Los Montruos

Leyenda de Amor

Hace mucho tiempo, en una época donde los humanos peleaban contra unas hermosas y peligrosas criaturas mágicas. En medio de una sangrienta guerra ya olvidada con el tiempo. Una historia de amor nació.

Ella lo había conocido a los siete años, cuando viajaba por su jardín, era un joven mucho más alto que ella, e increíblemente hermoso. Al principio ella se asustó, tanto que tropezó y cayó de espaldas sintiéndose incapaz de desviar la mirada de ese hermoso ser, y creyendo que sus ojos se equivocaban, aquel ser mágico solo se avergonzó y con cierto nerviosismo, se acercó a ella, siento lo más cauteloso posible, y arranco una flor del jardín, una flor salvaje y pequeña, de color violeta, y se la dio.

—Lo siento, no quise asustarte —fueron las palabras que desencadenaron una larga conversación, que duró toda la tarde y se repitió por muchos años.

Aunque siendo jóvenes, aún no lo habían notado. Cuando crecieron se dieron cuenta de que ya no podían verse con la facilidad del pasado, poco a poco la tensión entre la especie humana y la especie mágica, iba en aumento, y con cada escalón que subían, los amantes eran los que tenían que pagar. Cuando la joven cumplió quince, se desató la guerra, una sanguinaria guerra, cuyos motivos se habían olvidado y todo el campo había sido borrado con el tiempo. Ella no pudo volver a verlo, pero no contaba con la magia que aquel muchacho poseía. Al principio fueron cartas, luego pequeñas notas que solo ella podía leer, después empezaron a ser pequeñas caricias en su mente, suaves y delicadas que la ayudan a dormir, luego de un día horrible. Pero la magia tenía un precio, el tiempo que ellos compartieron también tuvo un precio.

El padre del joven era un general, un "gran general", que lidiaba con la forma creativa de los humanos para llevar a cabo la guerra, y al enterarse de que su hijo hablaba y se distraía con una de esa raza, su ira lo cegó. Arrastró a su hijo con amenazas de muerte, a los campos de entrenamiento, y logró controlar cada uno de sus movimientos durante mucho tiempo. Hasta que él se graduó, y lo sucedió como gran general, siendo el más joven en conseguir semejante honor.

Ella por otra parte, poseía un extraño aroma, que muchos podrían percibir. Al estar conviviendo durante tanto tiempo con una criatura mágica, un poco de su esencia había sido mezclada con la de ella. Al principio pasaba desapercibido, pero con la guerra en auge, y toda la paranoia, incluso los mínimos detalles eran notados por aquellos con lengua de víbora y malas intenciones. Presionada por la sociedad, ella decidió empezar a entrenar, y más, después de que el último contacto de su amado fue un simple pensamiento que él le había transmitido: "Estoy en la guerra".

Mientras él buscaba la forma de mantener esa máscara de crueldad e indiferencia con cada vida humana arrebatada, ella lograba formar poco a poco su propia máscara, una de odio y rencor. Fue lo suficientemente buena, como para lograr saltarse algunos peldaños en su entrenamiento, consiguiendo así, un rango de general.

Con las ansias de verse en aumento, y la responsabilidad pesando en sus espaldas, los dos decidieron actuar en nombre del parley, y conseguir una reunión íntima. Justo una noche antes del gran ataque, que ambos sabían que iba a pasar. Al principio, muchos se opusieron a dicho parley, de los dos bandos, pero la garantía de "conseguir información del enemigo" fue lo que los llevó a aceptarlo, muy a regañadientes. Los amantes se encontraron en una pequeña y vieja cabaña, que se ubicaba en un sendero neutro de la frontera.

Aunque ambos habían madurado, habían visto los desastres de la guerra. Cuando se encontraron, sintieron que sus máscaras eran vilmente arrancadas sin ningún tipo de consideración, ella corrió a sus brazos con los ojos brillantes de emoción, y él cayó de rodillas sin poder creer que la humana que estaba frente a él, era la misma que había amado por tanto tiempo, se negaba a pensar en eso.

Esa noche, solo por un segundo, no hablaron de la guerra, no pensaron en nada más que ellos dos. Y frente a una chimenea, ellos se sentaron en el piso y se abrazaron, disfrutando del silencio en el ambiente.

—A veces, quisiera abandonar todo y escapar, escapar para poder ver el mundo —murmuró él, sin despegar los ojos del fuego.

—Entonces escapemos los dos y veamos juntos el mundo —dijo ella, con una linda sonrisa, mientras ambas miradas se encontraban.

—No me interesa nada en este mundo, si tú no estas en él —aclaró el en un tono serio, mientras ella acariciaba la pequeña cicatriz en la esquina de su ceja izquierda—. Por eso mismo, deseo con todo mi espíritu, que digas que sí —le murmuró, mientras mostraba aquel anillo simple de un color coral suave—. ¿Me concederías el honor de ser mi esposa? —y como si hubiera contenido el aliento, ella solo salta gritando un fuerte sí.

Para ellos, esos momentos fueron los más grandiosos, e inocentemente creyeron que en un futuro, ambos podrían estar juntos. Pero el destino era un desgraciado que le gustaba torcer sus palabras, y de paso, torcer todo el mundo.

Al día siguiente, ella se había levantado con un fuerte escalofrío. Y ni bien se puso de pie, un grupo armado de humanos, los atacó, entrando por la fuerza a la cabaña, golpeando insaciablemente al joven mágico, mientras que ella les gritaba que se detuvieran. Cuando lograron noquearlo, lo llevaron a rastras, y ella exige saber por qué alguien mandaría a realizar tales actos.

—Tenemos sospechas de que él se escapó anoche, y mató a quinientos de los nuestros —fue todo lo que dijo aquella oficial, con la ira y la venganza brillando en sus ojos marrones.

—¡Solo tienen una maldita sospecha! —gritó enojada ella, mientras aquella guardia solo la analizaba con la mirada fría.

—Tú también nos has traicionado —dijo lo suficientemente alto, como para que el grupo, que estaba esperando afuera, entrará y la neutralizará, lo suficiente como para dejarla totalmente inconsciente.



#2386 en Fantasía
#445 en Magia

En el texto hay: reyes, magia, boylove

Editado: 11.05.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.