Me desperté sumamente temprano, tenia muchas cosas por hacer o mejor dicho la decoración de la plaza me esperaba, la charla de anoche fue triste pero a la vez me hizo recapacitar no debí de irme, la verdad es que no supe cómo lidiar con mi dolor, cunado mis padres murieron en ese terrible accidente, mi vida cambio de repente, mi desolación me llevo a tomar decisiones erróneas, vendí la casa porque no podía ni siquiera entrar a ese lugar, me aleje de mis amigos, en ese entonces Alex era mi novio y simplemente lo aparte y no quise volver a verlo y finalmente me fui de Invierno luz, solo quería olvidar empezar de cero sin embargo ahora empiezo a apreciar los recuerdos aunque sean dolorosos.
Mi abuela fue mi único apoyo y a pesar de que estaba equivocada en lo que hacia nunca me dijo nada simplemente me entendió y estuvo de acuerdo con lo que hice, me arrepiento por haberla dejado sola, pero desde hoy iba resarcir mi error.
Llegue al mercado del pueblo en busca de Alex.
-Buenos días, Alex. ¿Cómo estás?
-Buenos días, Emma. ¡que gusto verte! Estoy bien. -Me da un tímido abrazo.
-Gracias, recuerdas que me dijiste que me ayudarías a decorar.
-¡por supuesto! Cuando iniciamos creo que estamos atrasado.
Sonrió levemente, sigue siendo el mismo. -Considero lo mismo, debemos de empezar de inmediato. ¿por donde empezamos? -Empezamos a reír.
Fuimos a buscar algunas cosas y llegamos a la plaza.
Lo bueno es que algunos residentes habían colocado unos árboles, pero no estaban iluminados y faltaban más detalles, así que empezamos a colocar luces en los árboles. -Alex, estas luces son perfectas. ¿Cómo lograste conseguirlas?
Sonríe - Conozco a un par de artesanos locales que las crean a mano. Le explique y se sumaron a la causa. Quería algo único para Invierno Luz.
-Son preciosas. Y estas esculturas que has tallado... cuentan historias tan emotivas. -Con solo mirarlas sentías que te envolvía en una historia mágica de navidad. Alex estaba siendo de gran ayuda.
Señalando una escultura. -Esta representa la fuerza de la comunidad. Cada figura tiene su propia historia entrelazada con las demás.
-Es increíble cómo capturaste la esencia de nuestro pueblo. -Con cara de asombro.
-Siempre supe que había algo especial aquí. Solo necesitábamos recordarlo. -Tomando mis manos.
-Y la plaza iluminada así... no puedo creer que hayamos logrado tanto en tan poco tiempo.
-Cuando se trata de devolverle la magia a Invierno Luz, el tiempo no importa. Lo importante es el amor y la dedicación que ponemos en ello. -Nos dimos un abrazo fuerte.
La decoración de Invierno Luz quedo espectacular, es una obra maestra. Las luces destellan con un resplandor renovado, las esculturas cuentan historias de la comunidad y la plaza central se llena de alegría. Nuestro esfuerzo no solo embellece el pueblo, sino que también crea un lazo más fuerte. Lo cierto es que ¿cómo me perdí esto por varios años? No sé, pero gracias a mi abuela volví a sentir que Invierno Luz es mi hogar siempre ha sido así.
Dos días después…….
Había llegado el día de la inauguración, todos en el pueblo emocionados y mi abuela muy orgullosa de lo que había logrado, termine resolviendo la historia con Alex, decidimos darnos una oportunidad, ambos habíamos sufrido creo que ya era el momento de ser felices.
-Abuela antes de irnos a la inauguración quiero decirte algo. Suspire. -Perdóname por mis malas decisiones y por dejarte sola.
-No hay nada que perdonar, todo tiene su tiempo y este es el tuyo, disfruta y gracias por estar aquí, te amo Emma. -Le di un abrazo y susurre a su oído “yo te quiero más” unos toques nos hizo regresar a la realidad. Seguro era Alex.
-Es hora de irnos preciosa. -Sonreí y le di un apasionado beso el cual Alex recibió muy a gusto. -Escucho a mi abuela a toser. Ambos la miramos.
-Estamos tarde, además me da alergia tanto amor. -Salimos agarrados de la mano mientras mi abuela conversaba acerca de que ya quería nietos. ¡Jesús que hare con ella!