Capítulo 7

VAIOLET

Voy llegando a clase de medicina, veo que una chica besa a Erick en el pasillo, mientras los amigos de él lo molestan y no sé porqué pero sentí ir. Cuando recuerdo que él intentó besarme el otro día. Sus amigos empiezan a sortarme palabras ofensivas  como las que suelen decirme a diario, no les presto mucha atención pero escucho a Tony decir mi nombre con una frase sarcástica y me detengo para lanzarle una mirada a Erick. Es posible que haya contado todo, ¡maldito desgraciado! Espero una respuesta y en medio del silencio dos chicos empiezan una pelea y todo se vuelve un caos, en ese instante me llega un mensaje a mi celular.

—¡Hola Vaiolet! Espero que estés extrañandome tanto como yo, muy pronto nos volveremos a ver. Pablo— el aire no entra a mis pulmones y empiezo a tener un ataque de pánico—

Me sostengo en la pared y trato de controlarme pero me es imposible.  El miedo se apodera de mí, los recuerdos de aquella noche llegan a mi mente, lovveo entrar a habitación en medio de la oscuridad; quiero llorar y las lágrimas no salen de mis ojos, siento sus asquerosa mano en mi piel, mientras la otra tapa mi boca. Lo golpeó con mis pies e intentó escapar y ahí en ese precioso  momento me pegó una fuerte cachetada en mi rostro, me tira en mi cama y coloca un cuchillo en mi cuello que resbala causándome una herida. Al abrir ojos vuelvo a la realidad y veo a Erick que está tratando de darme respiración pero termina besándome, empecé respirar mejor y me deje llevar por su beso, sin darme cuenta todo se convierte en un momento mágico. Sus labios me transportan a otro lugar, no tengo miedo y por primera vez me entrego a mis deseos sin medidas. Lamentablemente un chico nos toma una fotografía, vuelvo a la realidad y todo acaba. No entiendo porque Erick me besa, me imagino que para sentir que él es irresistible ¡Soy una tonta!

Lo dejé sin decir una sola palabra e ingresé a mi salón de clase, con los nervios de punta y un poco tarde para variar, se me está haciendo costumbre desde que conozco a Erick.

ERICK

Todavía no creo que besé a Vaiolet, no fue planeado solo pasó y ahora no tengo la menor duda que esa chica me gusta mucho. Me parece que lo que más me llama la atención en ella es su forma de ser totalmente distinta a las chicas que conozco, la inocencia y la sensibilidad que oculta tras ese atuendo horrible que tiene. Es la primera vez que me gusta tanto una chica y mi mayor interés no es llevarla a la cama, todo lo contrario lo que quiero es conocer más de ella. Estoy seguro que muy en el fondo de su corazón está encerrada una chica espectacular. Me siento imbécil, pero estoy seguro que me enamoré.

—¡Casanova!—

—Andy por un demonio, puedes dejar de llamarme con ese estúpido apodo— 

—¡Está bien! No te enojes. Te va a salir una arruga en tu delicado rostro— me dice Andy con tono burlón.

—Eres un idiota. Necesito un favor tuyo— contestó con un poco de preocupación.

—No más dime para qué soy bueno— 

—Necesito que encuentres alguien que me tomó una fotografía besando a Vaiolet—

—Besaste el bicho raro de la universidad. No me digas que te cansaste de las rubias oxigenadas—

—¡Acaso estás celoso!—le contestó Andy un poco celoso.

—En lo mínimo, Vaiolet es linda pero me gustan más voluptuosas—

—Andy recupera esa foto antes que la publiquen y Vaiolet me asesine—

—Pues déjame decirte que es demasiado tarde, ya estás muerto—

Andy me mostró su celular y la fotografía ya estaba en todos los celulares de los chicos de  la universidad, con un escrito bastante fuerte en el que ridiculizan a Vaiolet, nombrandola   con el mismo apodo que yo le coloqué tiempo atrás. 

"El bicho raro también come hombres"

—¡Maldición! Vaiolet me va a matar, estoy seguro que va a pensar que todo fue mi plan— debo actuar rápido y detener esto antes que Vaiolet se entere. 

VAIOLET

Por primera vez siento que todos me observan como si acabaran de darse cuenta que existo. No entiendo absolutamente nada, pero comienzo a preocuparme un poco, más cuando la rubia de Erick se me acerca. De pronto aparece él y me abraza como si nada, se me acerca y me dice al oído: "sígueme la corriente, te juro que te lo voy a explicar antes que me asesines." Confieso que pensé en golpearlo, pero no se porque le hice caso. Me bajo la  capucha de mi cabeza suavemente y me besó los labios mientras yo le lanzaba una mirada asesina, mi cabello se deslizó quedando al descubierto como nadie antes lo había visto en la universidad. Los amigos de Erick nos observaron sorprendidos con la boca casi abierta sin decir palabra. Las chicas estaban en shock como si les hubiera quitado algo que les perteneciera, el único que no se veía  porque él es mejor amigo de Erick y supongo que debe imaginarse de qué se trata todo esto. Andy me conoce desde que éramos niños, mi madre trabaja para su familia y gracias a la influencia de ellos me imagino que puedo estudiar en esta universidad de chicos.

La rubia se acerca con una mirada de pocas amigas, creo que me va a golpear y Erick automáticamente me saca arrastras de ese lugar, mientras Andy nos sigue con una enorme sonrisa en sus labios. 

—¡Qué alguien me explique qué le ocurre a este imbécil antes que acabe con él!—

Al llegar al automóvil de Erick, Andy es el primero en tomar la palabra. 

—Vaiolet, antes que lo asesines a Erick, es mejor que lo escuches. Si continúas con ganas yo mismo te puedo ayudar, en verdad me pareció muy estúpida su idea, no tengo nada que ver al respecto—

—¡Gracias Andy! puedes callarte, siéntate atrás y hazte cuenta que no existes— dice Erick bastante molesto.

—Erick ¿Qué demonios te está pasando? No soy un juguete que puedes quitar y poner a tu antojo—

—De serlo serías una muñeca maléfica— contestó Andy.

—Erick me vas pagar esta humillación ¡te lo juro!—