-tenemos que darnos prisa o si no llegaremos tarde- dijo stef, alexter no dijo nada, estaba serio ¿Qué le pasara? Yo apresure a comer.
Nos levantamos, me termine de acomodar y salimos muy deprisa con el chofer que ya nos esperaba en la entrada de la mansión.
-cuiden a su hermana y no se metan en problemas- nos despidió nuestro padre. Nos fuimos en dirección al colegio.
***
A la primera hora no tuvimos clase, mis hermanos fueron a entrenar y yo entre a una clase de repostería con Mayra. La clase de hoy nos tocaba decorar con diferentes mangas específicas y medidas. Mi pastel ya estaba listo, y mi decorado lo iba hacer en forma de luna y estrella, no sé porque me gustaba tanto, pero procedí a empezar a decorar. Era de una capa, quise utilizar masa flexible para hacer una luna junto a ella la estrella a su lado y quedara fija en su centro, agarre la manga y el merengue lo mezcle con un colorante azul marino, su tono lo hacía ver de noche y comencé con el trabajo de la manga.
-Waaao!! Ara, te está quedando precioso- dijo una Mayra muy asombrada por mi trabajo. Me sentía orgullosa.
-gracias ami- dije aun con la manga en la mano y decorando -¿sabes quién se comerá este pastel verdad?- la mire con una ceja levantada.
-nosotras- ambas reímos- lo bueno de hacer los dulces en la repostería es que luego te lo podías comer.
Me quede mirando el pastel una vez que termine, observando cada detalle.
-Falta algo- puse mi mano en la barbilla –ya sé que falta- Mayra me miro extrañada.
Busque masa flexible de color gris, y empecé a moldear una loba, lo hice siberiano y perfeccione cada detalle de mi lobita siberiana.
-listo- Mayra me seguía observando
-Espectacular tu pastel- dijo mi amiga, mi lobita flexible la había colocado a un lado de la luna junto con la estrella, pero lo hice en forma de que aullara a la luna y a la estrella, como la imagen en mi baño.