Cuando anduve perdido y sin salida, él señor me rescato

Perdido ando por la vida porque Jesús no a tocado todavia mí corazón, ando perdido entre vicios, y alcohol e caído y no me puedo levantar ¿porque será que  Dios no me mira todavía? Se que él va recorriendo  y viendo a dónde e dirigido mí vida tantas noches de desvelo, tantas noches con lágrimas recorriendo mí mejilla sentado en el suelo con vinos y con cigarrillos siento que la soledad se hecho mí fiel compañero.
Mis amigos aún están conmigo pero yo siento un vacío en mí que se a instalado en mí pecho, no logro cambiar sigo entre estos malditos vicios, cada vez voy cayendo al vacío mis seres queridos y mis amigos se alejan cada día más, yo sigo sin cambios trabajando solo pienso solo en la mala vida no veo más el sol sigo tomando vino en un rincón de mí habitación cada vez que veo una copa más vino quiero ya no veo quien soy porque esta persona en la que me e convertido no soy yo entre lágrimas y gritos sin sentido sigo sin poder ver la luz en medio de la oscuridad.
Siento que alguien toca mí puerta  tambaleandome llego pero al abrir no encuentro a nadie al sentarme de nuevo cuando quiero beber el vino prendo mí cigarrillo vuelven a tocar mí puerta, vuelvo a levantarme al llegar y abrir la brisa fresca me golpea pero adelante mío no hay nadie miro a todos lados y nada cuando vuelvo a sentarme y lloro miro mí vino mí cigarrillos la botella aún no abierta el cenicero vacío sin cenizas aún vuelven a tocar mí puerta abro la puerta vuelvo a asomar mí cabeza viendo a todo lados con ojos curiosos siento que las lagrimas que ocurrían por mis mejillas se va calmando no veo a nadie solo la farola prendida titilando en la esquina vuelvo a cerrar la puerta mí ojos van directo a las botellas, las cenizas esparcidas ya no me siento con ganas de seguir sofocandome adentro salgo afuera quiero llorar gritar, zapatear, pero las lágrimas ya no quieren salir alzó mí mirada a los cielos las estrellas brillan con tanta intensidad cuánto tiempo a pasado que ya ni los pequeños detalles e ponido atención y pienso en Jesús de pequeño me encantaba escuchar a mamá hablar como se sacrificó por amor a la humanidad para salvarnos del pecado aún cuando el había sido inocente como con amor tan puro sincero nos amo.
Y yo aquí encontrándome tan perdido sin importarme lo triste que se pondría si estuviera mirándome en esté momento, ya no quiero encontrarme en está situación ser preso de los vicios atado al pecado enojado conmigo mismo vuelvo adentro agarró mí botella lo tiró por la pileta viendo cómo el líquido se escurre, llamándome tentandome  apagó el cigarrillo que quedó prendido en una esquina observé con atención mí habitación no había nadie, me senté en mí cama y ore pedí a mí Padre Celestial que me alejara de los vicios que me perdonará, que me ayudara a no ser débil que entrara a mí vida y consquitara mí corazón que mí vida se sentía vacío y sin sentido quería complejar cada día el cielo azul, por las noches ver las estrellas y dar gracias al por un día más de vida. Pedirle cada día que me sacara de la mala vida, quería ser fuerte y valiente antes las tentaciones.
Salí a la calle mire alrededor y por primera vez después de tanto tiempo pude ver lo que era la vida , vi niños jugando en la vereda, y el sol tan radiante fuy al supermercado ya no mire el vino, compré una galletitas y una leche todo el trayecto hiba hablando con Jesús le hiba contando lo que había hecho con mí vida todo estos años, él tiempo pasaba y yo envuelto en la oscuridad con lágrimas en mis ojos, llego a mí casa abro la puerta el paquete estaba esperandome en la mesita de luz lo miro lo prendo a punto de fumar y tocan de nuevo mí puerta salgo no hay nadie, vuelvo a entrar apagó mí cigarrillos miro la pared había un reloj colgado, tik,tok,tik,tok la hora pasa llega la noche vuelvo a insistir a Dios ruego por mí vida entre lágrimas no podía dejar esos vicios. El tiempo pasa un día caminando veo una iglesia y con pasos lentos pero decididos batallando con mí mente que no me deja entrar y dar un paso más, agachando la mirada entre y fuy derecho donde estaba la Cruz arrodillado y llorando como un niño pequeño, dejé mis cargas y pedí perdón al padre al salir me sentía diferente liviano como una hoja flotando en el aire y haci poco a poco dejé que la luz del Padre entre a mí vida y lo logré dejé esos vicios hoy un hombre nuevo diferente hoy puedo decir orgullosamente que que gracias a Jesús y a mí voluntad soy libre como un pájaro dejando que el padre me guíe que sin el no hay vida cuando eres marcado por Dios aunque no puedas estar de pie el te levanta . AL & JM