Día de los celos

- Violeta -

Todos corremos detrás de él intentando detenerlo, pero nos es imposible. Cuando por fin logramos alcanzarlo Miguel ya ha abierto la puerta, encontrando a Jared tirado en la cama de Brisa tratando de desenredarse de las sabanas. ¿Cómo carajos terminó ahí? Su camisa está arrugada a medio desabrochar, tiene el cabello totalmente despeinado y creo que le falta un zapato. Eso sin contar con una marca muy visible en el costado de su cuello, marca que yo le hice a penas unas horas antes en el ascensor. Esta definitivamente no es la mejor escena en la que pudimos haberlo encontrado y la mirada de asesino serial que tiene mi hermano me lo confirma. 

Tomo a Miguel del brazo para tratar de sacarlo, él parece reaccionar, pero para mal. Pues de inmediato se le va encima a Jared estampandolo con fuerza en el colchón mientras intenta ahorcarlo zarandeando su cuello con las manos.

- ¡¡CÓMO TE ATREVISTE A METERTE CON BRISA MALDITO DEGENERADO!! - le grita fuera de sí

Sin pensarlo, todos corremos a tratar de calmarlo para que no lo mate. Es en estos momentos cuando me quejo de que papá lo haya entrenado en un club de boxeo.

- ¡¡Miguel, suéltalo por favor!! - le suplico tratando de separarlos

- ¡¡ES SOLO UNA NIÑA PERVERTIDO!! - claramente me esta ignorando

- No es... lo que... tú crees - habla Jared entre jadeos

- ¡Por dios Miguel vas a matarlo! - Erick busca hacerlo reaccionar

- ¡¡ESO ES LO MENOS QUE PUEDO HACER POR METERSE CON MI...!! -

Antes de que mi hermano pueda terminar su oración Brisa le salta a la espalda rodeando su cuello y cadera con sus extremidades. Puedo notar que le susurra algo al oído, pero no alcanzo a oír que es. Por suerte eso lo hace reaccionar, permitiendo que deje de asfixiar a Jared. Lentamente lo suelta y se levanta de la cama empezando a caminar por toda la habitación, a la vez que se jala el cabello con frustración.

- No puedo creer que estés haciendo esto Brisa - le reclama sin dejar de moverse - ¡Te lleva como 7 años, por dios! -

- En realidad son 10 años - corrige Tara

- ¡¡Eso es aún peor!! - exclama alterado

- Tara, no me ayudes - le susurra Jared

Miguel intenta acercarse de nuevo a Jared pero yo intervengo decidida a enfrentarlo.

- Ya basta Miguel, deja de hacerte ideas que no son, ellos no están saliendo - hablo con seguridad

- ¿Entonces se puede saber qué hace en su cuarto? - me mira expectante

Yo me debato entre decirle la verdad o no, realmente no quiero provocarle más problemas a mi amiga con mi hermano, pero tampoco quiero que él me deje viuda antes de casarme. Miro a Jared como pidiendo permiso de decirlo o no, él asiente en respuesta y sé que está dispuesto a enfrentar a mis hermanos por mi. Pero antes de que pueda hablar, Brisa se me adelanta.

- Ay querido esas son cosas que solo los amigos como nosotros podemos hacer, es algo así como placer sin compromiso - le explica sin darle importancia

Creo que ya lo empeoró.

- Ustedes tienen sexo por diversión - no es una pregunta, pero mi amiga aún así solo levanta los hombros

Miguel mira a Jared aún más sorprendido de lo que estaba cuando entró al cuarto. No dice nada al principio, pero cuando lo hace todas mis alarmas se encienden.

- Yo lo mato - apenas susurra para luego correr detrás de Jared

Ante el acto mi novio sale disparado por todo el departamento pasando por encima de la cama, siendo seguido por mi hermano y nosotros siguiéndolo a él.

- ¡Por favor Miguel cálmate, no cometas una locura! - trata de calmarlo Noah

- Hazle caso a tu hermano recuerda lo que le prometiste a tu padre - Jared habla desde el otro lado del sillón, mientras mi hermano trata de alcanzarlo - él te enseñó que sólo puedes golpear a alguien por deporte, seguridad o amor -

- ¡¿Tú cómo sabes eso?! - lo interroga Miguel

- Eso no importa, el caso es que esto no entra en ninguna de esas razones, a menos que... - se mantiene en silencio empezando a atar cabos - ... oh, vaya, eso explica mucho -

Veo a Jared sonreír sorprendido mientras que Brisa y Miguel se sonrojan con los ojos bien abiertos. Puedo jurar que oí como los engranes de todos empezaron a funcionar, permitiéndonos saber el porqué de su reacción. No es la edad, ni que Brisa se lo haya ocultado, es que Miguel sigue enamorado de ella y tiene miedo de que alguien más se la quite. Mi hermano está celoso.

- Jared tiene razón - Brisa llama la atención de todos - tú no tienes ningún motivo para enojarte, ni mucho menos para atacarlo. Entiende de una vez que soy una adulta que es libre de hacer lo que quiera con su vida y si yo quiero acostarme con él o con cualquier otro hombre es problema mio. Después de todo, si tú te puedes follar a todas las zorras que tienes por amigas ¿Por que yo no puedo hacer lo mismo? -

Puedo notar la rabia que sintió al mencionar a las "amiguitas" de mi hermano y sé que no es el único que está celoso.

- ¡¡POR QUE TÚ NO ERES COMO YO...!! - lo oigo susurrar otra cosa, pero no alcanzo a distinguir que es

- No lo soy, pero si me lo propongo puedo ser igual o peor - lo reta - y si no te agrada puedes largarte por donde viniste, al fin y al cabo aquí no eres bienvenido -

Auch, eso dolió.

Miguel la mira sorprendido, para después suspirar con pesadez y asentir repetidas veces.

- Esta bien, si eso es lo que quieres, me voy - acepta con demasiada tranquilidad para mi gusto - pero tú te vienes conmigo -

Aprovechando su sorpresa se acerca a ella cargándola sobre su hombro sin importarle sus gritos y pataleos. Nosotros los miramos salir sin poder creer lo que vemos y por extraño que parezca, ninguno intenta intervenir.

- Woow, eso no lo vi venir - comenta Tara después de unos minutos en silencio