados con estrellas (Apo 1:20), al principio se creía que eran solo seres espirituales que custodiaban o protegían a cada congregación porque se les atribuía la cualidad de ser luminosos ya que en el mensaje se les denomina como "estrellas" lo que podemos observar en distintas pinturas o esculturas en distintos templos, pero la palabra ángel no solo se usa para representar a los seres celestiales que están al servicio de Dios, sino, también para los mensajeros humanos, o sea, aquellos que portan y proclaman la palabra de Dios, un claro ejemplo que vemos en Juan el Bautista quien preparaba el camino para el cordero de Dios, llamando al arrepentimiento al pueblo. Elías quien en los tiempos del reinado de Acab, llevaba la palabra de Dios al mismo rey desafiando todo tipo de peligro que le acechaba, también no encontramos con el ángel Gabriel quien fue el mensajero que Dios utilizo para revelar su palabra a Daniel (Daniel 8:16), el sacerdote Zacarías (Lucas 1:11) y por ultimo a María (Lucas 1:26), lo que nos permite comprender aún más la función de los mensajeros de parte de Dios, ya que tanto los mensajeros humanos como los celestiales, transmiten la voluntad de Dios a través de su palabra con el fin de instruir, advertir, anunciar y preparar a aquellos a los cuales les envía el mensaje.
Aunque Dios envía mensajeros celestiales y humanos, notamos que estos últimos eran más constantes en el antiguo y nuevo pacto que los angelicales por un sencillo motivo que Jesús nos explicó;
Si os he dicho cosas terrenales, y no creéis, ¿cómo creeréis si os dijere las celestiales?
Juan 3:12 (BLS)
Los mensajeros eran representados por los profetas en la antigüedad y por los apóstoles en el nuevo pacto, con objetivos claros: hacerle ver al pueblo sus faltas, mandar juicios o reprender a reyes y a príncipes conforme a la palabra dada por Dios, llamar al arrepentimiento; y notamos que estos objetivos son los mismo que tiene un pastor en la congregación actualmente, lo que nos permite tener 2 conclusiones: el mensaje va dirigido al ángel que custodia cada congregación o al encargado de pastorear a la congregación, en lo personal me inclino por la segunda conclusión no solo por las funciones que desempeña, sino por la responsabilidad que conllevan dichas funciones.
Obedezcan a sus líderes, porque ellos cuidan de ustedes sin descanso, y saben que son responsables ante Dios de lo que a ustedes les pase. Traten de no causar problemas, para que el trabajo que ellos hacen sea agradable y ustedes puedan servirles de ayuda.
Hebreos 13:17 (BLS)
Y por ello el Señor se estaría dirigiendo a los pastores de cada iglesia los cuales son los encargados de llevar su palabra al pueblo para prepararlo en aquel día en que nuestro Señor regrese, de la misma forma en que los profetas y los apóstoles reprendían al pueblo y los llamaban al arrepentimiento.
Si nos enfocamos en el ámbito histórico, la situación para la iglesia en esa época no eran para nada fácil y no lo seria por un buen tiempo o sea que la palabra era una reprensión para alguno y alivio para otros. Pero en el mensaje hay un detalle que debemos resaltar, y es que el Señor hace mención de que los ángeles (estrellas), están a su diestra, esto quiere decir que él está con ellos en todo momento para respaldarlos y colocar en sus labios la palabra que viene directamente de Dios por medio de la Biblia, es por ello que el Señor manda estos mensajes a sus siervos para que ellos sean los portadores de los mismos y hacerle entender a iglesia lo que Dios demanda de ella.