UNA DECISIÓN QUE CAMBIA

Una vez, fuera, Owen condujo y yo en mi moto hasta el castillo, entramos
al castillo, fuera note unos coche y moto nueva.
-Valla quien ha llegado son tremendo-hablo Leo con admiración.
-Son regalo chico espero que le guste-dijo y note la tristeza en sus ojos
–vamos a entrar chicos voy a preparar algo de comer, ella entro y los
chicos me miraron.
-Que ocurrió.
-No lo sé cuando mi padres entraron a mi habitación, de repente se puso,
de seguro fue algo que pensaron.
-Pues averigua-hablo Leo serio.
-Claro –dije con un suspiro-ya lo pensaba hacer.
-Chicos he decido que seré igual a Briamna-hablo Owen con seriedad.
-Yo estaba pensando en ello también, por ello he venido.
-Saben que esto es una responsabilidad, yo pienso pedírselo ya que
quiero estar con ella, por siempre-dije suspirando.
-Bueno hay que decirle –dijo Leo emocionado.

-Yo solo espero que nos acepte-hablo Owen.
Entramos y yo me aparte de ello par ir a la habitación de Briamna, y deje
mis cosas baje, escuche las voces de los chico, me sorprendí al ver lo
bella que se veía Briamna, con una trenza y un delantal. Me senté con
calma, y sirvió la cena.
-Entonces mañana Leo y yo iremos a ver cómo van las cosa en el local
después de clase, y ustedes se irán en busca de los chico.
-Si –dijo ella y nos miro-no quiero a nadie aquí le conseguí un apartamento
bastante grande bien cerca de aquí por cualquier cosa-dijo y nosotros
asistimos y nos miro seria.- entonces están seguro de esto.
-A que te refiere.
-A que quieren ser igual a mí, les digo una vez lo sean no hay vuelta atrás.
-No te preocupe hermanita es lo que decidimos-hablo Owen.
-Yo por igual –dijo Leo y me miro.
-La decisión fue tomada además ya lo viera visto venir-dije serio.
-Claro, terminen la cena, y lleven cada uno una dos bolsa a su habitación.
Luego de cenar cada uno fue a su habitación, el primero que escuche
gritar fue Owen, cuando su grito, cesaron seré los ojos, en la cama,
extraña mente no he sentido nada. Al despertar sentí la garganta ceca y
todo mi cuerpo diferente, mis ojos miraban todo destalle de aquella
habitación, escuche a Briamna moverse en la cocina, el olor exquisito de
sangre a mi lado me izo girar el rostros y lo mire, la tome, la puerta fue

abierta y el aroma a flores llego a mí, suspire y seré los ojos. Cuando lo
abrí allí estaba ella tan hermosa como siempre camino hacia mí.
-Hola guapo-dijo un susurro, hablo y toco mi rostro le sonreí, y la jale a mí
y la bese, con un poco de temor de hacerle daño, se acerco más a mí y
ambo terminamos besándonos en la cama.
Nuestra puerta fue abierta y vimos a los chico con los brazo cruzado,
parecían molesto, le sonreí y le saque la lengua de forma infantil.
-Basta chicos deben prepararse el desayuno está listo, preparare la ropa
de viaje Javier bajen a desayunar-hablo nerviosa, mientras miraba a otro
lado.
Salimos de la habitación, y fuimos a la cocina dónde olía delicioso, nos
disponíamos a comer pero la bandeja voló a mí, dejándome asombrado,
pero empecé a comer. Cuando terminamos subí arriba para buscar mi
bulto ya Briamna no estaba allí, lo tome y baje, encontrándome la casa
vacía. Salí y encontré la encontré entrando un bulto en el maletero, fui a
dejar el mío, y me subí al coche, me la encontrándome encendiendo el
coche.
-Como te siente –me pregunto.
-Mejor que nunca-respondí mientras sonreía y bese su mejilla.
-M e alegro que sea así-me susurro, note el mapa que mostraba la
computadora.
-Valla iremos a Francia-pregunte, la escuche reír bajito.
-Sí.

-Pero y mi... -me interrumpió mientras sonreí.
-Ya mi François se encargo, de ello.
Codujo hasta la pista del aeropuerto, donde nos esperaban unos hombres
vestidos de negro elegante, tomaron nuestro equipaje y note que Briamna
caminaba al avión con la cabeza en alta con elegancia que solo puede
tener una reina, una vez entre la note tomar unos papeles y usar su laptop,
mire por la ventana.
Le estaba agradecida a François por conseguirme la dirección de los
chicos, además de tenerlo vigilado, los dos se hacían pasar por hermanos,
siempre junto me alegraba de ello, ya que la última vez que lo conocí se
estaban matando, por lo que parecía es que Argalis estaba casado con
una joven Anabela, parecía que la chica es alegre, Bradley no tenia pareja,
parecía que no le ha interesado, pero va a mucha fiesta con amigo y
trabaja de vez en cuando, pero siempre lo dejaba ya que se metía en
problema.
Pude sentir la mirada de Javier, le sonreí y le pase la carpeta, la miro por
un momento y me miro.
-Es el rebelde de la familia e.
-Claro, la vez que lo encontré Bradley casi mataba a Argalis, como castigo
pensé a verle matado, pero note que Argelis no sobreviviría por lo que lo
mordí, cuando eso yo tenía mi nueve años.
-Nueve años.
-Sí, mi fuerza mi visión todo comenzaron aparecer mientras más
crecía-hable mientras soltaba un suspiro, vi que dejo la carpeta de lado y