Los dos nos miramos al mismo tiempo.
— pronto — dijimos al mismo tiempo, nos volvimos a ver extrañados por nuestra pronta y misma respuesta.
— Is-la— dice mi nombre como si tuviera atorado algo en ma garganta. — ese es tu nombre cierto — asiento. — pues no lo había escuchado ¿de dónde lo sacaron?
— mi papá fue el que me lo puso — yo lo iba a dejar hasta allí pero ella me miró como esperando más — él era un viajero, le gustaba viajar, le gustaba el mar, las Islas — específico — por eso me nombró así.
— dijiste que tienes un hermano, se llama mar o algo así — se ríe un poco de su chiste seguida de todos menos por Christian.
— su nombre es Owen — continuo por que se que me miraran expectantes hasta que lo haga— se lo puso mi mamá— apretó los labios con incomodidad al recortarle— y no se el motivo.
— es menor o mayor que tu? Isla — pregunta el señor Cristobal.
— menor, tiene 10 años.
— dijiste que vives con tu papá y hermano ¿por que con tu mamá no?— que incomodo, sáquenme de aquí.
— ella se separo de papá por eso.
— vaya... — dice metiéndose un trozo de carne a la boca. — come niña , come , no has tocado tu plato y se te va a helar. — yo miro mi plato y es verdad.
— bueno la han aturdido de preguntas ¿como querían que les respondiera? Con la boca llena — reímos pero en esta ocasión solo los dos.
— y ustedes?... como se conocieron? — que pregunta más típica pero no había de otra.
— en un acuerdo de paz entre manadas — la miro de la misma forma en la me miro, expectante para que que siga continuando al hablar — él era El Alfa que llego a hacer el tratado y yo era la hermana de el Alfa al que iba a convencer, al final se pudo gracias a nuestro lazo. — la sigo mirando esperando a que continúe, ella capta la indirecta y lo hace. Me meto verduras a la boca.— al final mi hermano murió en una batalla con otra manada quedando yo al mando por mi linaje pero claro yo estaba casada así que como lo de él es mío lo mío es de él así que el acepto liderar esa manada y su hijo primogénito la de el por herencia.— asiento vaya dos manadas.
— mucha responsabilidad creo yo. — asiente.
— pero para eso se le prepara desde pequeños para que sepan cuál es será su lugar, hablando de Pequeños cuánto tendrán los suyos?— escucho una tos y miro que Christian se a atorado con su jugo. Marrie se ríe.
— no me digan — habla el señor Cristobal — pronto — todos empiezan a reír menos Christian y yo.
— come,come más para que así tengan unos niños fuertes, rápidos e inteligentes — me alienta la mamá. — aun que no dudo de eso — me mira el cuerpo o bueno lo que puede ver ya que estoy sentada. Tragame tierra.
— y bueno por que no vamos a ver unos documentos papá — insita Christian. El papá asiente.
— bien dejemos a las chicas hablar.— ellos se va. Trato de mostrarle una mirada para que tenga compasión de mi y no se vaya.
— mamá ¿que te parece el estofado de res?
— mm delicioso — sigo comiendo aun que se a helado un poco, me gusta la comida muy calentita más si es carne.— niña — le miro.
— ¿como se conocieron Christian y tu? — ay ¿como empiezo?
— yo andaba con mis amigos en el bosque y... bueno me lo encontré — trate de que mi voz no se nota la incomodidad tanto por estar aquí como por el tema.
— umm... y a una humana como tú no te pareció raro que alguien te reclamara como suya así de la nada— me dio miedo.
— si al inicio.
— ¿y ahora? — niego.
— Mira no sé cómo lo hagan ustedes pero sí sabes que al ahora formar parte de una familia de cambiantes tendrás que adaptarte a nuestras costumbres— asiento— una de esas costumbres es que toda la vida anterior, antes de conocer a su mate está acabada puesto que la mujer desde que el hombre la reclama como suya a una mujer debe servirle por el resto de su vida, Así que toda la vida que tenía se acabó hasta el momento en el que lo conociste— tuve que juntar una mueca de desagrado. Noto que ella me mira esperando a que le de la razón o diga algo pero creo que mejor me ahorro mis comentarios.
— bueno ya se adaptará Isla mamá, recuerda que para ella esto es nuevo.
— ella será humana pero si su destino fue emparejar se con un cambiante ella debe aceptar su futuro. — me quiero largar, que incomoda es esta mierda.
— mamá ¿cuando podemos ir de compras?
— puede ser hoy, piensas venir Isla? — no gracias, no las tolero a ninguna.
— por supuesto.
— perfecto, así nos conocemos mucho más. — yo como un poco más y me quiero levantar de la mesa, no aguanto estar más aquí por suerte o no Christian baja las escaleras junto con su papá.
— bueno Isla fue un placer haberte conocido pero mi esposa y yo ya no tenemos nada más que hacer aquí. — Sonrió, pero por dentro quiero chillar de alegra.
— oh no querido, Isla, Marrie y yo iremos de compras. — la cara de sorpresa de ambos no se hace esperar.
— a es perfecto. — no claro que no señor, ya no les tolero ni un segundo más.
Las tres nos marchamos a las tiendas donde hay de todo ciertamente parece la cuidad solo que menos actualizado en cuanto a edificios, puesto a que la mayoría solo son tiendas, eso si que están una de la otra pero no hay ningún edificio.
— sabes cuando íbamos te compras o le íbamos a hacerlo en nuestra forma animal —menciona la mamá de el
— Y cómo hacían con la ropa? —Digo de la manera más amable posible puesto que quería hacerlo apretando los dientes
— estamos muy acostumbrados a vernos desnudos puesto que todos somos iguales, a sí que en cuanto a eso no hay ningún tabú aquí — Sonrió apretando los dientes. Solo espero que no haya nadie más de compras hoy o mínimo ahorita.
Las compras estuvieron de lo más aburridimo, yo que me negaba por que no era mi estilo portar collares, pulseras o comprar maquillaje pero la mamá de Christian se empeño y me terminaron comprando tremendos kits de maquillaje, lo agradezco pero no me gusta, además de fingir buena cara para todo, ya hasta me dolía la cara de fingir sonreír tanto.