Luego de ir a mi trabajo, pagar la comisión y firmar el informe, tengo mi empleo de nuevo. Tengo que ir mañana en la tarde a sacar la mercancía, el cual ya estaba en la habitación donde se guarda todo. Fuimos al hospital para que le quitaran los puntos a Max, el cual solo tenía seis porque los otros tres ya los había soltado solo. Y claro, aprovechamos para hacer lo que tanto nos ansiaba.
Bestia se rasca la nuca y mira cada gesto y paso que hace el doctor al subirme la camiseta y colocarme el gel, mi corazón late con velocidad y miro a Max que parece igual de nervioso, o puede que mas.
Miro la pantalla cuando el doctor pasa el aparato por todo mi vientre, el pelinegro aprieta mi mano cuando el también mira, lo único que veo es blanco y negro, hasta que el doctor dice las palabras mágicas.
— Tenemos actividad. — Pronuncia, dejándome más nerviosa que antes. —Sí, aquí.
El señala una sombrita en medio, sacándome lagrimas.
—Déjeme ver si entendí—Dice Maximiliano, más nervioso que nunca. —Cuando dice que hay actividad es porque si hay algo ahí dentro, ¿no?
—Correcto.
—Y lo que está ahí dentro es...
—Sí, es su hijo o hija, señor Lee.
El pone una mueca, mirando al doctor.
—Es demasiado pronto la palabra "Señor", demasiado pronto.
Me bajo la camiseta luego de quitarme el liquido con una toalla. El doctor anota algunas pastillas para mí y apunta unas cosas que no entiendo, grapando las imágenes impresas en el mismo papel.
Luego de salir del consultorio, Max y yo salimos con una sonrisa, tomados de la mano. Nos acercamos al coche, la herida ya la tiene casi cicatrizada y ya no hay molestias, así que puede manejar como solo él sabe hacerlo.
Nos acercamos a casa de mi amiga donde al llegar a la piscina, me encuentro con una escena completamente desconocida.
Mi madre tiene a mi sobrina acostada en sus piernas mientras habla con la madre de Nicolás, Demián esta besando públicamente a Lesly, cosa que solo lo hacía cuando estábamos nosotros, pero ahora lo hacen en la piscina, Dylan y Luke están firmando algo con Alanna en la mesa y Cris a su lado, Adam está hablando con Alex y Nicolle está comiendo con la abuela.
— ¿Qué es esto? —Pregunto, mirando a Maximiliano.
—Prométeme que pase lo que pase, vas a confiar en mí. —Me dice, acariciándome las mejillas. —Si todo se vuelve un caos, prométeme que solo dejaras que yo solucione.
— ¿Qué tramas?
—Promételo, Hannah.
No llego a responder porque veo a dos policías acercándose, poniéndole las esposas al pelinegro.
— ¿Qué...? ¿Se puede saber qué coño es esto?
Otro agarra a Demián, causando que Lesly se ponga histérica, jalando y golpeando al policía. Dylan es esposado por Alanna, dejándome en un estado de shock.
Alex se acerca a mí, y me jala del brazo para que me aparte, pero reacciono y evado el agarre. Me giro a Max que espera a que reaccione de otra manera, pero no sé cómo quiere que reaccione. Suelto una bofetada, dejando que las lagrimas caigan.
— ¿Qué mierda pasa contigo? —Le suelto.
—Hannah, confía en mí.
— ¡No! —Lo empujo, haciendo que el policía lo suelte. —No me hagas esto, Max. Un día prometiste que no lo harías.
—Si quieres que salga de esto, déjame entregarme —Me dice. —Quise hacerlo al principio y no me lo permitiste, dejamos que todo empeorara y sabes muy bien que ya no puede ser así. Ya no estamos para tomar riesgo.
Los policías no parecen malos, y Alanna no parece de acuerdo con esto. Entonces sí, se están entregando, los cuatro.
Luke se acerca cabizbajo, partiéndome el corazón, porque ha sido la primera persona que conocí en ese mundo, siempre le huía a todo que no fuesen las carreras, y por una trampa de Josef, también cayó. No puedo mirar a Demián esposado ni a Dylan, cuando fueron quienes no me juzgaron cuando tomaba malas decisiones en contra de ellos, y no puedo mirar al pelinegro siendo esposado porque él no es ningún delincuente, solo ha sido un chico que buscaba desahogarse y cayó en malos pasos, y quizá lo hacía por gusto, pero no es una mala persona.
—No lo hagas—Le suplico. —Hay muchas opciones para salir de esto.
— ¿Cómo cual? Si me hago el ciego y el sordo, sales perjudicada tú, te golpean, intentan secuestrarte, y no lleguemos a ese día en que en el piso cuando estabas tú y Lesly solas, habían entrado y casi las consiguen. —Me suelta, arrugándome el corazón. —Demián tiene que proteger a su novia, y haciéndolo es entregándose al igual que Dylan, para no perjudicar la carrera de Alanna y mantenerla fuera de peligro, y tu ya no eres solo mi responsabilidad, no puedo arriesgarme a que más adelante me lamente en el suelo por mis errores.
El labio inferior me tiembla y saboreo mis lágrimas.
—Tú y lo que está dentro de ti, esta mi presente y mi futuro—Murmura—Tengo que corregir mis errores porque quiero dejar de ser Bestia, Hannah. No quiero serlo. No lo hago por mí, lo hago por mi familia.
—No quiero ir a visitarte en la cárcel, Max...—Le digo, apretando los labios. —No puedes permitir esto, y sé que no soy la única que lo piensa.
Miro a Dylan que me asiente con la cabeza, Alanna evita mi mirada, Demián intenta calmar a Lesly, Nicolle se seca las lágrimas, Adam tiene a su hija, mi mamá mira todo con cierto pesar al igual que la mamá de Nicolás, Alex sigue estando a mi lado, apretando los labios.
—Tenemos planes, Max.
—Y siguen estando, por nada en el mundo voy aplazarlo—Me responde—No voy a dejarte sola, ¿vale?
Asiento con la cabeza, resignándome.
—Si no vuelves —Advierto, quitándome las lágrimas—Tendrá el apellido de otra persona.
Sonríe, acercándose para besarme.
—Tenemos nuevas coordenadas. —Avisa el policía que estaba intentado esposar Demián, que claramente lo hizo cuando perdió la paciencia con Lesly y la empujo a la piscina, poniendo de mal humor al moreno, pero no puede decir nada porque era la única manera de que Lesly lo dejara hacer su trabajo.