Love Sonets

Capítulo 27. Apoyo y consuelo.

Carol.

–¿Quieres dejar de mover tu pierna? Me estas poniendo nerviosa –le pedí entre dientes a Jhoath, que sonrió apenada.

–Lo siento, es que me pone ansiosa esperar.

–Como siempre, no tienes paciencia.

–No para todo –se justificó, y casi me hace reír.

Vine por Lauren al aeropuerto, y como Jhoath se autonombró mi sombra, aquí esta, además, quiere saludarla. Unos minutos más tarde, vi la cabellera caoba de mi tía, que, hacia señas con su mano, para que lo notará. Agité mi mano un par de veces, para darle a entender que la vi, mientras que se abría paso entre la gente.

––¡Mi niña! ¡Ya llegué! –exclamó, dejando su maleta y abrazándome.

Contrario a mí, Lauren es muy cariñosa y amorosa, cosa a la que me he acostumbrado, por lo que le correspondí el abrazo, sintiéndome segura y cómoda.

–Me alegra tenerte aquí –murmuré con sinceridad.

–Iría hasta el final del mundo por ti, cariño –respondió ella, mirándome con una sonrisa llena de ternura.

–Vaya, los años no han pasado en ti, Lauren, sigues igual que hace siete años –mencionó Jhoath, llamando su atención.

–Oh, por Dios. ¿Jho Jho? –preguntó Lauren con emoción, llamándola por su apodo.

–No sabía que extrañaba ese apodo, hasta que te escuché –expresó Jhoath, abrazando a Lauren.

–¡Mi pequeña Jho Jho! ¡Estás tan grande y hermosa!

–Te diría lo mismo, pero me golpearías –ese comentario la hizo reír, separándose para tomarla del mentón.

–No sabes cuantas veces pensé en ti, si eres feliz y sigues siendo una niña dulce. Lamento lo de Nicolás, era un hombre increíble.

–Gracias, yo también pensaba en ti, aunque no de un modo bonito, pensé que sufrías por ella –me señaló, haciendo un puchero con sus labios.

–Me disculpé, ¿no? –le recordé.

–Por supuesto, pero aún tengo derecho a quejarme.

–¿Podemos irnos? No es el lugar adecuado para hablar de esto –pedí, tomando la maleta de Lauren, para caminar a la salida.

–No le hagas caso, esta de mal humor –me justificó Jhoath.

–No te preocupes, Jho Jho, vine a mejorar ese humor –aseguró Lauren con una sonrisa.

Veremos si luego de contarle lo que pasó, sigue con esa idea, algo me dice, que va a enojarse un poco.

♣♣♣♣♣

–¡Un momento! –pidió Lauren, levantándose del sofá –¿Cómo que te golpeó? ¿Se atrevió siquiera a levantar su mano? No, no puedo dejar esto así, voy a darle una lección a esa basura –balbuceó, intentando caminar.

–Tranquila, Lauren, tranquila. No hay necesidad de eso ahora –la detuvo Jhoath, instándola a sentarse de nuevo –. Técnicamente, Allison no sabe que Carol fue Jessie, pero tal vez ahora se haga una idea.

–¿Qué? ¿Por qué?

–Porque sin querer, le dije algo que la dejo pensando –respondí, acariciando mi brazo.

–¿Y qué pasaría ahora? ¿Crees que va a decírselo a alguien?

–No tengo idea, pero podría manipularme con ello. No hice nada ilegal, sólo me cambié el nombre, y si, fingí mi muerte, pero era la única manera que encontré… –mascullé, sintiendo las lágrimas resbalar por mis mejillas.

–Cariño, no te hagas daño, nadie cuestiona tus razones –me consoló Lauren, para sentarse a mi lado y consolarme.

–No sabía que mis decisiones iban a pesarme tanto en el futuro, de saberlo, hubiera tomado otro camino.

–Todos lo haríamos, si supiéramos de antemano lo que nos depara el destino, pero si tuviéramos la respuesta a todo, ¿cuál es el objetivo de vivir? –opinó Jhoath, golpeando con un dedo su barbilla.

–Bonitas y sabias palabras, Jho Jho –le felicitó Lauren.

–Gracias. Pero ya, hablando en serio, ¿qué te afecta? ¿Qué la gente lo sepa, o que Yoongi lo sepa? Sabemos que esa arpía va a querer manipularte como en el pasado, pero no vamos a darle el gusto.

» Vamos a mostrarle, que con Carol González nadie se mete, y que, de hacerlo, va a correr sangre.

–¿Hablas en serio? –pregunté, incrédula de su juramento.

–Bueno, no con la corrida de sangre, pero sí de ponerle un alto, aunque debo dejar algo en claro. Debes decírselo a Yoongi.

–Tiene razón, cariño. Él se ha ganado tu confianza, merece saber la verdad por ti, y no por otros que podrían distorsionarla –la secundó Lauren.

–Lo sé, sé que se la ha ganado y que lo merece, pero… tengo tanto miedo… me aterroriza saber que, si le entregó mi corazón por completo, no haya marcha atrás.

» Lo que siento por Yoongi no es efímero, que no desaparecerá el día de mañana, es algo más profundo que eso, sino fuera algo así, no estaría tan deseosa de contarle todos mis secretos –confesé, sintiendo mi corazón latir por la vergüenza.

–¿Esa fue una declaración de amor, Lauren? –preguntó Jhoath con curiosidad.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.