El mundo empieza a fracturarse. Una figura celestial y oscura —Kharon, un dios desterrado y olvidado por el universo— aparece entre grietas dimensionales, sembrando caos.
Gobiernos caen, ciudades desaparecen, la esperanza muere. Cuando todo parece perdido, seis figuras emergen. Los más fuertes. Los últimos. Y en el centro de todos, Aetherion (Orien Voss) y Frostborn (Lyra Koval): dos titanes, pareja y soldados, que se aman con la misma intensidad con la que combaten.
“Si morimos, lo haremos juntos.” “No vamos a morir. No hoy.”