La energía más poderosa

El vestíbulo principal estaba lleno de personas de todas las dimensiones, y algunos seres de los deis.

Ikal charló con todos ellos, y les explicó las razones por las cuáles había decidido rendirse. Lo había pensado desde hacía días, pero no se atrevía a proponerlo, en los aparatos de Darel, él encontró un mundo en la galaxia de Andrómeda a donde podrían escapar a través de los túneles, pero eso significaría deja a la humanidad a su suerte en esa destrucción inminente.

―De mis hijos, me llevaré sólo al que mostró cordura. El resto… están donde merecen estar.

―Es exactamente esa razón por la que escapé ―dijo Neruana―. No entiendo cómo aguantaste tanto, amigo. Yo hui llevándome el sello de la verdad para encontrar un mundo nuevo al que pudiéramos irnos. Después del asesinato de Soledad, determiné que el ser humano no merecía ser salvado.

―Pero al final, regresaste, hijo ―dijo Atish―, dispuesto a seguir ayudando.

―Pero la muerte de Rita e Isaac me debilitó de nuevo ―Neruana bufó―. De la gente de San Basilio, eran los que menos merecían morir así.

―Todos nosotros siempre hablamos de que tus padres eran una muestra de amor que se ve pocas veces en la vida. ―Agastya enjugó una lágrima―, y de esos pocos que conocí, todos fueron asesinados en juventud. Es como si algo detestara ver amor entre los seres humanos.

Fue como una revelación para Pema. Mientras los adultos continuaban hablando, Pema habló con el resto de los niños.

―El amor ―le susurró―. El amor es lo que más se ataca porque, en efecto, es una energía que puede aniquilarlos. ¿Recuerdan las últimas palabras de Darel?

―Dijo algo de una luz, y que era de lo que más renegaba… ―Meditó Juliano.

―La luz al final del túnel ―dijo Irina―. Nosotros siempre hablamos de lo absurdo que era pensar que los humanos tan llenos de errores y maldad pudieran sentir esa luz de amor de la que tanto hablan las personas con experiencias cercanas a la muerte.

―Quiere decir que Darel pudo sentir esa luz de amor justo antes de morir ―Juliano abrió sus ojos como si al fin pudiera ver algo que se le negaba― ¡Tenemos la respuesta!

―¿De qué hablas? ―preguntó Neruana al escucharlo gritar.

―El amor ―dijo Pema―. Ustedes siempre hablan del mal como un ser pensante. Agastya, tú me explicaste que en cierto modo lo es. Si es así, obvio va a tratar de atacar lo que más lo pone en peligro, y Citlalli y Shouta dicen que en la película de Harry Potter la mencionan como las más poderosa de las energías.

―Esas sombras que vemos en San Basilio tienen el aura de la gente que dejó maldad en este mundo ―comentó Pema―. Si todas esas personas representaban al mal, entonces esas criaturas son su aura. Y lo que más puede amenazarlos es la energía que emana el amor verdadero, el amor debe estar en la gente buena, por eso son capaces de sentirlo al momento de su muerte.

―En su lecho de muerte, Darel le dijo a Irina que aquello de lo que más renegaban, era real ―Juliano habló―. De lo que más renegaban Darel e Irina, era de las historias de amor.

―El amor es la primera energía que debemos buscar ―dijo Pema―, pues de ella derivarán todas las demás.

―No dudo que el amor sea lo más poderoso ―dijo Kayah―, pero la realidad es que aún no sabemos como obtenerla para construir el utzikab. Y, si se han dado cuenta, ya no tenemos tiempo. Una guerra intergaláctica se avecina y tal vez no tengamos el poder suficiente como para vencer a los enemigos que se acumulan cada vez más en ese…

―Podemos detener el tiempo ―interrumpió uno de los naguales de la dimensión de Innon―. Podemos lanzar un hechizo que detendría el flujo del tiempo en todo el mundo, a excepción de los que estemos en la habitación donde sea conjurado.

―Sólo podemos detenerlo por un máximo de diez días ―dijo otra nagual―. ¿Creen que sea suficiente para intentarlo?

―Quizá ―Ikal meditaba con una ligera sonrisa.

―¿En serio, Ikal? ―refunfuñó Neruana―. Hace unos minutos pensabas que el ser humano no merecía otra oportunidad.

―¿Qué quieres? He sido necio en creer en la salvación del hombre ¿Por qué no esperar unos días más? Lo intentaremos. Si en cinco días lo vemos imposible, usaremos los siguientes cinco para buscar abrir portales a ese otro planeta para iniciar el éxodo.

Iniciaron en ese mismo instante. Los extraterrestres de Wknall ayudaron conectando todos los mundos, para que así el tiempo se detuviera en la galaxia entera. Nmgl, un wknalliano que conocieron en Suiza, viajó a la tierra para ayudarles con su propia tecnología.

Los naguales lanzaron el hechizo y todo se detuvo afuera del castillo e Ikal juntó de inmediato todas las pistas que había recolectado del utzikab.

―¿Lo que está en el libro de Thot es sólo el resumen de lo que encontraste? ―dijo Auset.

―Sí, toda la esencia está ahí. Pero no quiero perder detalle alguno. Lo que queremos atacar debe contrarrestarse con la energía contraria.

―Ya lo intentaste tratando de absorber la bondad de la gente ―dijo Agastya―, si la conclusión de los niños es cierta, seguro esos seres que guardan la maldad humana te lo han impedido.

―Sí, pero ahora ellos están congelados en el tiempo. Ahora podemos intentarlo de nuevo usando la energía positiva de quienes hacen las cosas por amor ―intervino Pema.

―Entonces las personas que elijan para absorber esa energía, deben ser aquellos quienes hacen el bien sin esperar nada a cambio ―dijo una chica de la galaxia de Andrómeda―. Aquí las personas que más capacidad tienen para derrotar a un zuthu, son aquellas que no temen entregar su corazón al prójimo.

―Primero que nada debemos asegurarnos de que ninguna de esas criaturas se quedó en el castillo, y… ―Aidan frunció los labios―, atraer amor... ―volteó a ver a Shouta y Citlalli.

―No creo ―dijo Citlalli―. Nosotros sentimos amor mutuo por ser almas gemelas, pero es algo más poderoso, necesitamos a alguien capaz de sentir amor por la humanidad entera.