Los Montruos

Capítulo 3

El palacio del oeste, era el primer palacio. Utilizado por mi padre desde mucho antes de mi existencia, pero actualmente se ha convertido en un salón de fiestas. A pesar de su aspecto gótico, y los afilados picos, contaba con cuatro torres principales, seis túneles secretos y un sin fin de escaleras, salas de reuniones y habitaciones, hasta las cortinas, ventanas y balcones son infinitos. Todo a raíz de que fue construido sobre una fuente de energía mágica pura, y eso afectó a la construcción total, volviéndola un laberinto cambiante. Para poder controlar los constantes e impredecibles cambios, mi padre corrompió aquella magia pura con su sangre, y terminó por posponer los cambios cada dos semanas.

Además de eso, para evitar confundirnos con las salas, existían los sellos creados por los Silion, un grupo pequeño de seres mágicos que crean conexiones inexistentes entre objetos, lugares, esencias e incluso podían conectar a los muertos con los vivos.

Los Silion, eran unos seres de ojos negros, y piel verde, con afiladas uñas para tejer los hilos invisibles, que solo sus peculiares ojos podían ver. Ellos son de carácter travieso, y suelen utilizar sus conexiones para hacer bromas crueles a la gente. La leyenda dice, que son así porque fueron una aldea maldecida por una bruja, en los inicios de los tiempos, y ella los maldijo debido al carácter despreocupado con que insultaba a los extranjeros, y origino a los Silion como monstruos de conexión, incapaz de producir una relación, y el único vínculo que tienen con la sociedad es su necesidad de hacer bromas.

Mi padre los encontró, y los secuestro, luego los torturó para hacerlos terminar trabajando para el castillo. Porque nadie le dice que no, al rey de las sombras.

Me recosté en mi cama. Intentando ignorar todos los ruidos del castillo. Cerré mis ojos, intentando alejar el pensamiento de todos, queriendo invocar a cualquier ser mágico que me hiciera dormir. Por un momento, todo estaba sumido en el silencio más profundo característico de mi habitación, ningún ruido podía salir de ella y con esto en mente intenté descansar. Pero estaba tenso, sin ninguna razón, el miedo había desaparecido junto con el final de la fiesta. Aún me sentía así, mi cuerpo no podía relajarse.

Y de pronto, como si fueran ecos en mi mente, aunque entendía bien las palabras, sentía que me estaban retando, como si hubiera cometido un error. Escuchaba varias voces, y de pronto sentí un fuerte estallido en mi interior, y como si fuera un caminante en las sombras, pude ver frente a mí un punto, como si moviera una cortina delgada, movía mis manos para acercarme; estaba una mesa de madera y un montón de seres, que no conocía, estaban mirándome. —¡No quiero matar a nadie!

Y ese grito sentí que provenía de mí, de mi boca. Entonces me levanté rápido, y me senté asustado en mi cama, me tapé el torso con mis sábanas y me toqué el rostro. Eso fue demasiado, pero el eco de aquella voz, se repetirá en mi cabeza. Hasta que una profunda tristeza me embargó, y las lágrimas corrieron por mi rostro, me sentía mal, como si un fuerte peso me golpeara en el pecho, y me cortara la respiración, provocándome hipo. Quería dejar de llorar, pero no podía, las lágrimas caían y no paraban. Como si la idea apareciera en mi mente, volví a cerrar los ojos concentrándome en ese lugar oscuro, y cuando los volví a abrir. Estaba en ese sitio, pero ahora había una fuerte niebla, todo esto me resultaba extraño, pero el sitio estaba repleto de tristeza, y las lágrimas que pasaban por mi rostro, se mezclaban con la niebla, cuando llegaban a mi barbilla.

Tranquilamente, empecé a hablar, con una extraña seguridad, mi cuerpo dejó de temblar, y mi voz se volvía cada vez más suave, y mis palabras eran más dulces, cada vez más tranquilas, y poco a poco se convertía en un arrullo. Con el pasar del tiempo, la niebla empezó a desaparecer, y el sitio poco a poco, fue tiñéndose de un suave celeste azulado, que me tranquilizaba a mí también. Pero, de repente unos pasos se escucharon a lo lejos, y cuando la niebla se fue, frente a mí estaba aquel que iba a matarme. Y cuando intenté abrir la boca, él me dijo "te conozco y no lo sé".



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En el texto hay: reyes, magia, boylove

Editado: 18.05.2024

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