Los misterios del Tzolkin

VII

—Si, creo que las cosas comienzan a ponerse feo cuando pierdo el torneo—dijo Silvia—, creo que debo ganar el torneo, pero aún así quiero un plan B. Hay algo en común en muchos cuadros, existe una marca que tiene el monstruo y se repite varias veces. Tal vez si encontramos de quién es esa marca y podremos prepararnos para que no les pase nada. 

—¿Pasar qué? —preguntó Erick.

—En el cómic, a ustedes los atrapan —dijo Silvia.

—¿Cómo es eso posible? —preguntó Erick.

—Aún no lo sé —dijo Silvia—, los cuadros siguen en blanco. No creo que se coloreen hasta que sea muy tarde.

—¿Por qué piensas eso? —preguntó Erick.

—Me dijo algo Abi, que el mapa de donde estábamos apareció justo cuando cerró la Cueva del Juego. Fueron las penúltima páginas.

Neo observaba con mucho cuidado los cuadros donde se encontraba Silvia caminando sola en lo que parecían las ruinas de la escuela.

—¿Estás segura de ganar? —preguntó Erick.

Silvia los observó por algunos momentos. 

—Si, si creo poder ganar el torneo —dijo Silvia. 

—¿Cuál es el plan B exactamente? —preguntó Neo.

—Deberán estar en todo momento en algún lugar donde los vean, incluso si fueran monstruos, si alguien los ve tendremos oportunidad de correr—dijo Silvia.

—¿En qué podemos ayudar? —preguntó Erick.

—Después de clases necesito entrenar más —dijo Silvia—, si logro mejorar lo suficiente.

—Pero solo faltan un par de días—dijo Erick.

—No, faltaba un mes. justo aquí muestra las fases de la luna, si existe esa unión entre el cómic y el mundo real. Lo más posible es que sea el siguiente mes.

—Me parece perfecto—dijo Neo—, después de tu entrenamiento seguiremos entrenando en el parque.  

Después de clases entrenaban en el parque, siempre cuidadoso de encontrar algo extraño. Los días pasaron y Silvia mantenía su cercanía más con sus amigos. Lindo con uno que otro conflicto y los cuadros en los cómics comenzaban a cambiar. Los cuadros donde antes estaba sola ahora están con amigos.

El día del torneo Silvia se encontraba nerviosa, llegó mucho antes que todos, los adornos del gimnasio de la escuela apenas se estaban acomodando, las alumnas comenzaron a calentar cuando la profesora llegó. Logró entender la complejidad de todo lo que iba a pasar, porque la tranquilidad era muy diferente, cuando se acercaba a una pared o incluso había un silencio, tenía el presentimiento que algo aún más grande estaba por comenzar. 

Uno a uno fueron cayendo en las eliminatorias, todo concluyó en un mano a mano contra Norma, su pelea era la más esperada de todo el torneo, se saludaron cuando llegaron en medio, los golpes de Silvia eran prácticos, sencillos y muy precisos. En cuanto Norma respondió, Silvia llegó a pensar que perdería, una patada marcó la diferencia entre las dos chicas. «Voy a perder» pensó Silvia mientras retrocedía, observó a Norma, continuó su batalla sin titubear, hasta que Norma falló en un movimiento que le costaría el torneo. 

Silvia ganó por una diferencia mínima. Le dieron una banda que simboliza su estado como capitana, ella por su lado se acercó a la entrenadora para decirle algo al oído, busco entre el público a sus amigos y mientras lo hacía se acercó a Norma para felicitarla por su esfuerzo. 

 



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En el texto hay: mayas, mayas y aztecas, criaturasmagicas

Editado: 29.09.2023

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