Abro los ojos lentamente, veo todo borroso, alcanzo ver paredes blancas, un sonido pi pi pi muy molestoso, intento pararme y un fuerte dolor de cabeza no me lo permite, veo que tengo un suero en mis venas, no recuerdo que paso. Que dolor más perturbador esa horrible maquina no deja de sonar reventaré, un movimiento en la puerta me saca de mi impresión veo a mi padre, madre y hermano entrar por ella asustados, no entiendo nada.
—Hija gracias a Dios estas bien princesa, no sabes el susto que me lleve— mi padre habla con un tono preocupante, estoy en júpiter lejos de lo que sucede, sus brazos me envuelven como si su vida dependiera de ello.
—Papá no entiendo, ¿que paso?.
—Hija hermosa quieres matar a tu madre —ver el rostro de mi madre preocupado es para realmente asustarse, no suele hacer estás cosas.
—Hermanita querida, no sabes el susto que me he llevado, cuando nos llamaron del colegio por haberte caído, aun no quiero quedarme sin mi mongola favorita.
De repente me da un dolor en la cabeza que me hace recordar, la chica, Parck, yo interviniendo, mi chofer, luego no supe mas de mi hasta orita.
La puerta se abre dejando ver a un guapo doctor de ojos verdes, parece mandado hacer en la repostería, fuerte con una estatura perfecta. Si por algún motivo deciden mantenerme internada no lo impediría con tan buen cuidador no puedo pedir más nada.
—Veo que ya despertó señorita Castillo, soy el doctor Alejandro Sánchez estoy a cargo de su cuidado— posee una voz ronca que me hace querer secuestrarlo y llevarlo a mi casa para que me atienda todas la noches como se debe.
—Awww...gua-p.... doctor....no recordaba nada hasta orita que mi familia ha llegado.
—Señorita es normal que al principio no haya recordado nada debido al golpe que recibió en la cabeza, no representa ningún síntoma de gravedad, no hay cuàgulos de sangre ni nada de que preocuparnos, el golpe no fue tan fuerte se ha desmayado por el impacto, les mandare algunas píldoras para el dolor y se podrá ir a su casa a descansar.
—Muchas gracias doctor, nosotros nos encargaremos— agradece mi madre.
—Eso es todo señorita Andrea podrá seguir sus actividades normales. Me gustaría que pase uno de ustedes a firmar el alta, hasta luego señores Castillo— ¡ay no te vayas¡, quedate la noche, la mañana, el dia, es mas la vida entera.
—Eeeh... mu..chas gracias papa... doctor —me reprendo mentalmente gracias a Dios frene antes de terminar la oración, que pensara el pobre doctor de mi dirá que soy una paciente con traumas.
—Señorita Andrea ya escucho al doctor, nos vamos a casa a descansar el resto del dia, mañana no iras a clase, ya presentamos unas excusa, como nos dijeron que tropresaste, no tendrás problemas con eso.
Miro a mi madre anonadada, con que eso dijeron que hipócritas de quinta, prefiero no decir nada y dejarlos con la idea que le dieron sobre lo que paso, no quiero mas problema ni preocuparles. Luego de varios minutos el doctor llega con el alta. Mis padres y hermano salen para que me pueda vestir, utilizo la misma ropa y ya lista salgo, nos dirigimos a la camioneta directo a casa, haber que nos depara...
*********************
Me levanto con el ruido de la alarme, esta alarma esta loca, hoy no hay escuela ¡que emoción!, sere la unica que se emociona como una niña de cuatro años cuando no va a la escuela.
El dia de ayer transcurrió rápido luego de llegar a casa, mis padres y hermanos no dejaron de darme mimos, me trataron mejor que la reina de Inglaterra sobre todo mi mamá es raro no es muy afectiva que digamos no demuestra lo que siente, pero se que nos ama a su manera, Yeison estaba preocupado pero al verme bien se tranquilizó, le tuve que decir que no le diga a mis padres lo que paso me costo convencerlo, aunque al final acepto, mis amigas se volvieron locas cuando se enteraron querían venir a dormir conmigo pero les dije que no se preocuparan que estaba bien dure una hora convenciendolas y no pude del todo porque me dijeron que tampoco asistirían a la escuela, querían ir a matar a Parck ayer tuve que darle una pastilla tranquilizadora por telefono y hoy quedamos en salir. El dia tan esperado chicas como acordamos y aqui me encuentro levantada, tomando un rico baño para el bonito dia de hoy que me espera con mis amigas, amanecí feliz, feliz.
Prendo mi pequeño radio que tengo en mi habitación, pongo la musica perfect de Ed Sheeran es una de mis favorita, es una canción con mucho sentimiento, cada letra va directo al corazón. Con la música a un sonido normal dejo caer cada gota de agua en cada curva de mi cuerpo sintiendo como relaja cada músculo.
Luego de varios minutos salgo de la ducha, voy directo a mi armario a elegir la ropa de hoy, me decido por algo sencillo, short, una diminuta blusa negra y tenis Adidas. Escojo esta ropa relajante ya que caminaremos muchos, vamos a comprar los vestidos de la graduación ya que mis amigas y yo decidimos hacer una sola fiesta en mi casa organizada por mi querida madre. Los padres de Carolina y Alejandra viajan mucho no tienen tiempo de preparar nada, no quisimos que ningún diseñador haga el vestido queríamos elegir algo nosotras misma fuera de lo normal. unos toques en la puerta me hacen volver a la realidad, al abrirse veo a mis locas amigas entrar por ella.
—No sabes el susto que nos pegaste, ¿Cómo estas?, ¿Cómo te sientes?— Alejandra me abraza con entusiasmo.
—No sabes quise ir a buscar al imbécil de Parck y sacarle los ojos, solo porque me has detenido no pude ir a su casa. ¿Que te hizo? —me volverán loca no respondo una y Carolina me pregunta otra, amo que se preocupen por mi, pero me asfixian.
—Tranquila chicas estoy bien, hoy es un dia para disfrutar y olvidar todos asi que moviendo las nalgas.
La verdad me emociona salir de compras, comprar los vestido es algo que me encanta. salimos de la habitación, bajamos las escaleras encuentro a mi hermano se ve tan guapo, con ese traje azul oscuros resaltan sus ojos azules como el mar.