Les voy a contar, desde mi infancia, hasta lo que soy y en lo que me he convertido, un Arquitecto muy reconocido. Crecí superando el acoso y burla de mis compañeros de escuela solo por ser diferente, pero como ya les había dicho tengo la fortuna de contar con el apoyo de mi familia y un círculo de amigos verdaderos que desde que me conocieron estuvieron y están ahí en mis mejores y peores momentos de crisis.A los cuatro años empecé el preescolar en un colegio bonito, me gustaba ir, me sentía a gusto. Jugaba con mis amigos, pero que más me gustaba era estar solo dibujar y jugar con los bloques o juegos que la maestra tenía en el salón de clases.No me gustaba que me molestarán cuando estaba tranquilo, el ruido me molestaba, por eso usaba audífonos y escuchaba música suave, eso me mantenía en paz cuando había mucho ruido en el salón, me alejaba de los demás cuando hacían ruido.No todo era felicidad, algunos niños me molestaban quitándome los audífonos y diciéndome cosas feas para un niño de esa edad, “eres raro, adefesio, tonto” entre tantos adjetivos, ¿me dolía? Si para mí era difícil entablar una amistad, cuando me molestaban lloraba fuerte, las maestras no podían controlarme y me castigaban, se quejaban con mi padre, no querían ser mis maestras.
En la primaria fue peor, aprendí a leer a los cuatro o cinco años, me gustaba leer, leía cualquier libro, desde historia hasta libros complejos de matemáticas, física, que era lo que más me encantaba.Para cuándo cumplí seis años, por culpa de un compañero la maestra y la directora mandaron llamar a mi papá, le dieron quejas y dijeron que no podían seguir teniendo en esa institución a un niño como yo, mi padre me llevo a casa, ya sabía que yo tenía una condición que me hacía ser especial.Iba con neurólogos, me hacían muchos estudios y también comencé a ir con la tía Paola, me diagnosticaron con TEA y ella me ayudó a controlar mis emociones, a la vez le recomendó a papá un colegio en dónde había especialista en niños especiales como yo.Papá me inscribió y junto a tía Sara que regresó de Europa para quedarse a vivir con nosotros me llevaban al colegio. Yo estaba contento de volver a ir aunque no fuera el mismo, ahí conocí a mis Molly, ella era y es paciente con todos, es especialista en psicopedagogía contractual del Espectro Autismo, leyó mi expediente, por dos semanas me tuvo en observación, evaluaba mi comportamiento y mis habilidades.Junto a la doctora Paola me ayudaron mucho, a como ser un niño normal que se adapta a la sociedad, tía Sara se hizo amiga de mis Molly.
Papá, se veía muy cercano a mis Molly, los veía juntos, había días que ella iba a casa y comía con nosotros, después me dijeron que se iban a casar, claro me gustó la idea, yo tendría una mamá y un papá como todos mis amigos del colegio.Mis papás se casaron cuando yo tenía ocho años, mamá ya no era mi maestra porque ya había cursado un grado más, después nació mi hermanita, una niña amorosa que se convirtió en mi sanadora, desde bebé sentía paz cuando la abrazaba y ella era la única que había de poder controlarme en mis episodios de ansiedad.Seguía con mi hábito de lectura, pero me fui interesando por el dibujo, en mi computadora instalé un programa en dónde podía hacer dibujos en tercera dimensión.
Comencé a leer libros de arquitectura, sobre todo la moderna, su historia y orígenes, todo eso me gustaba, comencé a dibujar y a los diez hice mi primer maqueta y el diseño de la casa de mi tía Sara.A los trece años ya había vendido varios planos, obviamente firmados por un amigo ingeniero de papá y tío Mario.
Al terminar la primaria decidí irme a estudiar a un internado en Londres, en dónde estudie la universidad, terminando con dos carreras Arquitectura y Administración y negocios, mi sueño era tener mi propia constructora.
Regrese a casa después de terminar la universidad, junto con tía Sara ya había iniciado mi propia constructora, aunque tenía que ayudar a papá en la empresa de la familia en lo que Zuly se hace cargo, empieza la universidad, pero desde los quince años papá la está entrenando.
Aunque si papá le hubiera gustado que yo me hiciera cargo, sabe bien que aún se me dificulta tratar con personas a mi alrededor. Prefiero estar atrás de mis planos y maquetas, por un tiempo me haré cargo junto con Sabdiel mi primo y Zuly, los dos son los que llevarán la empresa más adelante en lo que terminan su carrera.Llevaba a la vez mi empresa y la de papá, iba de un lugar a otro, la constructora se estaba dando a conocer y mi mera era posicionarla en las mejores del país y espero hacerlo.
La importadora de la familia estaba bien, con algunos inconvenientes que pude solucionar en cuanto papá me dio el puesto de CEO, limpie el desorden que había y compré las acciones que otras personas tenían y quiénes querían desestabilizar la empresa.Zuly y Jacobo aprendían rápido, creo que cuando cumplan los veinte años tomarán el mando y yo me dedicaré a mi empresa, claro tendrán la ayuda de papá, tía Sara y la mía, los dos han demostrado ser fríos y serios en los negocios, quizá más que yo y papá juntos, se parecen más a tía Sara.
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Editado: 27.10.2024