Cap. 91 "Sobrepasando limites."

(Marina)

Así llego el mes de marzo y con él los exámenes mensuales en la universidad, por lo que tuve que estudiar o eso se supone ya que no lo necesitaba; este tetramestre es de los más cortos dado la cantidad de días festivos y las vacaciones de semana santa que se atraviesan.

Los días siguieron avanzando con la misma normalidad, sabía que si no había vuelto a ver al misógino de Carlos Francisco Manfred Villeford y de Gueins, fue porque no le habían permitido acercarse a mí, lo cual agradecía, como no quería que estuviera preocupado y como yo quería pasar más tiempo con él le pedí a Alejandro que pasara las noches conmigo, por lo que hizo lo más normal del mundo; llevar ropa suya a mi departamento.

Los fines de semana lo seguíamos pasando en la hacienda, y tras hablar con mi madre ella comprendió.

-madre sé que puede parecerles algo que no es, pero casi no tengo tiempo para Alejandro, por lo que paso las noches a su lado.

-me estas queriendo decir que están teniendo relaciones íntimas Marina, antes de casarse? No es que lo critique, pero creí que podrían esperar hasta después del reto.

-madre, dormimos juntos, pero no hemos intimado, el de esta manera sabe que estoy bien, dada mis estado de salud, y pasamos tiempo juntos, aunque sea solo dormidos. Y la verdad es que dormir entre sus brazos, me tranquiliza a mí, y me relaja. No sé si lo entiendes.

-te entiendo hija, estas enamorada y quieres lo que todas las chicas, estar con tu pareja, pero tú no eres como las demás chicas, eres una princesa drakoniana, con muchas obligaciones hasta el reto y dependiendo de los resultados de este tendrás libertad o más obligaciones. Comprendo que desees tener una relación normal con tu novio; pero solo te pido que si comienzan a intimar se cuiden; y confió en ti como una chica responsable y en el que es un buen hombre.

-gracias madre, puedes estar seguro de que seremos responsables, y aun cuando desearía tener una vida y un noviazgo normal, hasta intimar con Alex, no lo haremos hasta después del reto; solo no te sorprendas después si nos vez un poco más cariñosos que hasta ahora.

-hija sabes bien que las muestras de cariño en público incomodan a algunas personas, pero me doy por enterada, y ten por seguro que yo hablare con tu padre si te dijera algo.

-gracias madre, eres muy buena y comprensiva.

-anda zalamera, ya conseguiste lo que deseas verdad y ahora que harás?

-bueno madre, por el momento lo de siempre pero esta noche dormiré tranquilamente en los brazos de Alejandro, mientras escucho el fuerte latido de su corazón.

-valla con la niña, así que ya están intimando tú y tu novio, y no pensaste que él lo que yo podría decir?

-papá, no estoy intimando, él solo duerme a mi lado, eso nos da tranquilidad a ambos, el deja de estar preocupado por mi estado de salud, y por un imbécil que al parecer les está causando muchos problemas a mis guardianas, a Abá y a mi novio. No sé si les conto Abá pero antes de mi cumpleaños, llego un cliente y se comportó muy irrespetuoso, con una actitud machista, misógina, por lo que me negué a trabajar en la cuenta que nos ofreció; pero ha estado acosándome, primero fueron rosas y el 14 de febrero lleno de flores, mi oficina, y resulto que el mensaje de sus flores; no era una aclamación de mi belleza o de su amistad, sino una declaración de que soy suya y que nos casaremos cuando él lo quiera; como entenderás, esto molesto mucho a Alejandro, y a pesar de los esfuerzos de las chicas y de todos los demás me ataco en el gimnasio, me tomo por sorpresa y no pude reaccionar adecuadamente; por lo que Aytana termino golpeándolo, desde entonces tengo a algunos hombres del maestro Kurosawa por ahí afuera vigilando que no se me acerque, ellos tienen orden de incapacitarlo, por lo que usan un fuerte anestésico.

-no sabíamos nada hija, y yo no quería molestarte, se lo que es la juventud, pero por favor, esperen para hacerme abuelo al menos hasta que se resuelva lo del reto, y yo mismo te ayudo a preparar tu boda.

-pero papá, aún no hemos hablado de bodas, solo me gusta dormir entre sus brazos, con mi cabeza, apoyada sobre su pecho. Pero te prometo que tendremos cuidado y no te convertiremos en abuelo antes del reto, eso seguro.

-preferiría que fuera hasta que habláramos de una boda pero en fin, ya hablare yo con tu novio más tarde.

-papá no le vallas a decir nada, por favor.