Capítulo 1: El último día normal
Salimos de la heladería con un bombón helado con Nico después de haber comido unas ricas pizzas y tomamos rumbo a nuestras casas que no quedan lejos por lo que vamos a pié.
—Sofi ¿Cómo irás vestida para la fiesta? — Pregunta mi mejor amigo.
—Es sorpresa Nico, espérate hasta las 20:00hs para verme— Le respondo.
—Tienes razón, es que estoy nervioso porque va a ser la primera fiesta que vamos a compartir— Me dice él.
—Yo también estoy nerviosa, esa suerte que tenemos de cumplir el mismo día— Comento.
—Si y además de que somos mejores amigos— Habla Nico.
—Y siempre lo seremos— agrego.
—Exacto—
Minutos después llegamos a nuestras casas ya que somos vecinos, nos despedimos con un abrazo y entro a mi casa, tengo que prepararme para la fiesta aunque odie los festejos, son mis únicos 18 que compartiré con Nico.
Abro la puerta y lo primero que veo es a mi mamá con mis tres hermanas organizando la mesa dulce para la noche, siendo recién las 13:00pm.
— Hola a todas — Digo mientras me acerco a la cocina.
—Vienes a casa una hora tarde ¿Dónde estuviste?— Dice mi mamá con un tono de enojada.
—Estaba almorzando con Nico, sabes que siempre ha sido así cada 14 de septiembre— Le contesto aunque se preocupa mucho por mí y eso a veces me sofoca.
— Pero igual debiste avisar— Agrega ella.
—Lo siento, no pasará de nuevo— Le contesto y me retiro del lugar.
Subo las escaleras con dirección a mi cuarto, lo primero que hago es tirar la mochila en mi cama e irme a cambiarme.
Tenemos una casa grande con dos pisos y un cuarto para cada uno por suerte.
Luego mientras escucho música me pinto las uñas, sí, todo a último momento porque no he tenido tiempo pero debo quedar bien con los invitados que vendrán.
Llegan las 19:00pm y bajo a la cocina para ver si puedo ayudar en algo.
—Sofi, vos andá a prepararte que nosotros nos encargamos de todo— Dice Leonela,una de mis hermanas.
—Bueno mejor para mí—Le contesto feliz porque siempre que me tengo que alistar necesito mi tiempo.
A buscar mis accesorios se ha dicho.
19:30pm, ya estoy casi lista pero aún me queda el peinado por lo que decido llamar a mi mejor amiga para saber si ya está llegando, ella es muy buena peinando y no iba a perder esta oportunidad.
—Tami ¿Ya llegas? —
-Justo ahora estoy en la puerta de tu casa, dile a una de tus hermanas que abra la puerta así no ven tu vestido-
-Eres la mejor-
Cuelgo la llamada y voy a avisar desde mi cuarto que le abran la puerta.
—Amelia, está Tami afuera ¿Puedes abrirle la puerta?Por favor — Como la vi primero entonces le hablé a ella.
—Bueno ya voy hermana— Contesta ella.
Entra a mi cuarto Tamara y trae con ella un bolso con peines y accesorios para el pelo.
—Es hora de hacer una reina a esta princesa — Me dice mi mejor amiga.
—Soy toda tuya— le digo entre risas.
Minutos después termina con dos trenzas y un rodete que me queda muy bien, obviamente porque lo hizo la mejor.
—Ahora sí eres toda una reina— Comenta Tami.
—Muchas gracias Tami— Le agradezco.
-No de nada, ese vestido azul combina bien con tus ojos verdes y el peinado- Me dice ella.
—Es verdad, ahora salgamos que ya es la hora— Digo mientras bajamos las escaleras.
Salimos al patio y veo a Nico que lleva un pantalón negro y una camisa azul lo cual combina muy bien con el, aparte de cumplir años el mismo día tenemos el mismo color favorito y el mismo color de ojos, es como si fueramos hermanos en otra vida.
—Buenas noches a todos soy Gerardo el padre de Sofía y les quiero agradecer por haber venido al festejo de mi hija y de su amigo Nicolás, ahora pueden ir disfrutando la fiesta, en breve les daremos la cena— Dice mi padre.
Me acerco con Tami a la mesa donde está Nico, que está reservada para nosotros tres.
—Estas muy guapo eh— Dice Mi mejor amiga.
—Gracias y igualmente ustedes, se ven super bellas — Dice él.
—Bueno ya que ahora tenemos la comida así que buen provecho— Digo y empiezo a comer mis empanadas.
Luego de comer otras preparaciones, aclaro que no quería comer demasiado ya que quiero dejar espacio para la mesa dulce pero no me pude controlar y creo que solo me queda espacio para la torta, espero que mañana quede algo de brownie con chispas de chocolate o sino me enojaré conmigo misma.
—Bueno ya que todos terminaron de cenar, los invito a acercarse a la mesa dulce y elegir lo que deseen pero recuerden que aún falta la torta —Habla Daniela, mi hermana mayor.
— Chicas ¿Van a querer algo así traigo? — Pregunta Nico.
—Gracias pero no, vamos a esperar la torta— Le respondemos ambas.
Y él con una sonrisa se levanta, ama las cosas dulces desde chiquito.
Varios minutos después, ya todos habían comido algo dulce y es la hora de la torta.
—Invito a los cumpleañeros y a los invitados a pasar a la mesa principal para cantarles el feliz cumpleaños— Habla la madre de Nico.
Nos cantan el feliz cumpleaños y debo admitir que este es el momento más incómodo para mí.
—Ahora a soplar las velas—Dice mi mamá.
Luego de soplarlas nos abrazamos.
—Feliz cumple a la mejor detective del mundo— Me susurra Nico.
—Feliz cumple a mi hermano del alma— Le respondo.
Se ponen a repartir la torta y volvemos a nuestra mesa.
—Felices 18 a mis mejores amigos— Nos felicita Tami.
—Gracias— Le decimos.
—Queremos agradecerles de corazón a todos por haber festejado con mi hijo y con Sofía sus 18 años— Dice el padre de Nico.
—De parte de ambos les decimos gracias, esperamos que les haya gustado y disfrutado la fiesta tanto como nosotros— Hablamos Nico y yo porque vemos que los invitados se están retirando ya que no pueden descuidar sus casas de noche.
Nosotros nos quedamos un rato más afuera, conversado los tres y disfrutando lo que queda el día ya siendo mayores de edad.