¿EL SUEÑO SE TERMINÓ?

De la nada todo empezó a verse oscuro, no sabía qué hacer, las casas que estaban ahí habían desaparecido, sentía como si estuviera flotando en una eterna oscuridad. De la nada empecé a escuchar voces, demasiadas que no entendía nada, intente concentrarme pero aun así no lograba entender nada de lo que decían hasta que de repente empezó a aclararse todo, me sentía mareado y me lastimaba los ojos una luz intensa, ahora podía reconocer una voz: 
-Está despertando, después de  tanto tiempo… 
Todo me era muy extraño, ¿de qué había despertado?, no sabía que ocurría: 
-¿Te sientes bien?, has estado dormido durante 5 años… 
¿5 años?, es demasiado tiempo…: 
-Llamaremos a su familia para decirles la noticia, se pondrán muy felices… 
¿Familia?, no recordaba ninguna familia, quizá por estar demasiado tiempo dormido mi mente terminó afectada… 
-Su familia ya viene en camino, ¿está listo para verlos?... 
No podía moverme pero esa voz aún seguía hablándome de una familia, no podía abrir los ojos pues esa luz seguía lastimándome. Esa voz se detuvo por un rato, después de unos minutos la volví a escuchar, esa voz femenina muy familiar como si ya la hubiese escuchado antes: 
-Su familia ya llego y quieren verlo, los dejare pasar un rato para que escuche sus voces, quizá para mañana ya pueda abrir los ojos… 
No tenía ni la menor idea de lo que hablaba, escuche los pasos de una persona entrando a la habitación, al entrar se cerró la puerta, no sabía quién era, cuando empezó a hablar empecé a escuchar sus palabras muy borrosas, como si estuviera despertando de otro sueño: 
-Por fin has despertado, creíamos que ya no lo harías…  
Después de eso todo se escuchaba borroso, lo lograba entender nada, todo empezaba a ponerse oscuro de nuevo, aquella voz seguía hablando pero cada vez se desvanecía más hasta que deje de escucharla. De la nada desperté en la cama de la cabaña, supuse que fue un sueño más, pero ahora ya no sabía cuál era la realidad, todo se veía extraño, Salí de la cabaña para continuar con la silla pero ya no había nada, había un rastro hacia adentro del bosque, decidí seguirlo para ver a donde me llevaba, sabía que era una mala idea pero aun así decidí seguirla, más adelante las marcas de la silla terminaron y empezaron una huellas demasiado grandes, las seguí, tenía que ver hasta donde llegaban sin importar el peligro que llegara a encontrar.