Luna Negra

LA MUERTE ME ASECHA

Me empezaba a sentir extraño más de lo normal, como si me estuviera desvaneciendo. Cuando iba a salir de ahí la puerta simplemente se desapareció, estaba encerrado en una habitación sin salida, me acosté en la cama para quizá así poder sentirme mejor pero no fue así, al acostarme me quede paralizado y todo empezaba a oscurecerse más y más. Cuando todo empezó a aclararse no podía abrir los ojos, era el mismo lugar con la misma voz dulce, parecía estar hablando con alguien más en la habitación: 
-Por fin pudimos calmarlo, no sabíamos si lo lograríamos, simplemente empezó con ataques repentinos… 
-Tiene mucha suerte, a esta altura ya debería estar muerto pero no es así, es muy fuerte… 
No sabía de qué hablaban pero ponía atención de todo lo que decían, quizá así podría tener alguna pista de todo lo que estaba viviendo: 
-¿Cree que debamos llamar a su familia otra vez doctor?, creo que no pasara de esta noche y sería mejor que ellos lo vieran irse para que no nos culpen de su muerte… 
-Está bien, puede que sea la mejor opción… 
Todo me parecía lo más extraño del mundo, aun no entendía porque hablaban de mi muerte, cada vez todo estaba más confuso. Me distraje un rato hasta que escuche que aquella mujer hablaba por teléfono con alguien: 
-… Necesitamos que vengan lo más antes posible, creemos que no le queda mucho tiempo de vida y creemos que quisieran pasar sus últimos momentos junto a él… 
No sabía que le respondían, solo escuchaba lo que ella decía: 
-Está bien, estaremos esperando a que lleguen a verlo… 
Entonces colgó el teléfono y se dirigió de nuevo al doctor: 
-Están en camino doctor, le informare cuando lleguen… 
El doctor salió, la mujer aún seguía ahí conmigo: 
-Al menos su familia estará contigo en tus últimos momentos… 
Ella seguía hablando pero yo estaba dejando de escuchar todo lo que decía. Volví a la habitación de la cabaña y todo era normal de nuevo, me levante y salí para ver que había cambiado, lo único que había cambiado era que la luna tenía más luz, sentía más pánico por lo que había dicho aquella voz, me sentía más mareado y sin fuerzas, empezaba a creer que si moriría. El bosque empezaba a verse más pequeño y la cabaña empezaba a desaparecer poco a poco, de la nada volví a escuchar aquella voz: 
-Te lo dije tu fin está más cerca de lo que esperas, ya no podrás hacer nada para salvarte así que empieza a aceptar tu destino… 
Quizá tenía razón y ya no había nada que hacer, entre a lo que quedaba de la cabaña, me sentía muy mareado, me acosté y cerré los ojos, rápidamente todo se puso oscuro y me encontraba en aquella habitación, no sabía que pasaría hasta que empecé a escuchar la voz de aquella mujer: 
-Su salud ha ido empeorando con el tiempo y ya no le queda mucho, si gustan despedirse de él este es el momento, los dejare solos por un momento… 
Salió y no sabía cuántas personas habían llegado a verme morir porque todos hablaban de eso, mi muerte, escuche la voz de una mujer mayor, estaba llorando como si lo estuviera perdiendo todo: 
-No creí que fuera tan difícil hacer esto, un día sales de la casa y al siguiente estas aquí sin poder despertar, no sé cómo explicar todo lo que pasa en mi mente ahora mismo, solo sé que estoy perdiendo todo lo que me queda, a mi único hijo… 
Después de eso simplemente dejo de hablar y empezó un llanto de sufrimiento, yo no recordaba nada pero todo lo que dijo hizo que salieran lágrimas de mis ojos y volvió a hablar: 
-Creí que todo sería diferente pero no fue así, tuviste que irte de la casa enojado, trate de detenerte y no lo logre, supongo que debí insistir más… 
Quería decir algo pero no podía, empezaba a sentir más cosas y a recordar algunas otras. Recordé que salí de casa de mi madre enojado por algo sin sentido. El doctor entro y hablo con aquella mujer que al final supe que era mi madre: 
-Bien tengo que decirle algo afuera... 
Los dos dejaron la habitación, la otra mujer entro y empezó a hablar: 
Eso fue todo para ti, no sentirás dolor después de esto… 
Sentí un piquete en mi brazo y poco a poco me fui durmiendo, veía todo oscuro y todas las sensaciones que tenía se fueron desvaneciendo hasta ya no sentía nada. Volví a ver el bosque y la cabaña, de nuevo vi el avión pero esta vez todo se veía real, la niña salió y me abrazo, salió una mujer por la niña y la metió a donde estaba la puerta en el suelo, yo me quedaba afuera hasta que el avión cayó al suelo y como todas mis sensaciones habían desaparecido solo veía mi cuerpo hacerse polvo, ahí había terminado todo para mí. 
 



#26111 en Otros
#3541 en Aventura
#11062 en Thriller
#4425 en Suspenso

En el texto hay: aventura, suspenso

Editado: 02.10.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.