Luna azul El regreso

Capítulo 23:La Oscuridad Desatada

La oscuridad se resistía con todo su poder. Sentía cómo intentaba arrastrarnos hacia las sombras eternas. El aire era denso y cada respiración parecía más difícil que la anterior. El ritual estaba funcionando, pero requería más fuerza de la que habíamos previsto. Los espíritus a nuestro alrededor se manifestaban, su energía envolviendo el círculo, pero la batalla no se libraba solo con ellos.

Los guerreros del campamento comenzaron a caer de rodillas, debilitados por la intensidad de la energía que los rodeaba. Sabían que su sacrificio no sería en vano, que su lucha continuaría a través de la historia, pero el miedo seguía presente en sus corazones. La sombra, gigantesca y terrible, lanzaba tentáculos de oscuridad que intentaban destruir el círculo protector que habíamos formado.

Kharos, con su espada empuñada, permaneció de pie en el centro del caos. Parecía imperturbable, pero yo podía sentir la tensión en su cuerpo. Era consciente de que esta podría ser su última batalla, pero aún así, no retrocedía. Con un grito de guerra, se lanzó hacia la fuente de la oscuridad, sabiendo que si caía, sería el primero de muchos.

Los guerreros que quedaban, inspirados por su valentía, se levantaron una vez más, dando todo lo que les quedaba. La sombra comenzó a retroceder, lenta pero inevitablemente, como si comprendiera que la voluntad humana era algo que no podía quebrar fácilmente.

El viento cambió de dirección de forma abrupta, trayendo consigo un eco lejano. Era la voz de los espíritus, que ahora hablaban a través de nosotros. El cielo se abrió brevemente, y una luz brillante iluminó el campamento, purificando el aire en su paso. Sentí cómo una fuerza poderosa se conectaba con nosotros, como si todas las almas que habían peleado antes estuvieran con nosotros ahora, dando su fuerza.

Los sabios aumentaron sus cánticos, sus voces reverberando con una intensidad sobrehumana. Era como si el mismo universo se estuviera alineando para acabar con el caos.

Laundry, que había estado ayudando a mantener el equilibrio del ritual, me miró con determinación. Sabía lo que venía. No había forma de detener a la oscuridad sin una última ofrenda. Él, como yo antes, entendía que el sacrificio personal era la única moneda de cambio que la oscuridad respetaba.

Con un paso firme hacia el altar, extendió sus manos hacia el cielo, invocando las palabras finales del ritual. El aire se llenó de energía pura, casi tangible. En ese instante, la oscuridad lanzó un ataque desesperado, pero Laundry lo bloqueó, canalizando toda la energía hacia sí mismo.

Cuando el ritual finalmente terminó, el silencio cayó sobre el campamento como una manta pesada. Los guerreros caídos comenzaron a levantarse, confusos, pero aliviados. La sombra se había desvanecido por completo, y con ella, la amenaza que había estado acechando durante tanto tiempo.

Laundry no estaba. Había desaparecido junto con la oscuridad. Su sacrificio había asegurado la supervivencia de Luna Azul, pero todos sabíamos que ese tipo de victoria siempre viene con un alto precio.

Con la oscuridad derrotada, el campamento comenzó a reconstruirse. Sabían que tenían que sanar no solo sus heridas físicas, sino también las emocionales. La pérdida de Laundry pesaba sobre todos ellos, pero su sacrificio no había sido en vano. Los guerreros comenzaron a planificar cómo proteger el campamento de futuras amenazas, conscientes de que el ciclo de la vida y la muerte seguiría su curso.

Sabía que mi tiempo con ellos estaba llegando a su fin. Había cumplido mi misión, y aunque mi esencia permanecería con ellos, la vida en el plano físico ya no era mi destino.

Mientras observaba desde las sombras, vi cómo Kharos asumía el liderazgo del campamento, guiando a los suyos con una mezcla de fuerza y sabiduría. Sabía que el futuro de Luna Azul estaba en buenas manos. Él había aprendido de mí y de Laundry, y su voluntad era inquebrantable.

La luna llena brillaba en el cielo, y con ella, una sensación de paz descendió sobre el campamento. Las cicatrices de la batalla todavía estaban frescas, pero había esperanza. Luna Azul se había salvado una vez más.

Aunque había mucho trabajo por hacer, el campamento sabía que el verdadero enemigo había sido derrotado. Las generaciones futuras recordarían el sacrificio de Laundry y de aquellos que habían caído, pero también sabrían que Luna Azul no se rendiría jamás. La luz de la luna continuaría guiándolos, y los espíritus de los ancestros siempre estarían con ellos.

Mi viaje había llegado a su fin, pero el legado de Luna Azul apenas comenzaba.

Sabía que mi tiempo en este mundo se desvanecía. Sentía cómo mi espíritu se desprendía lentamente del plano terrenal, y aunque una parte de mí anhelaba permanecer con los vivos, entendía que había cumplido mi propósito. Había guiado, luchado, y sacrificado lo necesario para que Luna Azul tuviera un futuro.

El ciclo se cerraba, pero con él, un nuevo amanecer emergía para los que quedaban atrás.

Con un último vistazo hacia el campamento, donde Kharos daba las órdenes para la reconstrucción, sentí una paz profunda. Sabía que el futuro sería incierto, pero también estaba segura de que Luna Azul estaba en buenas manos.

Con esa certeza, cerré los ojos por última vez, permitiendo que mi espíritu finalmente se disolviera en la luz.

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En el texto hay: #amor, #acción, #aventura

Editado: 07.12.2024

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