Capitulo 2

—No—le respondí con una sonrisa pícara. Lo mire de reojo y vi como una pequeña sonrisa quería salir.

Nos quedamos en silencio solo  escuchando las voces de los niños hablando  por otro rato más hasta que me pregunto qué camino tomaba para llegar a mi casa, le respondí y llegamos.

—adiós Sebastián muchas gracias por traerme. —le dije para bajarme

—adiós Emma y no hay de que—me respondió con una sonrisa tranquila, al bajar me llamo—disculpa que sea entrometido pero… ¿es tu hermana?—me pregunto mirando a Evelyn .Yo me sorprendo al principio pero después respondo con una sonrisa.

—Es mi hija—le respondo y me voy-mi hija ya que encontraba debajo del coche tomada de mi mano y un poco adormilada.

Al llegar a casa le serví e almuerzo a Evelyn, mientras que ella iba a su habitación a cambiarse y lavarse las manos.

— ¿Cómo te fue hoy amor?—le pregunto mientras llevo la cuchara a mi boca.

—Me fue muy buen mami  hicimos un dibujo de nuestro papis-me respondió con una sonrisa, pero que luego se formó en una triste.me siento mal, ella sabe que tiene un papi y aunque yo le digo siempre que está de viaje, se pone triste porque “su papa” nunca la llama y ni la visita.

—Después de que almuerces y hagas tus deberes vamos al parque vale—le respondo, sin saber cómo responder a esa pregunta, ella me sonrió contenta y asentó para después salir corriendo hacia su cuarto e irse a tomar una siesta.

*NARRA JACKON*

—Ana ¿ya llego Sebastián?—le pregunto a mi secretaria.

—no señor Smith él me dijo que debía ir a recoger a su hermano al colegio.

—Vale—le dije. Hace una semana estoy aquí por asuntos de nuestra  nueva empresa que estamos haciendo. Estaba por voltear de nuevo a mi oficina cuando vi a Sebastián venir hacia donde estaba yo. Sebastián es uno cuantos años menor que yo pero es muy bueno en su trabajo hay que admitirlo.

—listo, aunque llegue un poco tarde  la profesora estaba esperando con el—me comento llegando, ya se ve  un poco tranquilo, ya que cuando se fue estaba un poco alterado.

Nos dirigimos hacia la oficina para hablar de la reunión que teníamos para mañana en la noche, es algo así como una bienvenida pera los empleados de la empresa. Después de haber acordado algunos detalles sobre la gala le pregunte a Sebastián que con quien iba a ir ya que no he visto que ha invitado a alguien, nos es que me importe mucho, si no que pues…ustedes entienden ¿verdad? Y no es ser chismoso aclaro.

—mmmm....Yo voy a invitar a alguien…Qué bueno me gusta desde hace mucho, pero hay que ver si acepta venir conmigo—lo dice con encogiéndose de hombros pero se le ve una pisca de desilusión.

—Vale amigo no te desilusiones ni si quieras le has dicho hombre—le ánimo. El asiente con la cabeza y se para para dirigirse hacia la salida.

Yo me quedo solo en la gran oficina, me relajo en la silla y hecho mi cabeza hacia atrás pensando en una hermosa persona de ojos como la miel, hace cuatro años no la veo, todavía me acuerdo que le había dicho a Emma que iba a ir a una reunión de trabajo, en parte sí, pero en ese viaje yo iba por algo en específico, le iba a comprar un hermoso anillo de bodas, lo había pensado por varias días, después de recibir la llamada de Nathalie, ella era una buena mujer, muy bonita pero yo no la amaba lo suficiente, después de eso empezó a ser violenta. Pero no llegue a imaginarme que era capaz de drogarme y tomarme y unas jodidas fotos para después mandarlas a Emma ¿Qué Cómo me di cuenta? Cuando llegue me encontré a una nana muy cabreada diciéndome que yo porque le había hecho daño.