Los secretos de Marina

CAPITULO 27 “Secretos”

 

(Alejandro)

 

            No dejo de pensar en Marina, sé que la veo todos los días, en las mañanas en la universidad y en las tardes en el gimnasio y el dojo, cada vez la veo más agotada, sé que lo está pero no dirá nada, pues tiene el compromiso del torneo internacional; mas no se creó que en realidad lo que hace es entrenar para lo que escuche llamaban el legado.

 

            Aun no entiendo que es el legado, pero sé que intuyo que es importante, pues su familia está al pendiente de eso, y ahora esta Aytana. Escuche que la llamaban coronel, no creo que sea mucho mayor que yo para tener un rango tan alto en el ejército, y conociendo el de México sé que no pertenece a las fuerzas armadas de este país; entonces de donde, Va no importa, no solo es la entrenadora de Marina, sino también su guardaespaldas.

 

            Para que necesites un guardaespaldas una joven como Marina, ni que fuera de la realeza, y aun siéndolo no asignarían a un coronel para cuidarla, solamente, asignarían a más miembros de elite. Sé que Marina me oculta algo, pero que es eso tan importante como para ocultarlo con tanto celo.

 

            Por otro lado esta ese auto nuevo, un mustang personalizado del año, eso sale caro, en que estará metida, y no me creo que sea solo trabajo de medio tiempo en las oficinas de su Tío Amílcar;  no sé qué hay algo más.

 

            Lo he tratado de investigar, y a la única conclusión que he llegado es que tiene muchos conocidos y muchos contactos en puestos clave, pero nunca se ha valido de su amistad para obtener algo, se le conoce como uno de los abogados penalistas más fuertes y mejores del país, lo que no entiendo es que tiene que ver con el GRUPO DRAKARIS, ahora resulta que su bufete está en el edificio de ese consorcio, pero no he logrado saber en qué metió a Marina.  Sé que no la involucraría en algo malo, pero no me gusta.

 

            Ayer pase por la que se supone su oficina en el bufete de Amílcar y no la pude ver, estaba ocupada en una junta con unos clientes en la sala de juntas, y más que por lo que alcance a ver estaban hablando de acciones e inversiones no de leyes.

 

            Marina que me estas ocultando, entiendo que tu familia tenga miedo que se sepa sobre tu extraña habilidad, pero no creo que pase nada, si el mundo se entera, digo no serás perseguida como si  fueras extraterrestre, eso son solo teorías de conspiración y malas películas de Hollywood, me gustaría poder entrar en tu cabeza y saber tus secretos, eso me hará comprenderte mejor.

            No sé qué me has dado, no dejo de pensar en ti, si es cierto que me gustas, y me intrigas, pero aún no se si podría tener algo más profundo contigo, eres muy joven, son 13 años de diferencia entre los dos, hoy podrías quererme pero que pasara en unos años, cuando conozcas un poco más del mundo.

 

            No me  animo a pedirte que seas mi novia, aunque la verdad no creo que pueda soportar verte con otro o tan solo estar lejos de ti.

 

            Que hacer, que debo hacer, tengo toda la semana pensando en esto, y aun no sé qué hacer; pero el caso es que tu familia sabe que me gustas y no quiero que crean que me estoy aprovechando de una niña, que estoy jugando con tus sentimientos.

 

            Tengo que tomar una decisión pero aún no sé qué  hacer,  alejarme de ti, no podría, si ni siquiera puedo sacarte de mi cabeza, y debo concentrarme si es que quiero seguir adelante, un tengo que hacer algunos trámites y presentar el examen de oposición para poder conseguir el trabajo de Juez, tengo que estudiar muy bien la ley y los nuevos procedimientos, los nuevos acuerdos internacionales y las resoluciones de la corte interamericana, pero cada vez que lo intento, tu rostro se aparece en mi mente. Diablos que tengo que hacer; podría llamarte a tu celular, sé que contestarías pero ese no es el caso, solo conseguiría tenerte más  en mi mente.

 

            Qué debo hacer,  no puedo estudiar ni dejar de pensar en ti, solo me queda un camino y ese será el que tomare; llamare a Omar

 

-bueno, Alejandro que es lo que te pasa?

-nada primo, solo quería preguntarte si iras mañana a la hacienda?

-Hay Alejandro, sabes que si, en eso quedamos el día de ayer, es que lo olvidaste.

-Omar tengo muchas cosas en la cabeza y si lo olvide.

-yo diría que solo tienes a una persona en la cabeza, y se quién es.

-sí, tienes  razón y es por eso por lo que yo te llamo.

-si? Y en que te puedo ayudar.

-sabes que me gusta, pero aún no se si deba hablarle, ella es muy joven

-a ella la edad no le importa, tú le gustas, sino no se habría descuidado la semana pasada en la hacienda frente a todos, es que no te das cuenta?




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